RESCATE FINAL

Parte 8

—Voy a ir a reclamar el trono del Infierno, es la única solución posible —dijo Sam.

Todos reaccionaron hablando a la vez

—¡No! —exclamó Castiel

—¿Pero qué dices Sam? —dijo Mary

—¿Estás loco chico? —gritó Bobby

—¿Que, por qué? —preguntó Jack.

Jesse no dijo nada pero miraba a todos inquieto, Rowena frunció el ceño, trató de adivinar cuales eran las intenciones de Sam, creyó ver lo que él quería hacer pero le parecía demasiado arriesgado. Charlie estaba sorprendida, pero suponía que Sam tendría una buena razón para decir lo que había dicho, prefería esperar que les explicara su plan antes de oponerse.

Nailynn lo miraba horrorizada, no comprendía porqué Sam podría haber dicho semejante cosa.

—Sam, está ocurriendo de nuevo, los poderes te están afectando, no puedes pensar racionalmente —dijo Castiel alarmado, creyendo que Sam se estaba volviendo loco.

—Es la única solución, ¿no lo entiendes Cass?, tenemos que recuperar el cuerpo de Adam, solo él pude contener a Mikel sin desintegrarse para que Dean pueda matarlo definitivamente —Sam se volvió a su madre, la tomó de las manos, le tocaba explicarle que John había tenido otro hijo.

—Mamá, después de tu muerte papá tuvo otro hijo, Adam. Dean y yo no supimos de su existencia hasta muchos años después, papá no quería mezclarle en la vida que llevábamos nosotros, es una historia larga, pero lo que importa es que Adam es junto con Dean el perfecto recipiente de Mikel. Sin embargo, ahora está muerto. Adam le dijo sí al Mikel de este universo cuando luchábamos para detener el Apocalipsis, se quedó en la jaula con Lucifer cuando Cass me sacó de allí hace años. Lucifer mató a ese Mikel, pero el cuerpo de Adam permanece en la jaula, está incorrupto, ya que la jaula es atemporal.

Mary lo miraba tratando de asimilar toda la información condensada en esas pocas frases, los demás que no conocían la historia de Adam también trataban de seguir el discurso.

Sam se volvió a Cass.

—¿No lo ves Cass?, debo ir allí y reclamar el cuerpo de Adam. Jack, Jesse y yo paralizaremos a Mikel, Rowena hará un hechizo por el que trasladará a Mikel del cuerpo de Dean al de Adam y Dean podrá matarle. Es sencillo.

—No Sam, es muy peligroso —dijo Castiel—, Dean nunca estaría de acuerdo con este plan, buscaremos otra solución.

—¿A qué otra solución te refieres Cass?—contestó Sam enfadado por la estrechez de miras del ángel—, se nos acaba el tiempo, ¿adónde trasvasaríamos a Mikel?, ¿a uno de nosotros, a algún cazador que nos ayudara, a un pobre humano elegido al azar? No, la única solución es Adam. Adam ya está muerto, y puede contener a Mikel.

No hay tiempo para debates, y lo sabes —dijo Sam mirando a Cass a los ojos, tratando de hacerle comprender que debía apoyarle en su decisión—, solo deseo recuperar a mi hermano, Dean se ha sacrificado por mí siempre, yo... se lo debo—dijo Sam bajando la mirada tragando en seco lágrimas que no quería derramar— No encontraremos un plan mejor y cada minuto que pasa Dean está siendo torturado por Mikel, y yo no puedo permitirlo, por favor no trates de detenerme, ya le he fallado a Dean demasiadas veces. Haré lo que haya que hacer. No esperaré inútilmente a que sea demasiado tarde, le rescataré cueste lo que cueste.

Levantó la cabeza con determinación y fijó una dura mirada en cada uno de ellos