Parte 5

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Desperté muy temprano, Salí en busca del segundo guardián guiada por la dirección que me había proporcionado Katze el día anterior. Mientras iba de camino al lugar se figuró frente a mí un especie de esfera mágica de un color amarillo muy brilloso, la seguí y luego de unos minutos esta desapareció dejándome en la nada; de pronto sentí que alguien se aproximaba, estaba lista para darle una buena paliza a quien quisiera dañarme pero eso nunca paso, era nada menos que el segundo guardián, me afirmo que no temiera pues no me haría daño, me dijo que su nombre era Vogel y me conduciría al planeta que el resguardaba.
Continuando con mi viaje, seguí a Vogel junto a Daemonion por un poco más de una hora para llegar al portal, pasamos sin ningún problema como el anterior, al entran en este me topé con un mundo muy diferente a Pangea o África, lo primero que observe fue un gran destello de luces por todos lados y unas grandes columnas que me dejaron impactada, era fabuloso. Vogel me dio la bienvenida al planeta y me dijo que era el planeta 212 o planeta amarillo y ahora que lo pienso bien la esfera que apareció frente a mi antes de encontrarme con Vogel también era amarilla, creo que las esferas representan de algún modo al planeta.
Busque a Daemonion con la mirada, ¡Qué gran compañero, siempre se pierde! lo busque mucho y no lo encontré hasta que vi caminar a una figura muy colorida, elegante y presumido. En ese momento pensé que

era Daemonion quien más tendría ese porte de creído y en efecto era el, me aseguro que estaba bien y Vogel me dijo que era un pavo real. El pobre pequeño de Daemonion aún no se acostumbraba a sus transformaciones asombrosas y en realidad yo tampoco. Estuvimos admirando el lugar por
mucho tiempo hasta que callo la tarde y de una manera asombrosa se alzaron unas plumas
muy coloridas del cuerpo de Daemonion, están formaban un maravilloso arco, fue algo mágico. Simplemente me encanto.
Caminamos tanto que de un momento a otro estábamos en una especie de fiesta, pero no como la que había en áfrica si no algo más, en el cielo había destellos con luces de colores. Había mucha alegría y todos se trataban como si fueran una gran familia, era algo extraño hasta se parecían físicamente, me encontré con un espejo; me vi reflejada y me dije que era muy parecida a ellos eso me alegro quizás podría encajar con ello, me dedique a seguir sus pasos de baile algo ostentosos pero muy creativos.
Al pasar la fiesta me regrese a la parte de las grandes columnas en busca de Daemonion y Vogel a los cuales hace rato no los veía por la dichosa fiesta, quería saber algo más de este planeta y tendría que ser pronto ya estaba anocheciendo y mañana tendría que partir al siguiente planeta.
Los tres nos encontramos en un pequeño banco que estaba cerca de las columnas y simplemente nos narramos unos a otros nuestra experiencia en aquel planeta, les comente todo lo que disfrute de la fiesta. Vogel dijo que se marcharía pronto pues tenía cosas que hacer, Daemonion comento que en este
planeta el sol era más resplandeciente que en cualquier lugar que hubiera visto. Dormimos en un
cómodo hotel, muy sofisticado y al despertar me di cuenta de que el sol también salía muy rápido y sumamente fuerte.

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