Y llegaste así

Capitulo 2

Desperté con los pies de Luisa en mi cara, faltaban 5 minutos para que el despertador sonara, así que me levanté suavemente y lo desactive, luego fui al baño, tome una ducha,me vestí, me cepille los dientes y el pelo y salí del baño.

Luisa seguía dormida y no la desperté. Agarré el celular y vi que tenía 3 mensajes de Andrea:

1. Te importaría llevarme hoy, mis padres no pueden.
2. Me llevas plis.
3. Lo tomaré como un sí, te estaré esperando fuera de mi casa.

Baje a desayunar, y para mi sorpresa mi mama me había preparado huevos con tocino, siempre lo veo en las películas y desde que lo prove, me encanto.

Buenos días-me dijo mi madre

Hola, Luisa se durmió con migó anoche-le conteste

Si las vi, bueno es mejor que te apresures, no quieres llegar tarde el primer día-me dijo

Si,tienes razón, bueno, mira la hora que es, me tengo que ir, hasta pronto-le dije mientras salía de la casa.

La verdad es que quiero mucho a mi madre, pero desde que mi padre nos dejo, no es la misma y la verdad me he separado un poco de ella.

Cuando llegue a la casa de Andrea, ella ya estaba afuera y no pude evitar reírme por la cara que tenía, era como sí una tormenta le hubiera pasado por encima. Normalmente es muy sofisticada y arreglada, lo de hoy debió
haber sido cosa de primer día.

H
O
L
A-me dijo notablemente enojada

Que hice ahora-le dije tratando de no reir

¿Sabes cuanto tiempo te he esperado?-me dijo

No es mi culpa que te levantes tan temprano-le dije-como sea vamos, o quieres llegar tarde

Todo el camino ella me hablo de conocer al chico de sus sueños y enamorarse y bla bla bla, la quiero, pero sus fantasías románticas a veces me irritan.

Llegamos cuando faltaba un minuto para que soñara la campana, y en mi instituto se tomar la puntualidad muy enserio.

Llegamos al salón y la primera clase era ciencias ( lo peor) y para mi sorpresa Andrea me abandono porque vio a un chico que le gustaba mucho,Sebastián creó, pero eso no justifica dejar a tu mejor amiga.

Gracias-le dije en silencio

Habían un par de sillas vacías al fondo del salón así que me senté en una, el profesor no había llegado así que saqué mi celular y me puse a jugar Candy crush.

Entro al salón precisamente el chico al que por poco atropello y yo solo decía que no se siente aquí, por favor aquí no, para mi suerte tomó la silla a mi lado. Parecía que un día que comenzó tan bien se venía abajo.