Capitulo 14

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Nos levantamos, ya era sábado por la mañana y a modo de disculpa, james me había invitado a un Arcade (centro de juegos) porque se le habrá ocurrido, Sebastián.

Que tal amiga, hoy vamos al Arcade con los chicos-me despertó Andrea

Hay, déjame dormir-le dije tirándome una almohada.

Se quedo en silencio así que abrí los ojos y sólo la puede ver acercándose y sacándome del saco de dormir.

Le saque la lengua.

Deja de chillar, preparemos el desayuno-me dijo sacándome la lengua

Preparamos tocino, ummmm, cuando casi estaba listo Luisa bajó y nos sentamos a comer.

Donde puedo tomar un baño-me pregunto Andrea

Arriba, tercera puerta a la derecha-le conteste con señas.

Quien me va a cuidar-me pregunto Luisa.

En la mañana yo en la tarde Bárbara.

Bárbara era nuestra vecina, ella estudiaba en las mañanas y cuidaba a Luisa en las tardes.

Puedo volver a jugar-me pregunto

Yo asentí, igual yo también iba a subir a darme un baño.

Nos pasamos la mañana viendo los juegos del hambre y en llamas y a la hora del almuerzo ordenamos a domicilo, si, somos tan saludables.

Ya llegue-dijo Bárbara

Que bueno, mira, llegamos cerca de las 6:30, yo te pago cuando llegue-le dije a Bárbara

Tomamos un taxi y al llegar encontramos a los chicos

Hola, andre-le dijo Sebastián a andrea tomándole la mano

Que tal meli-me digo james acercándose a mi.

Sí crees que te dejare tocarme con sólo perdonarte estas mal-le dije sería

Que?-me miro confundido

Era broma, idiota-le dije lanzándome a el y besándolo, amo sus besos.

Llegamos al lugar, yo no lo conocía, pero al llegar era

Era GENIAL!!!!

Habían un millón de juegos, de todo tipo era como estar en shock.

Y bien, esto es suficiente para quedar bien con tigo-me dijo james

Déjame pensarlo-le dije yo-claro que sí, vamos a jugar.

Estuvimos juntos todo el tiempo, jugamos un mini baloncesto, uno de pegarle a un insecto y uno de pistolas de agua.

Voy a comprar algo para tomar-le dije a james

Ok-dijo bufando

Hey, no me voy a ir-me dije

Y me beso, lo odio, sus labios son suaves y me dejan en trance, algún día, no le responderé.

Cuando estaba en camino a la tienda de sodas, alguien me agarro del brazo y me empujo contra la pared, cuando se me quitó un poco el mareo del golpe logre ver quien era, el era....

Y llegaste asíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora