El ataque del Makara

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Continuamos nuestra travesía marítima durante unos días, durante ese tiempo conseguí hacerme de valer en el barco y el capitán me acogió e instruyó como a un hijo, me permitieron ver a Gloria a menudo con la que comencé a intimar de una manera más profunda, dejando de lado nuestra amistad para embarcarnos en un romance más sentimental que pasional.

Un día mientras me dedicaba a mis entrenamientos diarios, el barco se estremeció fuertemente, después, el navío se detuvo súbitamente por orden del capitán, quién puso el dedo índice en los labios pidiendo silencio. Una sensación inquietante ascendió en forma de escalofrío por mi espina dorsal, el mar estaba en calma, demasiado en calma a mi parecer.

-¡Marineros a las armas¡- gritó el capitán.

Alertados, fuimos apresuradamente a la armería. Una vez me até el arco de cristal al Cinto, el barco recibió una nueva sacudida más potente que la anterior, que hizo que nos tambaleáramos.

-¡protege a Shashi!- me gritó Daryam.

La busqué con la mirada, se encontraba a pocos metros de distancia, así que corrí hacia ella y la coloque a mis espaldas. Una nueva sacudida hizo que contuviéramos la respiración aterrados, no sabíamos a que ser nos enfrentábamos, pero por la fuerza de sus sacudidas debería de tratarse de uno enorme.

El barco recibió varias embestidas más, cada una más potente que la anterior, hasta que de repente emergió desde las profundidades el hocico de un monstro aterrador.

-¡Es Makara! - gritó un pirata alertado.

El Makara es un monstruo de la mitología hindú que tiene el poder de adoptar diferentes formas, esta vez tenía el aspecto híbrido entre un cocodrilo y un pez. Su cabeza era de cocodrilo y abría sus enormes fauces repletas de dientes, como espadas sobre el barco. Gloria gritó aterrada tras de mí.

Los piratas asaetearon flechas al monstruo y estocadas sobre su hocico y patas, pero su piel era lo suficientemente dura como para que las flechas se rompieran en miles de pequeñas astillas nada más colisionar con ella, la mayoría de los que se acercaban acababa devorados por esa enorme bestia que gruñía de ira.

Decidí ayudar en algo, pues en mi poder tenía un arma mágica que podría utilizar contra el Makara, así que idee un plan

-¡Daryam!- grité para llamar la atención del capitán - necesito un señuelo, para colocarme en el carajo y disparar el arco del mar. - El capitán asintió, ofreciéndose el mismo para hacer de señuelo.

Antes de poner en marcha el plan debía proteger a Gloria, así que la bajé a la bodega, luego subí al carajo, desde ahí arriba hice una señal al capitán, quien se colocó en posición e intentó llamar la atención del Makara pero no funcionó, en cambio la bestia olisqueaba algo que parecía oculto en la bodega.

-Busca a Shashi - dijo el capitán - ella tiene que ser el señuelo.

-¡No!- Grite - no pienso ponerla en peligro-.

Pero era demasiado tarde, Gloria expectante a la situación sabía que tenía que ser

ella la que distrajera al monstruo, así que se puso al lado del capitán.

Al instante el Makara giró su enorme hocico en dirección a Gloria, la criatura la miró con furia asesina, justo antes de que el monstruo saltase sobre ella y el capitán, disparé apresurado y certero una de mis cinco flechas, que se clavó rápidamente en el ojo dorado del Makara, quien gruñó de dolor. Aún así no había surtido efecto, la bestia, ahora con un ojo tuerto volvió a dirigir su furia asesina contra Gloria, aterrado grité de impotencia, entonces algo sucedió, el monstruo poco a poco se fue convirtiendo en una estatua de cristal, hasta que una vez fue por completo de cristal, se hundió por su propio peso.

Se hizo el silencio, la pesadilla había acabado, habíamos pasado las tres pruebas con éxito.

-La prueba del valor ha sido superada gracias a Shashi luz de luna, quién con su valentía permitió que Bhaskara, el que trae la luz, pudiera acabar con el Makara- dijo el capitán dándome una palmada amistosa en el hombro.

Así pues, proseguimos nuestro rumbo hasta el fin del mundo en busca del dios Váruna.

VárunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora