Querido lector:
Ahora procederé a contarte la historia de el como funcionaba nuestra relación y el como termino.
Durante mes y medio nuestra relación parecía estable y parecía que no iba a terminar nunca, claro peleábamos o nos molestábamos entre nosotros, pero nunca fue algo fuerte por lo que peleábamos, eran peleas por exceso de celos de su parte y de vez en cuando mías, o eran peleas por alguna acción o frase imprudente cosas que se podían arreglar y continuar sin problemas.
Una noche de algún viernes ambos estábamos muy irritados por lo que había sucedido a lo largo del día, no con nosotros si no con otras personas y con nuestro entorno, yo por lo general hago de lado mis problemas y mis sentimientos para ayudar a las demás personas, me gusta anteponerlas en todo lo que en mi respecta, pero esa noche simplemente no pude hacerlo.
Esa noche yo sentía que por una vez lo mío era importante y no podía hacerlo a un lado, solo por una vez quería que el me ayudara con mis cosas, y como no hice de lado mis cosas para ayudarlo a el, el se molesto y comenzamos a pelear, no recuerdo porque comenzó la pelea solo se que comenzó de una estupidez y se todo fue creciendo hasta que ya ninguno podía controlar lo que decía y lo que sucedía entre ambos.
Durante mucho tiempo viví pensando que había sido mi culpa el que esa pelea comenzara, creí que había sido mi culpa por no estar dispuesta a hacer mis cosas a un lado como suelo hacerlo.
Durante la pelea el buscaba lastimarme con sus comentarios y yo buscaba hacer lo mismo para que entendiera que lo mejor no era pelear que podíamos arreglar todo tan solo hablándolo, después el dijo algo que no debió decir y por su comentario me comencé a sentir pequeña, estúpida e insignificante, y a pesar de eso yo estaba dispuesta a seguir ahí para y con el porque mi amor por el parecía infinito.
