Ha entrado y cerrado la puerta detrás suyo, con pasos lentos se acerca hacia mí. No logro reaccionar bien y sólo me le quedo observando, sintiendo como ese cosquilleo en mi estómago y el ardor en mis mejillas se va apoderando de mí.Tomó uno de los pupitres y lo posicionó de manera que ha quedado justo al frente del mío. Ha sonreído una vez más mientras yo me percato de que trae consigo unos dulces y dos latas de soda. Mi mirada se posa en sus pecosas mejillas, las cuales están levemente sonrojadas.
—Ah, verás... Tal vez esté interrumpiendo de que hagas algo importante y yo-...
—¡N-no! Para nada, n-no es como si yo estuviese haciendo algo, puedes sentirte libre de estar aquí...— Digo con la voz un poco quebrada mientras rasco mi nuca y desvío la mirada.
Puedo escucharle reír y enseguida le miré.
¿Ya he dicho que me encanta oirle reír?
—Que bien. Venga, toma una...— Me extendió la lata de soda y algo nervioso la tomé.
La abrí y bebí un poco de ella, de ahí entre los dos no había más que silencio.
¿Qué puedo hacer ahora? Olivia está justo en frente de mí y ni siquiera he pensado bien en qué decirle, en qué argumentar acerca de lo que sucedió aquella noche cuando estábamos solos. No sé que hacer, no sé que decir, ¿se lo habrá tomado a mal? O tal vez...
Ni siquiera lo recuerda.
¡Claro! Ella estaba ebria esa noche, no creo que recuerde algo...
¿O si?
—Ah, oye Fukase...— Su voz me sacó de los pensamientos. —Ehh... Quería disculparme contigo, ya sabes, por la vez que me quedé en tu casa. —Estaba sonrojada y viendo a su lata de soda.
Un momento, ¿Qué? ¿Por qué se disculpa?
No es como si eso me haya molestado, en absoluto. Es más, quisiera que la situación se llegara a repetir, pero no de la misma forma...
—No, oye, no te disculpes...— Me miró a los ojos. —N-no tienes que disculparte, no me importó que te quedaras esa noche.
—¿Eh?— Bueno, creo que eso de que "no me importó" sonó un poco grosero.
—Ah, n-no me refería a eso, sino que...— Diablos, no tengo ni idea de qué decir. —Es sólo que está bien que te hayas quedado, esa noche fué muy entretenida.— Empecé a reír nervioso.
¿Qué diablos ha sido eso de "fué muy entretenida"? ¡Incluso llega a mal pensarse!
Pero no creo que Olivia sea de ese tipo de chicas, no parece en nada serlo, pero recordar como tomaba aquella noche me dá que pensar...
Lo peor de todo es que somos menores de edad, eso estuvo muy mal.
Escucho carcajadas de su parte, lo que me temía.
—¡Deberías verte a un espejo! Estás todo rojo que no logro distinguir tus mejillas de tu cabello...—Siguió riendo pero esta vez moderadamente.
Maldita sea...
Volteo a ver a otra parte buscando algún pretexto o algo para cambiar el tema de conversación.
Lo bueno es que no ha de recordar la parte en la que le he dicho que me gusta.
Luego de pensar unos cuantos segundos, al fin puedo mirarle y estar seguro de que el rojo de mis mejillas disminuyó.
—Ehh... ¿Dónde está Yuki?— Pregunté. Era un milagro que no estuviesen juntas.
—Volvió al salón para terminar unas tareas, pero como a veces se pone de aburrida y no me deja ni poner música en mi celular, mejor vine para saludar.— Dijo todo lo anterior con gestos de disgusto y al final sonrió mirando a mis ojos.
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Worry Boy || Fanfictic FukaOli || [Yaoi/Gay/BL]
FanfictionSimplicidad e intelecto, ambas palabras podrían definir bien a un chico como él. Se le consideraría "Perfecto", pero no todos piensan igual, el resto a veces da igual. Mediana estatura, ojos carmines al igual que sus cabellos, marcas que sólo un ho...