2. El nuevo amanecer

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Abro los ojos con la esperanza de encontrarte a mi lado... Pero no estás.

Otra vez solo, abandonado, triste.

Quiero volver a verte, y mirarte directamente sin vergüenza alguna.

Quiero volver a encontrarte, por eso vuelvo cada día a la calle donde te vi pasar.

Aún no sé dónde vives, pero lo averiguaré.

Tampoco sé tu nombre, pero en mis sueños te llamas Amapola, y te hago la ola, mi madre se llama Lola y por eso nunca te dejaré sola. 

Tus mejillas son rojas como la más bella amapola, por eso te quiero, Amapola.

Tus ojos son negros como las noches frías que paso cuando no estás conmigo.

Y tus dientes amarillos como el membrillo que me gusta untar en el pan cada mañana.

Tu fragancia a chocolate me hace desearte, estás muy buena.

Pensar en chocolate me da hambre... Hambre de ti.

Tengo ganas de aspirar el olor de tu pelo y de estar cada noche al abrigo de tu velo.

Te anhelo, caramelo.

Hoy y siempre,

tu Brayan.


Mi vida enamoradoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora