Capítulo 4:¿Quieres guerra?

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Aquí les voy a dejar el cuarto capítulo.

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Ben's POV:
Mis padres nos miraban con expresión burlona. Mal y yo estábamos completamente sonrojados.

Como era de esperarse, nuestras fotos estaban en todos lados. Para este momento todo el mundo debe haberlas visto, y mis padres no iban a ser la excepción.
La que había en ese momento en el televisor era una de nosotros besándonos.

El problema con esa foto es que evidentemente no era un beso inocente, ya que estábamos demasiado cerca del otro, con Mal acariciando mi pelo y yo agarrándola muy fuerte por la cintura. Y si no fuera por qué la foto fue tomada de lejos, se hubieran dado cuenta de que mis manos estaban "casi" sobre el trasero de mi prometida.

-¿Algo que nos quieran comentar, chicos?-preguntó mi papá.

Pude notar como los dos intentaban no reírse. Mal y yo nos miramos esperando a que el otro hablara.

-Eemmm...

Mal jaló de mi brazo y salimos corriendo mientras que oíamos las risas de mis padres. Cerró la puerta y empezó a caminar por toda mi habitación.

-Princesa, calmate por favor.

Me miró sería.

-¿Cómo quieres que me calme después de esto? Sabes que si dices eso, lo menos que voy a hacer es calmarme.

-Otras veces mis padres nos han visto besándonos. ¿Cual es el problema?

Se cruzó de brazos.

-Una cosa es que nos hayan visto besándonos o que nos interrumpan, y otra es que no sólo ellos sino todo el reino, casi haya visto lo que estábamos a punto de hacer.

Suspiró frustrada.

-Amor, ven aquí-le dije.

Abrí mis brazos y ella se acercó a mí. Besé su frente.

-Los dos sabemos que tanto para ti, como para mí, esto no es fácil. Creeme que yo también me harto de que siempre nos persigan. Soy el rey y tú vas a ser la reina-me sonrió un poco- Y lamentablemente es inevitable que nos molesten.

-No es sólo que nos molesten, a veces me dan gracia las fotos que nos toman-soltó una risita- Pero a veces pienso que deberíamos tener más privacidad, como personas y como pareja. ¿No crees?

Asentí con la cabeza.

-Tienes toda la razón.

(...)

Ese día decidimos que nuestra boda iba a ser en 11 meses.Evidentemente esa noticia rodó por todas partes antes de que lo hiciéramos público.

Gran parte de nuestros días durante 5 semanas, se basaron en tener que ir a reuniones con el consejo de segundones, el consejo real y organizando cosas para la boda.

Todo esto tenía bastante estresada a Mal. No hizo falta que me lo dijera, lo notaba por su actitud y por las veces que sus ojos se ponían de color verde intenso.

Ella había hablado de eso con el Hada Madrina y al parecer se debía al estrés. Cosa que Mal sospechaba desde la vez en que se fue a la Isla y en el Cotillion se transformó en dragón.

Tengo miedo de que el estrés altere sus poderes. Ha hecho todo lo posible por no usar su magia al menos que sea necesario, como el otro día cuando los reporteros no la dejaban en paz. O cuando ella y Jane iban a clases de magia con el Hada Madrina.

𝐃𝐞𝐬𝐜𝐞𝐧𝐝𝐢𝐞𝐧𝐭𝐞𝐬:𝐁𝐥𝐚𝐜𝐤 𝐌𝐚𝐠𝐢𝐜 (#𝐃𝐁𝐌𝟏)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora