Una argentina en casa. {Rubius y tú}

d o s {✓}

[Narra ____]

Cuando Mangel se dio cuenta que no podía respirar, dejó de hacerme cosquillas. Noté que Rubén no estaba pero dejó los alimentos que el morocho había nombrado antes. No hacía mucho que estaba en España, pero ya adoraba esa bola de masa. Más bien, todo lo que sea con o de chocolate, me encantaba.

Mi corazón volvió a su latido normal, decidí pararme y abrir esas extrañas latas. Obviamente, sabía que eran bebidas energizantes, pero jamás las había probado. Mi compañero se limitó a beberla y limpiarse la boca con el antebrazo «como todo un chico con modales», pensé con sarcasmo. Yo lo imité para no quedar mal, sin embargo tenía buen sabor así que seguí tomando normalmente.

Comimos y tonteamos un rato hasta que decidí recorrer un poco la casa, no sin antes pedirle permiso a Mangel. Era común, pero acogedora. Aunque hecha un desastre. De todas maneras yo no era nadie para juzgar.

Al cabo de unos minutos me aburrí y le avisé al andaluz que si me necesitaba, estaría en el cuarto.Me tiré sobre la cama, (la cual era muy cómoda) y me puse a chatear por Whatsapp con Julián. Mi mejor amigo, quien me dio una sorpresa.

-Te extraño... ¿Cuándo nos vemos?-*____

-No sé. Cuando quieras! Yo estoy con unos amigos acá en casa. Pero no en MI casa... -*Julián

-No te entiendo L -*_

-Estoy en Madriiiid :D -*J

-¿¡Me estás jodiendo!? -*_

-No! Hoy mismo nos vamos a ir a una fiesta que hizo Martin... Invitó a un montón de gente. -*J

-AAAAAAAAAAAAAAAAH -*_

-Venite! O pasáme tu dirección y te paso a buscar! -*J

-Estaría mortal! Pero te molesta si voy con unos amigos? Porfaaa -*_

-No ni ahí. Mientras más seamos, mejor. -*J

-Bueno dale :) acá esta la dirección... -*_

Seguimos charlando y ultimando detalles.

+

Eran las diez menos cuarto y ya había avisado a los chicos. Ellos aceptaron con emoción, al parecer les agradaban mucho las fiestas. así que yo me estaba preparando.

Me maquillé, planché mi cabello y marqué mis bucles castaños. Luego elegí el vestuario. Me había decidido por uno negro, corto y pegado- pero no demasiado. Shorts de jean negros rotos, remera y tacones del mismo color que el conjunto, muy altos. Mis labios eran de un rojo apagado pero a la vez llamativo, las sombras algo nude para finalizar con grandes pestañas oscuras. Los chicos se prepararon a último minuto y lo esperamos abajo, como había acordado con Julián.
Rubén se atrevió a decirme que estaba muy linda y yo me sonrojé un poco, pero agradecí con una sonrisa.

Como hace un tiempo no veía a mi amigo, tenía miedo de que hubiese cambiado de aspecto o peor aún: De personalidad. Pero al verlo llegar en un auto gris en medio de la noche, no pude evitar mirarlo con una gran sonrisa cuando se bajó a saludar.

Estaba con su típico look de canchero, como siempre. Tenía una camisa negra y blanca algo desabotonada con un pantalón, zapatillas del mismo color y su pelo revuelto. Subimos al auto y se presentaron entre ellos, llenando el espacio de buena energía. Al parecer se habían caído bien. Yo subí al asiento de acompañante y los chicos se fueron atrás. Charlamos entre todos hasta que Rubius y Mangel empezaron a hacer llamados. Lo único que entendí fue que había invitado a "toda la peña" de youtubers a la fiesta lo que me hizo poner muy ansiosa por verlos y conocerlos, pero no dije nada. Seguramente los haría sentir incómodos o tomarlo para otro lugar, como un interés.

No podía esperar a llegar.