Atrapada En Sus Cimientos

Parte 1 ❃ El Robo

¿Que como llegue a este Lugar?

Caminaba junto a mi madre como de costumbre mientras hacíamos las compras mensuales para la casa. Normalmente nuestra rutina era dirigirnos al supermercado, carnicería y a un gran mercadillo que se ubicaba en la esquina de una concurrida calle. Nos tomábamos muy enserio cada compra, cada fruta y cada verdura. Mi hermana mayor Amber se encargaba de ir a la farmacia a comprar los encargos que la familia solia hacerle. por lo general ella tardaba bastante en eso, así que la esperábamos afuera de la farmacia. 

Esa tarde cometi el error  que me llevo a este lugar del que me quede atrapada. Necitaba ver la hora, así que decidí verla de mi celular el cual estaba al fondo de la cartera, mientras el de mi hermana Amber estaba en un bolsillo en la parte posterior de mi bolso. tome su celular un momento para revisar la hora, y de repente una chica que solía vender todo tipo de cigarrillos en aquella esquina me lo quito tan rápido que apenas me di cuenta el segundo en que paso. Reaccione rápidamente y corrí detrás de ella. Al punto en que logre alcanzarla para exigirle que me devolviera el celular de Amber, pude darme cuenta que no estaba sola. Junto a ella habia un hombre bastante intimidante, tenia las ojeras marcadas, sus facciones eran duras y poco usuales. El se acerco a mi de una manera bastante agresiva, tratando de hacer que huyera, pero yo fui fuerte, y me quede frente a el. Asombrado de mi manera de actuar, se deslizo con rápidamente hacia mi madre. De su bolsillo sacó un cuchillo afilado, el cual lo puso sobre el cuello de mi madre. amenazando su vida, mas que la mia. Me quede quieta por unos segundos pensando, queriendo tomar el riesgo de vencerlo. Quería luchar contra el y no rendirme pero sabía que mi madre pagaría el precio, así que, yo sedi ante aquellos descarados ladrones. Me apege a la idea que habíamos perdido en aquel momento, no podía creerlo. Y les dije; 

– Nos iremos. Solo déjala, Porfavor.

La soltaron e huyeron del lugar. Y fue un alivio en mi corazón, al saber que ella estaba bien. Mi madre asustada quería ir a buscar a Amber, así que le dije que yo de todas maneras informaría a la policia. Sin embargo mi madre no estaba muy contenta con la idea, pero la convencí de que era lo correcto para que a nadie le volviera a pasar. Mi madre confío en mi palabra, fue en busca de Amber. Camine rápidamente hasta un servicio de cabinas telefónicas, para llamar a la policia y que se encargaran de los ladrones. No recuerdo si alcance a hacer esa llamada, pero lo que si recuerdo era el extraño olor que brotaba de un hombre que estaba detrás de mi mientras yo pagaba la llamada que haría. Cuando entre a la cabina el seguía mirándome fijamente, lo ignore. Sentí un pequeño temblor dentro de mi, al cual no le di importancia. Espere por tanto tiempo a la policia, a mi hermana Amber y a mi madre que llegue a perder la esperanza. La decepción de saber que no habia justicia para nadie, me estaba volviendo loca. Tanto que el mundo giraba tan rápido que ni alcanzaba a asimilar los hechos.  Estaba envuelta en una confusión tan avismante que cai frente al crudo piso de cerámica. 

Al despertar, mire a mi alrededor donde no puede evitar notar la distintiva elegancia que aquel lugar brotaba, estaba muy intrigada por saber. Me levante del sillón muy despacio y observe la belleza en donde estaba.Era un edificio muy elegante, la luz era tenue y las paredes parecían ser hechas por el mismísimo dios. Los floreros contenían enormes ortencias de porcelana, la gente que entraba al lugar parecía ser cada vez más rica. En la entrada vi difuminada la silueta de un hombre, que con cada paso que el iba dando se aclaraba más su imagen que era hermosa. Cuando pasó de mi, sentí el aroma más agradable y exquisito que jamás había olido. Aquel hombre me dejó encantada, así que lo seguí pero al llegar al ascensor las puertas ya se habían cerrado. Me quedé abajo a intentar encontrar una respuesta logica de como había llegado a aquel lugar tan preciso. Intenté hablar con las personas que rondaban el lugar pero ninguno mostró un interés hacia mi. Me acerque a la recepción, donde estaba una chica muy distraída. Quien no me dejo hablar, Solamente me aclaro que para ver al doctor debía hacer una cita.  Su respuesta a mi pregunta fue aún más vaga y me dejó con más dudas. En ese momento de frustración me di cuenta que por más lindo que sea el lugar más fea era la gente. Decidi salir del edificio, pero muchos hombres rodearon la salida. Me negue ante ellos, les exigi una respuesta. Se rieron en mi cara y advirtieron que me sentara a esperar. Asi lo hice, me sente y me dispuse a leer un libro de la estantería de atrás pero era solo papel e intente tomar una revista de la mesa pero estaban pegadas. Me asombro tanto que me dieron ganas de salir corriendo pero no podia, estaba acorralada, ya que, a donde veia. estaban esos hombres de negro vigilando mis movimientos. No sabia lo que sucedia, ni mucho menos entendia que hacia alli. los distraje al fingir que hiria al baño, pero nunca entre al baño. Subi al elevador, llegue al segundo piso pero estaba vacio, no habia ni una sombra. Lavante la mirada hacia el techo que tenia una flecha verde. Camine contrario a la direccion de la flecha, que me llevo hasta una escalera clasica en forma de caracol. Me detube con miedo, lentamente fui pisando la alfombra roja. Me sentia como si pisara una nube en el paraiso. Deslice mis dedos por aquella baranda dorada con tanta delicadeza y fragilidad. Al llegar arriba en lo mas alto de la escalera, mire hacia abajo y por poco casi me desmayo por la altura. Mire atras de mi, no pude evitar deslumbrarme por tanta belleza, mas me soprendio al ver que alli se encontraba el hombre misterioso. Esta vez llevaba un delantal blanco, y una tarjeta dorada bajo el nombre de Dr. Aaeron Carbali. Me acerque a el solo para pedirle ayuda, ademas de que esra apuesto me parecia alguien en quien podia confiar. Le pedi ayuda, le exprese que alguien queria jugarme una broma, que me habian traido hasta aca. que estaba confundida, que nadie me ayudaba, ni mucho menos me permitian salir del edificio. El me miraba extraño, como si yo estubiera mal o algo asi. Le pregunte con gentileza si me podria ayudar, me arrodille ante el, y mostre mi deseperacion.  Bajo su mirada y me dijo; 

---linda, no tienes porque hacerlo, tranquila. Levantase -- me respondió.

---Solo nececito hacer una llamada a mis padres para expresarles que estoy bien -- le dije.

--- ¿TUS PADRES? ¿ESTAS SEGURA? -- me pregunto.

--- Si, mis padres. -- le respondi.

--- Eh... No por nada, ven acompañame a mi oficina -- me respondio.

En el camino  le conté todo lo que me habia sucedido. Le hable del robo y de mis lagunas, que estaba intranquila por mi madre y mi hermana, nececitaba que supieran que yo estaba bien y que llegaria a casa. 

Al principio no me di cuenta de las intenciones que el ese hombre tenia conmigo.¿ y como iba a notarlo? si el se mostraba encantador en cada momento. El me vio sola, desprotegida y perdida, por eso me eligio. Me aseguro que el llamaria a casa, que no debia preocuparme por nada. Entramos a su oficina, era muy acogedora. Se sento en su escritorio, me insistio en que me cambiara del sillon a una silla de su escritorio. El me pidio el numero de mis padres, se lo di e incluso lo escribi en una nota naranja. lo marco, desde su telefono de oficina y luego de unos minutos me dijo; el teléfono esta desconectado. ¿estas segura de que es ese?.

Estaba segura de que ese era el numero, no habia posibilidad de que nadie contestara el teléfono de la casa, debido a que se desviaban las llamadas al celular. Si nadie contestaba era solo por una razón. Algo paso con mi familia o el había colgado antes de que entrara la llamada. Le dije que ese era el número, le pedi que volviera a intentar pero comenzó a evadirme con preguntas. Me asuste, encogi mis manos del escritorio hasta mi falda, que apretaba con fuerza. El me grito diciendo; Las manos donde yo las vea. Las puse con miedo encima del escritorio, me tomo desde la muñeca y las apreto con fuerza. Su mirada se sostubo fria e inquietante por unos segundos, en esos cortos segundos me mostro la crueldad de su vida. Las solto, se dio la vuelta y observo la vista de la cuidad, comenzo a hablarme de su niñes. No escuche nada de lo que dijo, lo unico que pude hacer fue tomar la nota y pegarla bajo el escritorio.  Me pare rapido, corri a la puerta, intente abrirla pero el me alcanzo. Me obligo a quedarme, me hizo quitar la ropa que me cubria. el dijo; todo menos la ropa interior, no quiero verte desnuda. Senti temor, accedi con la condicion de que me dijera que era lo que queria, pero no respondio.Me miro, toco su barbilla, camino hacia su escritorio e hizo una llamada dijo ; La tengo. Lugo colgo, se acerco a mi, acaricio mi cabello. y me dijo; Despues de hoy, ya nunca mas tendras que preocuparte por tus padres.

 Al cabo de unos minutos golpearon la puerta. El quito el seguro de la puerta, salio afuera junto a el  entraron dos hombres vestidos de un blanco radiante, eran grandes, fuertes y llevaban su brazo izquierdo tatuado con hexagono alreves. Se acercaron, me tomaron contra mi voluntad, me inyectaron con algo para que nadie sospechara. recuerdo salir por una puerta de emergencias. Desperte justo cuando me intentaban quitar lo poco que tenia de ropa e intente huir, pero resvale y me golpe la cabeza. Todo se fue a negro.  Comencé a despertar en medio del camino, veía en cada pestañar una luz que entraba paralela. No podía mover mis brazos, ni mucho menos el resto de mi cuerpo, me sentía atrapada. Estaba demasiado débil para gritar, para pensar. Podía sentir mis manos aplastadas por mi propio cuerpo, y la sensación de inmovilidad y confusión se hacían cada vez mas latentes. Escuchaba la voz de mi padre regañándome y la voz de mi madre diciendome que todo estaría bien. De pronto el coche dejo de moverse, todo paro en ese instante. El sonido inquietante de una flauta tocándose con la nota incorrecta estremeció mi oido, hasta que deje de oír. luego una pequeña luz solar entró por un orificio del lado posterior de la furgoneta, esa me despertó de mi inconsciencia. Alce la mirada, vi a dos silueta que estaban frente a mi. No podía verlos con claridad. El sol entro con mas fuerza, esa luz me deslumbro.