El oleaje del mar

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Lunes por la mañana, hora en la que estas maldiciendo cada puto segundo, cada jodida hora y cada idiota que hace que tu día sea una completa mierda.

Me prepare para ir a ver a los idiotas de mis compañeros, mi camiseta blanca, mi pantalón negro, mi corbata, aquel uniforme de gala que odio. No es que me queje de el uniforme, me quejo porque este significa el final de el domingo y el principio de otros 5 días estando muy estrésado. 

Tome mi mochila blanca con cuadros negros y tome una rebanada de pan tostado con mermelada y el chocolate caliente que me había hecho para comer en el camino, camine hacia la preparatoria sintiendo en frió aire que entraba en mi cabello y rosaba mi piel pensando en lo triste que era estudiar, es decir, solo vamos a estudiar para convertirnos en esclavos todo por un poco de dinero para sobrevivir, nunca seriamos libres o felices, solo seriamos esclavos, no seriamos mas que eso.

La primera clase, 60 minutos de pura amargura y estrés e incontables ganas de suicidio.

Después de unas largas horas salimos de aquel irritante lugar para lamentarnos en otro lugar, fue la primera sensación agradable que e sentido en este interminable día.

Estaba en mi casa listo para dormir hasta las 3 de la mañana, aunque suene raro suelo ser una persona nocturna, me duermo de 5 p.m a 3a.m para dormir otra vez a las 5p.m excepto los fines de semana, así duermo casi todo el día, tengo un siclo de sueño bastante raro.

Estaba en mi cama a punto de dormir cuando mi celular vibro, era Noma.

Noma 

Hola Andre! Quería agradecerte por llevarme ayer a casa

No hay nada que agradecer, con solo haberme alegrado un domingo basta

creo que Noma fue muy amable a el invitarme a salir, ¿porque no lo invito yo ahora?

¿Te gustaría ir a algún lado conmigo hoy?

Claro! A donde te gustaría ir?

No lo había pensado aunque... Hay una playa lejos de la ciudad, el camino esta a una hora pero vale la pena ir, ¿Que opinas?

Oki, quedamos en la plaza a las 6 para irnos juntos?

Bueno, entonces nos vemos allá

Parece que una persona nocturna tendrá que modificar su siclo de sueño hoy.

Busque entre mi ropa para buscar lo que llevaría a la playa, al final puse todo en mi querida mochila de cuadros. Aun recuerdo la ultima vez que fui, mi padre nos llevo a todos a la playa, todo esto paso antes de que mi hermana fuera lo que es hoy y antes de que yo me volviera todo un adolescente amargoso. La hermosa playa tenia hermosas olas con agua transparente, un rió con agua del mismo tono cerca de ella y la arena mas fina que e visto.

Al fin había llegado al parque, me senté a esperar en el mismo lugar de ayer hasta que vi a el chico mas amigable que e visto, Noma. El me abrazo por atrás como ayer, para después dirigirnos a el transporte y nos dirigimos a aquel lugar maravilloso que había visto ya hacia 6 o 7 años. Al fin habíamos llegado allí, a ese lugar hermoso, a tocar la fina arena y presenciar el oleaje del mar.

Noma y yo nos habíamos metido al mar, nos divertimos, platicamos y gozamos la compañía del otro. Eran las 8, pronto Noma empezaría a tener sueño, así que le sugerí salir de la playa para irnos.

-Noma, ya se esta haciendo tarde, mañana tengo que ir a la preparatoria y seguramente tu ya tienes planes, deberíamos irnos ya

-Solo si nos lanzamos desde allá

Señalo una gran piedra, sentí entonces un gran miedo viniendo hacia mi, ¿Y si Noma se hacia daño? ¿Que haré entonces?

-¿Que? Noma, podrías salir lastimado, no se que haría sin mi único amigo.

-No importa, seguramente estaremos bien, y si nos pasa algo al menos sabre que fue junto a una gran persona

¿"Gran persona"? Yo no soy ni la mitad de eso

-Bueno, vamos entonces

Subimos a la sima, al borde de aquella gran piedra.

-Ahora que lo veo creo que me e arrepentido

-Oh no, ya me convenciste y ya no hay vuelta atrás

Tome su mano para poder saltar, estábamos cayendo, estábamos viendo le lugar a el que caeríamos para después ver arriba, para aun después vernos, y darnos un abrazo antes de caer, y caímos. Sentimos el liquido incoloro cubriendo nuestros cuerpos abrazados, aferrados uno del otro compartiendo calor, con una sensación fría y caliente al mismo tiempo, es raro.

Después de eso nos quitamos la arena en el pequeño río de agua dulce que estaba al lado, nos vestimos y partimos, como ya había supuesto Noma estaba a punto de quedarse dormido así que tome sus cosas para cargarlas, levante con cuidado a Noma y lo ayude a quedar despierto, al menos asta que llegáramos a el transporte. Llegamos a el transporte y senté a Noma a mi lado, inmediatamente puso su cabeza sobre mi hombro para que después yo pusiera su cabeza encima de mis piernas, así Noma dormiría mas cómodo, Puse mi mano sobre su cabello y lo acaricie, era muy satisfactorio hacer eso, baje un poco mas mi mano asta rozar ligeramente sus labios, esos labios rozados y delgados.

Después de un largo viaje llegamos a casa de Noma, acosté a este en su cama y por alguna razón me despedí dándole un beso en la frente, eso fue raro. Solté ligeramente su mano preparado para irme cuando una frase de dos palabras salio de sus labios, frase que nunca antes me había dicho alguien mas que mi madre y mi padre.

-¿Andre?

-¿Si Noma?

-Te quiero

-Yo igual

Dije sin pensarlo.

Alguien me demostró afecto, seguridad, amistad y un millón de pensamientos en solo dos palabras. Me lo demostró en un corto pero significativo enunciado. Me lo demostró con un "Te quiero".

Antes del suicidioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora