No me llaméis emo

19 2 0
                                    

Un fuerte sonido me despierta, es el móvil, parece que tengo un mensaje:

"¿Quedas a las 12 para correr y luego nos tomamos un helado? Te paso a buscar mejor a las 12:30 que eres muy dormilona."

¿Quién es? Kaid, uno de "mis mejores amigos" y solo lo es porque a penas tengo mas. Miro el reloj. Son las 12. ¡Joder, no me da tiempo a hacer todo en media hora!

Y además, ¿por qué correr? será mejor que no desayune que si no luego me da un chungo mientras corro.

Me visto y recojo mi habitación. Voy a la sala donde están los ordenadores, por supuesto mi padre llevaba ahí jugando desde primera hora de la mañana así que le digo que voy a salir a correr y me dirijo a la puerta, pero justo antes de salir mi madre me agarra del hombro.

-¿A donde vas? ¿Con quién? -Ya está la pesada de mi madre.

-Voy a correr al paseo marítimo con Kaid.

-No.

-¿Como que no?

-No vas a quedar con Kaid, no me gusta que quedes con él. No te dejo. Es un irresponsable.

-Kaid es mi amigo y yo saldré con quien me da la gana. ES MI VI-DA

¿Entiendes? Deja de meterte.

Salgo y le doy con la puerta en las narices. Odio que se ponga así, ella no puede escoger mis amigos. Mi madre es una paranóica.

Cuando bajo, Kaid me espera abajo.

-Vaya, ¿que pronto sales hoy no? Otras veces tengo que esperarte media hora.

-Sí, bueno, odio estar en esa casa con esa gente.

-Esa gente es tu familia, deberías tratarlos con mas respeto. Ellos te han dado la vida.

Me han dado la vida, dice, lo pienso y se me escapa una carcajada.

-Lo único que me dan es problemas. -Le corrijo.- Yo no les necesito, con ellos no vivo, solo respiro.

-Eres muy tonta.

Los dos empezamos a correr por el paseo mientras la gente nos mira y algunos nos animan. Debería haber traido el Ipod, con música correr es mas fácil. A los diez minutos ya me he cansado.

-¡Eh, Kaid! Kaid para, no puedo mas.

Él se para y me mira con cara de superioridad. Nos sentamos en un banco y me empieza a contar cotilleos del barrio que en realidad no me interesan para nada, pero finjo prestar atención mientras pienso en mis cosas. Cada vez que dice algo repito la ultima parte de la frase que ha dicho y digo "¿Ah, si?"

Quiero unas nike. Unas nike blancas que no tienen en ninguna tienda, solo las he visto por internet,no son para correr ni nada, pero me gustan. Oh y quiero teñirme el pelo de azul. No de azul azul si no azul tirando para blanco. Es bonito.

-... y vimos a un chico que se había teñido el pelo de azul, que payaso, daba pena.- Dice de repente. Esa frase me choca.

-¿Por qué iba a dar pena? Yo también quiero teñirme de azul.

-Ay... -Empieza a quejarse. - No me digas eso. No te pongas el pelo azul que dejo de hablarte, eso solo lo hacen los pringados que no tienen autoestima y les queda fatal.

-No, yo creo que les queda bien. Y a mí me quedaría bien.

-Todo el mundo se reirá de ti si lo haces...

-¿Y a mí que cojones me importa? Creo que deberíais dejar de meteros tanto en la vida de los demas y preocuparos mas por la vuestra, dejad hacer a la gente lo que le de la gana con su vida. Si a ellos les gusta deberíais respetarlo.

Me di cuenta de que Kaid es como mi madre. A veces me saca de quicio, en ese momento me dieron ganas de dejarle ahí solo e irme a casa. ¿Por qué es así la gente? ¡DEJADME VIVIR MI VIDA!

-Que emo eres.-Me dice refunfuñando.

-No soy emo, ¿Por qué me decis siempre todas lo mismo?

-Porque lo eres.

-¡No me llaméis emo! - Le grito.

Kaid empieza a molestarme de verdad. Así que me voy sola a dar un paseo. No quiero estar en casa con mi familia y tampoco en la calle con mis "amigos".

Miro el calendario de mi movil. Aun estamos de vacaciones y dentro de poco empiezan las fiestas aquí en el pueblo. Tengo ganas de ir y despejarme un poco. Seguramente traigan DJ. Espero que no ponga reggaeton porque odio esa música.

El cuervo blancoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora