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Había pasado sólo dos semanas desde que el nuevo semestre había comenzado, y Taehyung a se sentía un poco cerca de la muerta. JiEun, por su lado, ya se había rendido y optó por sólo mirar su celular para luego mirar sus apuntes y gritar de frustración. Se encontraban en la cafetería, su santuario de paz y cosas deliciosos, sacando la suciedad de la mesa.

Luego de una hora de silencio, dónde cada uno metió su vista en sus manuales y la concentración se puso de su lado, llegaron a la conclusión de que el profesor Minseok era la reencarnación del diablo, ajá. Pero, por otro lado, el señor Choi les dio dos proyectos sin ningún material del cual guiarse, sentían que sus neuronas explotarían en cualquier momento. Estuvieron más de dos horas sentados, mirando palabras, números y términos económicos, el punto de equilibrio aquello, el plan estratégico esto, pero ¿dónde se hablaba de lo difícil que era la universidad? Oh claro, eso no estaba e los panfletos y tampoco lo comentaron el día de la visita a la universidad. En definitiva, la Universidad Nacional de Corea del Sur era una de las cosas más complicadas del mundo, sacando sus grandes batidos.

Taehyung estaba con los brazos cruzados y el ceño fruncido, mirando directamente aquella tabla dónde te explicaban las distintas estrategias comerciales, JiEun con los apuntes arrugados de tantas veces que los hizo bolita porque se rindió y ninguno se percató del portazo que se dio, el mismo que rebotó de allá para allá, de punta a otra en la cafetería, era demasiada frustración para escuchar cosas innecesarias.

¡¿Cómo andan mis dos personas favoritas en el mundo?! — gritaron llamando la atención del dúo decidido a la venta de pan, un sonriente Jungkook hacía acto de presencia, con una camiseta blanca, chaqueta de cuero ecológico, pantalones negros rotosos, Dr. Martens bordó acharolados en sus pies y una bandeja con tres copas de batido, por sus colores, se podía definir que había uno de chocolate y otro de frutilla más una bestial cantidad de crema batida, perfecto.

Hermanito, estas dos personas están por desfallecer y tu les traes batidos, que falta de respeto. — comentaba JiEun, tomando su copa y dando un profundo sorbo, sonriendo con mucha felicidad y dejando crema batida en sus labios, Taehyung le alcanzó una servilleta.

Jungkook, por su cuenta, decidió rodar los ojos y sentarse al lado del castaño claro, quien ahora agarraba su batido de chocolate dejando sus manuales libres, dando una vista completa de lo que estudiaba, claro que Jeon pequeño no perdió la oportunidad y dio un vistazo.

Hyung, — llamó, ganando la atención de este quien ahora tenía sus labios alrededor del sorbete multicolor. — ¿tienes dificultad con el estudio? — preguntó, señalando los borrones y diferentes colores para distinguir los temas.

Ajá, cómo bien te habíamos dicho, el señor Minseok es el diablo en persona. — en clase era excelente, lástima que llegaba tarde o la junta que tenía no era colaborativa en clases.

infidelity ; kooktaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora