Capítulo III "El Bus"

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Escena 3

Los chicos se encontraban en el bus de regreso hacia la base de camiones.

—No Diana, tenemos que hacer cosas más alocadas, cosas que a la gente le guste.

Mencionaba Alejandro sobre lo que tenían que grabar para un nuevo vídeo, sí, ellos tenían un canal en Yuitch, una plataforma donde personas subían videos y obtenían un poco de reconocimiento por ello al rededor del mundo. La mayoría del tiempo estos dos hablaban de ello en todo momento.

—Sí, lo sé, pero grabar en la calle aún me da pena - decía Diana agachado la cabeza - y sabes que me gusta grabar en casa

—Pues entonces deberíamos tener mas cosas gay, a las personas que nos siguen les gusta eso

—Pues sí, pero tu estas soltero

—Bueno no es porque yo no quiera, ellos le temen al éxito - dijo Alejandro levantando su rostro y pecho en forma de hombre valeroso

—O porque tu eres un salvaje que los destruyes solamente con la mirada y les das miedo - Diana hizo un gesto de señorita con mucho ego encogiendo un poco sus hombros

—Ah... pero - Alejandro no supo como defenderse, lo primero que se le ocurrió por irse indignado hacia enfrente del bus

—¿A donde vas? - Pregunto Diana al ver que se retiraba


—Cállese - miro a Diana y giro su cabeza en forma de desprecio

—Ah! - Diana estaba indignada a tal gesto - ¿Entonces te vas?

Al no tener respuesta de Alejandro y que seguía moviéndose hacia adelante del bus, aunque de manera muy lenta, como si esperara una disculpa, Diana estaba más molesta por aquel gesto, entonces dijo

—Alejandro Marín - ese era el nombre completo de Alejandro, el cual no usaban siempre y cuando alguno estaba molesto y deseaba molestar al otro

Alejandro indignado volteo entre cerrando los ojos en forma de enojo.

—¿Qué acabas de decir? - dijo con una mano en su pecho como si le hubiese dado una punzada al corazón

—Alejandro Marín - Arqueo una ceja en forma de reto

Alejandro no tuvo otra opción que responder a aquel reto

—Diana Valadez

Ambos se miraron, se sentía una tensión enorme en todo el bus, casi podía verse el fuego saliendo de sus ojos entre cerrados y esas cejas arqueadas estaban hasta lo más arriba que podían, iba a ser un gran enfrentamiento, el poder fujoshi contra el poder fudanshi, aunque más que eso, la tensión era ver que dos grandes amigos que parecían novios estaban apunto de pelear a muerte por su orgullo, a pelear por su dignidad, entonces de pronto, se abrieron las puertas del bus y entro gente haciendo desconectar esas miradas y que se preocuparán porque no fueran aplastados.

—¡Diana! ¿Estás bien? - Dijo Alejandro tomado de un tubo y siendo aplastado por tres personas

—Sí - Mencionó con un poco de falta de oxígeno

—Nos bajamos a la siguiente - tenía medio codo enterrado en su mejilla

—Está bien - sacudió un poco su mano en la nariz debido a una axila que utilizaba de sombrilla en esos momentos.

Saliendo del bus, con un poco de esfuerzo como si fueran un gas que tenias ahí atorado sin poder sacar, se levantaron.

—Bueno, vayamos a tu camión - Dijo Alejandro con falta de aliento

—Va - caminaron hacia la ruta que dejaba a Diana en su casa pero antes, ella se detuvo

—¿Qué pasó? - dijo Alejandro confundido a tan repentino acto

—Lo siento por lo que dije - ahora era una mirada nada desafiante y con unos ojos cristalinos

—Oye no, no pasa nada, no estoy molesto - río un poco - sabes que nosotros a pesar de las peleas o discusiones, que bueno, esta es como la segunda que hemos tenido en dos años, nunca te dejaré y siempre contarás conmigo

—Sí, lo sé  pero perdón - dijo mientras se acurrucaba en los brazos de Alejandro y este cubriéndola con ellos.

—Bueno ya, para esas lágrimas o se irá el camión y luego tu madre te regaña

—No estoy llorando, fue el olor de la axila que me entro a los ojos - Alejandro hizo un gesto de asco

—Ya... vamos


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Las escenas que se mencionan en esta obra, son 100% reales, claro, agregándole un poco más de esencia para que no quede tan plana la lectura.

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