Fictober 2018 (Killjoyverse)

#13 Luna

Killer King se sentía en las nubes. Hoy cumplía 5 años de haber perdido a su primer equipo por lo que para conmemorar a sus amigos caídos decidió ir a la Ruta Guano, aquella conocida por estar llena de draculoids vigilantes; una masacre para aliviar la pena estaría bien.

Dallon Weekes, alias Mr. Sinister, había accedido a llevarlo a unos cuantos kilómetros de ahí, porque apoyaba a su amigo, pero no estaba dispuesto a ver las atrocidades que cometía (y honestamente tampoco quería el vidrio de la van manchado de sangre o con impactos de ray gun).
Aunque Sinister sabía la verdaderas intenciones de King, le había convencido con lo de "Vamos, Dallon. Esas cosas ni sienten. Además, podremos liberar a todos los killjoys que hayan capturado". Y Sinister tenía un punto débil por ayudar a los rebeldes en problemas, porque King lo había sido alguna vez y ahora tenía que cometer terribles actos para descargarse de todo lo que le habían echo. Sinister amaba a King, y por eso no quería que existieran más como él.

King salió del vehículo, ajustó su saco y revisó que portara su ray gun y su cuchillo, para cualquier otra persona enfrentarse a tantos draculoids sería considerado suicidio, pero no para él. Sabía que si acaso solo saldría con uno que otro rasguño. Abrió la van y sacó su motocicleta de ella junto con su casco.

-Ve con cuidado, Brendon- Sinister trató de mantener el rostro neutro, pero su voz sonaba angustiada.

-Sí mamá- el más alto rodó los ojos ante la actitud infantil de su amigo. Vuelvo en un rato. No me esperes despierto- le lanzó un beso coqueto y montó la moto para después perderse en el polvo.

El Sol estaba bajando, por lo que habían unos cuantos tonos naranjas y rosáceos en el cielo. Killer King iba silbando una tonada pegajosa que era opacada por el potente motor de la motocicleta. A lo lejos distinguió las siluetas blancas de los "vampiros de BL/ind" y se apresuró hacia ellos, pero frenó abruptamente cuando se dió una explosión justo en ese lugar. Una gran nube de polvo se levantó sobre su cabeza para que al dispersarse dejara a Brendon ver varios autos y una caseta incendiándose. El corazón se le estrujó y se puso pálido ante la idea de que justo 5 años después de la tragedia esta se repitiera. Los recuerdos y el dolor lo invadieron como hace años no lo hacían.

-Hey moon- la voz de su mejor amigo muerto y primer amor resonó en su cabeza -por favor olvídate de caer. Por favor no te vayas-

Su primer instinto fue regresar con Sinister, pero después el dolor dió paso a la ira y a la curiosidad y giró el acelerador hacia lo que parecía una gran fogata.

El Sol había bajado por completo y en unos minutos la luna se haría presente.

Extrañaba a su Sol, extrañaba ser la Luna de alguien.