PÁGINA 1

70 9 0
                                    

Las nubes en un día, un día nublado. Se veían espléndidas, hacían de la claridad una oscuridad por completo, pero no era lo único, alojaban gotas que tras un rato caerían y llovería.

Amo tanto los días lluviosos, sentir el frío en el ambiente, la tranquilidad en el espacio y la claridad de nuestros pensamientos.

Si tan sólo todos nosotros pudieramos apreciar lo hermoso que es, y no sólo eso, estar con alguien también ayuda a apreciar lo bello de todo.

O no?, tal vez deberíamos aprender que no necesitamos estar acompañados para poder vivir los momentos y lo bello del mundo.

Pero pensarán, ¿Que es lo qué le pasó a este chico?, porque claro, siempre hay razones para nuestros actos, o por lo menos en mi caso, hubo una razón.

Un amor no correspondido...

Les contaré mi historia, mis pensamientos y mis sentimientos al pasar por eso.

Para hacerles una idea, nunca les ha pasado que sienten algo por alguien y no saben si serás correspondido o correspondida por esa persona?, bueno, soy Max Norman y les contaré por qué cambié mi manera de pensar de un momento a otro.

~Un día nublado perfecto salí a caminar, después de acabar mis deberes, salí con un abrigo y un paraguas, por la lluvia.

Iba camino a una librería, quería ver si había llegado la última parte de Harry Potter, "ya lo había leído por lo menos unas mil veces" porque me lo habían prestado, pero, yo lo quería tener para poderlo leer cuando yo quisiera y añadirlo a mi colección.

Justo una cuadra antes de mi destino, empieza a llover, a llover de forma catastrófica. Pero yo Seguía caminando como si no pasara nada, cuando de pronto veo una silueta dentro de la espesa neblina, una persona que al igual que yo, se veía que no le importaba estar allí debajo de la lluvia mojandose.

Pero a mi no me importó, fui a dónde ella estaba, y entre la inmensa neblina, no pude ver bien su rostro, pero se veía hermosa, me quité el abrigo y se lo entregué, no quería que se mojara, luego me di media vuelta y me fui.

- Que bien, ya casi llego a la tienda!!
Dije desde de mi cabeza.

~Entré y saludé a Tony, el vendedor, y le pregunté por el libro.

Me dijo que si!, efectivamente, el libro había llegado justo el día anterior.

Empecé a caminar por los pasillos emocionado buscando mi preciado libro, el libro que tanto quería tener en mis manos desde hace tanto.

Luego cuando veo, en la sección donde se encuentra el libro hay una chica y, me daba la impresión de que yo la había visto antes.

- Oye, Lisi eres tú?

~Grité sin pensarlo dos veces en medio del pasillo.

- Tiempo sin verte querido Maximiliano, has cambiado mucho pequeñito.

- Yo?, eres tú la que ha cambiado mucho, apenas y te reconocí, dónde has estado?

- Pues en mi casa. No he salido, la mayor parte del tiempo estoy cuidando de mis hermanas.

- Y hoy?, y eso que estás aquí?

- Mi mamá se quedó con las pequeñas, y yo bueno, salí de compras, hace tiempo no pasaba por aquí a revisar si habían libros nuevos así que vine un rato.

- Oye Lisi, enserio deberíamos salir así
como antes, te acuerdas?, esos tiempos en los que pareciamos pequeños niños inmaduros. Lo extraño demasiado, ahora ya ni salgo, solo me la paso leyendo en mi cuarto y viniendo para acá a comprar libros, me siento un poco solo de hecho, pero no importa, así paso más tiempo con mamá.

- Ay Maximilianoo!
Sabes qué?, voy a hablar con mi mamá para ver si puede cuidar a mis hermanas hasta la noche, y tu y yo salimos, te parece?

- Me parece Lisi, habla con tu mamá, y luego vamos a mi casa a buscar el auto, si?

- Maximiliano, el auto?, qué tienes pensado?

- Guao Lisi, me sorprende que no te acuerdes, se te olvido a dónde nos escapabamos cuando no teníamos nada que hacer?

- Ohh, me llevaras a nuestro lugar!
A pasado mucho!
Bueno, está bien Maximiliano, pero no creas que porque iremos a nuestro lugar tendras una oportunidad conmigo!

- LISI!!
No digas eso!
Tu me gustabas cuando niños, pero ya madure, y, solo salimos como amigos, no pienses mal boba!

- Bueno, supondré que te creo, y lo dejaré así, pero no te pases de listo, ok?

- Ay Lisi, tu nunca cambias verdad?
Déjame buscar mi libro y nos encontramos en mi casa, si?

- Como usted diga Sr Maximiliano, nos encontramos en una hora en su humilde morada!

- Bueno, nos vemos querida Lisi.

~Me despedí dándole un beso en el cahchete, busqué mi libro, salí y empecé caminar hacia mi casa para arreglarme y salir con mi vieja amiga.

SI TÚ TAN SOLO NO ME HUBIERAS DEJADODonde viven las historias. Descúbrelo ahora