Es Mi Hijo

01 "Divorcio"

Nicolás se encontraba sentado, escuchando todo lo que el testigo de su divorcio decía...

— Por favor, firmen aquí y todo se acaba -habló el juez mostrando el documento para que ambas partes sepan dónde firmar

— Nicolás piénsalo bien, por favor. No me dejes

— No te quiero Ethan, entiende que solo me casé contigo por obligación. Todo fue porque quedaste embarazado para amarrarme, ahora no seas descarado y firma.

— Yo te amo Nicolás, por favor —pequeñas lágrimas comenzaban a caer por sus mejillas

— Firma de una vez, ya no te rebajes más -habló fríamente sin importarle las lágrimas de su, todavía, esposo. Para él todo lo que Ethan haga es falso

Ethan agarró el lapicero y comenzó a firmar, era cierto, se estaba rebajando. No conseguiría nada estando con alguien que no lo ama, como él si lo hace. No importa que tanto lo haya intentado, ese hombre de a su lado nunca cambiará de opinión

— Dado que ambas partes ya firmaron el documento que indica su divorcio, el pequeño se quedará con el señor Ethan Zugasti, mientras que el señor Nicolás Sorní tendrá que dar la pensión alimenticia y podrá visitar al menor los días sábados y domingos

— Me parece lo correcto. Yo me tengo que ir. Ah cierto Ethan, ya mandé tus cosas a casa de tu madre, así que vete ahí y nunca más vuelvas a mi casa —sin más salió de la sala

— Señor Zugasti ¿se encuentra bien?, puedo mandar a llamar a alguien si usted desea —habló el juez preocupado por la salud de Ethan. Desde que inició la hora de hablar de los documentos el hombre se veía mal y decaído

El juez se pregunta qué tanto tuvieron que pasar esta pareja para que ambos terminen de esa manera tan cruel

— E-estoy bien, gracias

Ethan se levantó y se secó las lágrimas con las mangas de su polera. Salió rápido de ese lugar, si alguna vez le preguntan cuál es el peor lugar que ha visitado, definitivamente responderá que la notaría donde firmó el divorcio con la persona que amó y amará por el resto de su vida.

Por otro lado, Nicolás llegó a casa y cuando abrió la puerta no había nadie esperando, solo estaba él y su gran departamento

— Es lo mejor, solo me casé con Ethan por obligación, ese idiota me quería amarrar, solo porque tuvimos un hijo, pero ya me liberé y nunca más volveré a caer en esas trampas

Se tiró en su sofá, cerró sus ojos y cuando los abrió después de quedarse dormido por diez minutos se encontró a su hermano con el ceño fruncido

— ¿Qué haces aquí Agusto?

— Eres una basura, ¿cómo se te ocurre separarte de Ethan?¿y tu hijo? Acaso no te pones a pensar que crecerá sin su otro padre

— Ese niño tendrá lo que quiere, le mandaré dinero, es más, para mi mala suerte lo tendré que ver los sábados y domingos

— No entiendo cómo es que Ethan estaba enamorado de ti, eres una completa basura

— shh, deje descansar, por fin tengo un día tranquilo en mi vida y tu inoportuna presencia arruina mi momento — pide con una sonrisa fingida. Su hermano lo mira de mala manera y se marcha de su casa sabiendo que lidiar con su hermano es un caso perdido

En otro lugar, Ethan baja del auto frente a la casa de su madre, con pocas ganas de seguir abre la puerta encontrando sus maletas en la entrada

— ¡Ethan! Llegaste — exclamó su mejor amigo sintiéndose aliviado de que Ethan haya llegado sano y salvo

— Mateo...¿Dónde está mi hijo?

— Está con Gastón, pero no estés triste Ethanie, Baeck te verá así

— Tienes razón, mi hijo no me tiene que ver triste...

Se sentaron en el sofá con más tranquilidad. Todo ahora está como un campo lleno de bombas y con un solo comentario de más hará que Ethan explote, así que debe de ser cuidadoso con sus palabras

— ¿Qué harás ahora? -preguntó Mateo

— Buscaré un trabajo, no quiero ser un mantenido —dice Ethan totalmente decaído, a pesar de ser mayor que su amigo, una relación amoroso lo vuelve débil como un niño

— Ethanie, se que es muy apresurado y tal vez no te guste estas cosas, pero será tu única solución...

— ¿Qué cosa, Mateo?

— En el club hay un trabajo, sabes que Gastón te puede contratar rápido, claro si tu quieres, ganarás muy bien — ánima deseando que su amigo acepte

— ¿En el club? no lo sé ¿Y mi hijo?¿con quién lo dejaría?

— Conmigo, sabes que yo no trabajo, por estar así -se señalo su pancita. Su mejor amigo está gestando hace ya varios meses — Y entonces... ¿aceptas?

— Está bien, no tengo que pensar nada, necesito que Baeck crezca muy bien

— Muy bien Ethanie, mañana comienzas

— Pero aún no le has dicho a Gastón

Gastón es el dueño del club y pareja de Mateo, todo lo que diga Mateo se hace porque su esposo tiene una debilidad de verlo siempre feliz

— Tranquilo, es obvio que si, tenemos que salir adelante, ese tonto te perdió y tú lo olvidarás por completo — afirmó fuerte y claro. Por supuesto que no va a permitir que su mejor amigo sufra por culpa de un idiota como Nicolás, ese tipo merece sufrir por todo el daño causado

Si hay alguien que odie más en el mundo a Nicolás Sorní es Mateo Dalmau, no lo puede ni ver en pintura. Si fuera por él ya lo hubiera enterrado bajo tierra.