El Séptimo Signo [Zodiac Yaoi/Gay]

Capítulo 3

Ertnix, las tierras desiertas

Ertnix las tierras desiertas, no es tan malo como suena a decir verdad podrías tener una buena vida en ese lugar, Ertnix el hogar de los signos tierra y el lugar al cuidado de los dioses Mercurio, Saturno y Venus.

Ertnix a pesar de contar con hermosas vistas es una trampa para los curiosos que se acerquen al lugar, sin una guía estas condenado a caminar en círculos y morir al tiempo por falta de agua.

Tres templos se encuentran en ese inmenso desierto. Los templos de los signos de la fuerza defensiva, los signos tierra.

—Para ser un desierto, es hermoso— dijo un chico sonriendo mientras admiraba la vista a la distancia —Ertnix, maestro has hecho un muy buen trabajo... no se si podré con esto.

El joven de piel bronceada, ojos grises y cabello cree claro siguió caminando, era la primera vez que salía del templo y estaba muy emocionado.

Después de unos minutos se encontró con unas pirámides, los cuales se quedó admirando había leído de ellas antes, en los libros que su maestro llevaba para el pero ver una era totalmente distinto.

—Increíbles ¿cierto?— dijo una nos a si claro asustandolo —Oh, lo siento no quería asustarte— dijo el nuevo sonriendo, este tenía cabello negro, ojos café rojizos y su piel era bronceada como la suya —Soy Tauro, un gusto— le tendió su mano

—Virgo— tomó la mano del toro —Así que tu eres el aprendiz de Venus, he escuchado algunas cosas de ti.

El toro le miro impresionado —¿A si?

—Mercurio es muy hablador— dijo negando al recordar de todo lo que le hablaba —Deberíamos de seguir, Unión no está muy cerca

—Tienes razón, vamos.

Los dos signos siguieron su camino, al parecer ambos se llevaban bien lo cual hacia el camino menos aburrido ya que podían hablar de cualquier cosa.

—Venus es muy buena enseñando pero en ocasiones es como si... temiera decirme algo sabes— dijo Tauro

—¿Temer?— Virgo se confundió —Seguro sólo es tu imaginación, no creo que un dios le tema a algo

—Si, tiene sentido pero...

Justo en ese momento alguien los tomó desde el cuello de sus camisas pidiéndoles seguir caminando.

—¡¿Q-Qué?!— Tauro fue el primero en reaccionar —¡¿Que te pasa?!

Encaró a un chico igual de alto que el, este tenía ojos azul metálicos, cabello café oscuro y piel un poco más clara que la de ambos.

—Arenas movedizas— dijo el desconocido señalando un poco adelante de ellos

—Tiene razón— dijo Virgo —Gracias... eh...

—Capricornio.

—Pero... ¿este no es el camino a Unión?— pregunto Tauro —Se supone que es seguro.

—Si, Saturno también me dijo eso— dijo Capricornio —Tendremos que buscar otra manera de llegar.

—Otra manera...— murmuró Virgo

Los tres signos se quedaron de pie pensando en que hacer, las arenas movedizas eran un problema para ellos al no tener sus habilidades aún, y el no conocer Ertnix también era una desventaja para los tres.

—... Una vez leí en un libro de Venus— dijo Tauro y los otros los le miraron —Sobre un camino que une a Ertnix y Winmond...

—Winmond... ¿al este o al sur?

—Norte.

—El norte de Winmond está prohibido— dijo Capricornio —Todo aquel que se acerca será enviado al mundo humano para ser uno de ellos— dijo la cabra —No gracias.

—Desobedecer las reglas no es una opción— dijo Virgo

—... Si, tienen razón además puede que no sea cierto.

Sin embargo cada vez que el toro preguntaba por ese lugar, Venus actuaba extraño y evitaba el tema a toda costa. ¿Qué había al norte de Winmond?

—Por ahora será mejor rodear las arenas movedizas— dijo Capricornio —No tenemos muchas opciones.

Ambos restantes asintieron

Los tres como ya habían dicho rodearon las arenas movedizas, las cuales según los dioses no debiabnestar ahí, aun así no les fue muy difícil pero les quito mucho tiempo

—Apresuremos el paso— dijo Virgo —No será bueno si llegamos cuando todo acabo.

Tauro miro al cielo, según la posición del sol sabía que tenían menos de 5 minutos, y el odiaba llegar tarde.

Al parecer no era el único con ese problema pues sus acompañantes no estaban caminando sino más bien trotando para llegar, a lo lejos pudo ver como otras tres personas entraban antes que ellos. Al parecer serían los últimos, o eso pensaba el toro.

...

Las puertas se volvieron a abrir y tal como esperaban Venus, Saturno y Mercurio se acercaron a su respectivo aprendiz.

—Estaba tan preocupada— dijo Venus abrazando a Tauro el cual trataba de alejarla

—Si, si, tuvimos un problema— dijo Tauro

"Hay un problema con el"

Ese recuerdo otra vez.

—¡¿Maestra?! ¿Está bien?

—.... ¡S-Si!— suspiro —No es nada, Tauro...

Mientras tanto Saturno dejó teclado eso de la impuntualidad y le mostró el lugar a Capricornio. El cual realmente sólo quería sentarse y esperar a que eso acabará

—¡Mira, mira es Neptuno! ¡Ven, ven te lo presentaré!— decía Saturno mientras literalmente lo arrastraba a todas partes

Por otro lado —Virgo, pensé que te dije que vinieras temprano— dijo Mercurio molesto —... ... ¡¿A quien engañó?!— lo abrazo —¡Me alegra que estés a salvo!

Virgo intento alejarlo —Y-Ya basta, estas invadiendo mi espacio personal— le dijo mientras le empujaba —¡Ya basta!

Júpiter la cual miraba todo desde donde estaba, visualizo a los signos tierra, fuego y agua pero... los signos aire.

Al ver que Mercurio estaba ocupado se dirigió a Urano el cual ignoraba todo a su alrededor.

—Urano.

—No lo sé— se adelantó —Acuario vendrá cuando quiera, deberías saberlo.

—Es tu responsabilidad.

—¿Lo es?

—¡Por supuesto! Acuario es tu responsabilidad, Aries de Marte, Leo de Sol y así.

—Que extraño, aun así tomaste aquella decisión ¿cierto?

—Eso no tiene nada que ver.

—Era responsabilidad de Venus y aun así tu tomaste la decisión— dijo molesto —Como ya dije, no se donde esta será mejor que seas paciente y esperes.

Júpiter vio como Urano se iba dejando la sola, desde el principio supo que el nunca estuvo de acuerdo con lo que pasó ese día.

Por ahora sería mejor no hablar con el.