ᵀᶦⁿʸ ʸᵒᵒⁿᴳᶦ ~ʏᴏᴏɴᴛᴀᴇ~

ᴘᴇǫᴜᴇñᴀ ᴍᴇɴᴛɪʀᴀ

En el capítulo anterior, YoonGi se volvió pequeño como por arte de mágia, y ahora tiene un pequeño gran problema que resolver. Pero este no es sólo su problema, de alguna manera, su ahora inmenso ex-novio parado frente a él se ve comprometido con todo este asunto, ya que es el único testigo del encogimiento de nuestro, ahora diminuto, Min YoonGi.

TaeHyung se frotó los ojos repetidas veces, no podía creer lo que veían sus ojos, el chico pálido era del tamaño de una muñeca barbie. Sintió curiosidad de saber si no era una ilusión, por lo que pinchó el estómago de YoonGi con su dedo indice. El mayor lo escudriñó con la mirada y le dió un palmazo a su dedo, haciendo que lo retire.

-¡¿Puedes dejar de jugar?! Esto no es gracioso.

-YoonGi-Hyung, en verdad se volvió pequeño -Le contestó TaeHyung totalmente sorprendido.

De repente TaeHyung recordó que debía volver a clase y se puso en alerta. Se puso de pie y antes de marcharse se dirigió al YoonGi miniatura frente a él.

-Tengo que regresar a clases, Hyung. A la salida veremos cómo solucionar este pequeño asunto.

-Deja de usar "pequeño" para todo TaeHyung, esto no es gracio- -YoonGi se alarmó cuando vió que el menor volteó y comenzó a alejarse a grandes pasos hacia su curso -¡Oye, espera! ¡TaeHyung, no puedes dejarme así!

TaeHyung miró hacia atrás sin dejar de caminar cuando oyó a YoonGi gritarle a lo lejos. El mayor corría inutilmente con todo lo que le daban las piernas para alcanzar al castaño, pero, al ser tan pequeño, parecía que corría lentísimo desde la perspectiva de TaeHyung. Eso hizo que comenzara a reír de ternura en medio del pasillo.

-¡¿De qué tanto te ríes?! -Soltó YoonGi sin aliento cuando por fin lo alcanzó, cayendo rendido de rodillas, recuperando el aire.

-Perdón, Hyung -Reía el castaño tomandose el estómago, que ya le dolía de tanta risa -Es que si vieras lo chiquitito que te ves, te ves tan lindo~

-TaeHyung, esto no es gracioso ¡¿Qué voy a hacer ahora?! Tengo que ir a clase, van a pensar que me escapé del colegio, y ya no puedo recibir más amonestaciones.

TaeHyung dejó de reír y se puso serio, pasando una de sus manos por su barbilla de forma pensativa. Era cierto, el mayor estaba al filo de ser expulsado por tener el peor hostorial en comportamiento académico, lo sabía, de hecho todos en la escuela conocían a YoonGi por tener mala reputación, era todo un bad boy. TaeHyung recuerda que fué eso lo que hizo que aceptara salir con él cuando lo invitó a salir en primer lugar, y es que le resultaba tan sexy. Pero justamente por esa mala tendencia suya de buscar lo excitante, fué que terminó quedando como uno más en la lista de conquistas fáciles de Min YoonGi. TaeHyung lo detestaba tanto...

YoonGi vió cómo el gesto pensativo de TaeHyung cambió a uno de rabia, y la mano con la que frotaba su barbilla ahora se había convertido en un furioso puño.

-¡Oye, TaeHyung, despierta! -Le llamó, rebentando la burbuja de pensamientos del castaño.

-Sí, lo siento, me fuí por las ramas... Tengo una idea, Hyung.

-¿Ah, sí? ¿Y cuál e... -De pronto, sin avisar nada, el castaño tomó el pequeño cuerpo de YoonGi en una de sus grandes manos -¡TaeHyung! ¡¿Qué crees que estás haciendo?!

-¡Awww! Hyung, se siente tan blandito y suavecito en mis manos~ -Chilló de ternura el menor.

-Te morderé la mano en cuanto no me sueltes.

TaeHyung sostuvo entre sus manos a un pequeño e inquieto YoonGi y se dispuso a dirigirse hacia su casillero. Por suerte, llevaba consigo las respectivas llaves de su candado, y al abrirlo, introdujo al mayor dentro.