Dos

6.1K 398 60
                                    

Agos

—¿Entonces que mierda haces acá?-Pregunto algo enojado.

—Tomas cálmate -Lo reto el rubio- Hola soy Mauro y el es Tomas, perdón por su comportamiento -sonrío.

Le devolví la sonrisa y me presente, pero un grito de dolor del peliverde me interrumpió.

—¡ay! ¡La puta madre! -Exclamó agarrandose la panza.

—Está así hace como tres horas -Aclaró Mauro.

—A ver, dajame revisarte. -Me acerque.

Levante su remera y me quede un rato apreciando los tatuajes de sus brazos, están re piolas.

—Te voy a presionar partes la panza y vos decime si te duele -El asintió y yo me encargué de presionar partes de su panza mientras el negaba, seguí así hasta que apreté su lado derecho y pegó un grito de dolor asustándome- ¿Acá te duele? -Asintió.

Mire su expediente a ver si ya lo atendieron y si descubrieron lo que tiene, pero nada, estaba en blanco.

—¿Que Tiene? -cuestionó Mauro.

—Puede ser que sea apen..

—Bianchi, ¿qué haces acá? -Me interrumpió una voz, Clara.

—Eeeh, me confundí de habitación y justo el se quejó y lo revisé ya que hace tres horas esta con ese dolor -Respondi nerviosa.

—Bueno, vos quédate con este paciente y yo te atiendo a Puñales, pero esta es la ultima vez Agostina -Asentí y Clara dio media vuelta para irse.

—Para Clara, una pregunta -me miro- el paciente Tomas.. -mire al de pelo verde para que me diga su apellido y dijo 'Campo'- Tomas Campo tiene dolor en el abdomen bajo y creo que es apendicitis, ¿Que tengo que hacer? -Pregunte.

—Ordena una ecografia y llama al cirujano cardiotorácico -ordeno y se fue.

Cro

—¿Para que un cirujano? -le pregunte a la morocha.

—Por que puede ser que sea apendicitis y si resulta que tenes eso hay que operar -Respondió y se fue.

—La concha de tu madre, Hoy tengo un show- Exclamé golpeando la camilla y al instante me volví a quejar del dolor.

—Quédate quieto, yo voy al show y digo que vos no pudiste ir y listo, solo canto con Neo y Alejo -Trato de calmarme duki- Cuando salgas de acá, nos fumamos un buen blunt y vas a estar como nuevo.

Seguidamente sonó el celular de Mauro, era una llamada.

—Sisi...Estoy con el cerreo en el hospital...no, no va a poder ir...la doctora que está re buena dijo que pude ser apendicutis o algo así -me reí- Bueno, chau ahora voy -corto la llamada- Che cenfe, me tengo que ir, a la noche vuelvo.

—Bueno no pasa nada, anda.

•••••••••••••

Interna | c.r.oDonde viven las historias. Descúbrelo ahora