Esta es la historia de Camila. Una historia real, tan real como estar vivo en este momento. No te miento para nada; así de real. No era una chica cualquiera. Quizás muchas se sientan identificadas con ella. Es la historia de ella. La única. La real.
Piensa en algo bello, ¿que es? ¿Que es lo más bello del mundo? Pues te puedo asegurar que esa chica era mas bella que aquello en lo que pensaste; pero nunca lo supo. Nunca se dio cuenta de aquello. Tenía una manera muy particular de esconderse de las personas; y cuando alguien le recordaba lo hermosa que era, normalmente pensaba que se burlaban de ella. ¿Te sientes identificada con ella?
Tan brillante como el sol que te ah alumbrado mas de una vez, y tan capaz de resaltar como las estrellas que siempre se encuentran a ir; pero dejaba que las nubes la tapen cada noche.
Viajaba donde sus abuelos cada simple verano; donde también se encontraba su primo. Todo se iba convirtiendo en una cadena. Su primo tenía amigos donde vivía; y así fue, como a los siete años, la chica conoció a la cual serían sus mejores amigas, y el amor de toda su vida. Su amor de verano.
Y es aquí donde la magia comienza. En realidad la magia comienza desde la primera página. Desde que lees la primera palabra. Pero aquí es donde te das cuenta de eso.
Lauren se llamaba la chica que le robaba el aliento. Tan hermosa, tan educada. Tan perfecta. No, solo miento; ella no era perfecta, no para el mundo, pero para ella, era el ser mas hermoso de todo el planeta, tal como para Lauren, ella era la chica mas bella del mundo entero. Aquella que no merece ni flores; no se comparan a su altura.
Lauren tenía una hermana; y es aquí donde volvemos el tema de las amigas.
La casa de los abuelos de Camila, estaba al frente de la casa de Alexa. Una chica de su misma edad, siete años cuando la conoció. Una chica baja, de pelo café, de una sonrisa que nunca salía de su rostro, que nunca se enojaba. Ella se convirtió en su mejor amiga; junto con Taylor. La hermana de Lauren. Vivían cinco casas lejos de Camila. Taylor tenía un año menos que ellas; pero tenía la inteligencia de una chica aun mayor. Siempre tenía el comentario acertado, la palabra acertada para todo lo que decían.
Todas, junto con Harry, el primo de Camila, jugaban cada simple día en aquella calle en la cual la luna nunca se olvidaba de caer. Fueron felices, toda su infancia. Reían y compartían secretos, y Camila con Lauren se convirtieron en grandes amigas.
Lauren le contaba todo a Camila, así como Camila le contaba todo a Lauren, pero lo que ambos no se contaban era que sentían una atracción la una por la otra. No se contaban que se encontraban la persona perfecta para la otra; y todos se daban cuenta de aquello. Todos menos ellas. A ellas no les importaba el sexo; Eso era lo menos importante para el mundo. Vivieron imaginando una vida perfecta junto a la otra, pero nunca realmente pensaron en realmente tenerla.
Así siguió hasta que Camila tenía 16 años. Y esta vez viajaría nuevamente donde sus abuelos.
Y aquí es donde la historia comienza. No la otra, si no esta. La historia.
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