- ¡Despierta!, ¡hoy es tu primer día de preparatoria! -.
- Pero mamá, no quiero ir -dije algo desanimado.
- No me importa, ¡tienes que ir! -me gritó mientras me sacudía para sacarme de la cama.
- Lo sé, lo sé, ¡es qué la escuela siempre es lo mismo! tienes que aprender a convivir con los demás, ayudar a todos, vivir en armonía. ¡siempre es lo mismo! ¡todos los años! ¿Por qué no pueden enfocarse más en otras materias? No sé yo: matemáticas, español, ¡ciencias! Pero no todos los años, todo el tiempo, se enfocan mayormente en la ética, es aburrido-. Suspiré algo enfadado.
- Se qué no te gusta, pero es por un bien, hay muchas personas que no se encuentran bien mentalmente- puso su mano en mi cabeza- esas personas necesitan ayuda para encontrar el camino hacia el bien- me sonrió y se levantó- ven, vamos abajo, te haré tu desayuno para que vayas a la escuela con energía, mi pequeño héroe-.
Se que mi madre hace todo por mi bien, aun así, siento que es muy aburrido, no quiero volver a la escuela.
Entiendo los motivos de que la enseñanza este de este modo, después de todo, una sociedad donde abundan los super poderes tiene que tener mucho cuidado de no crear villanos.
Según recuerdo por las pocas clases de historia que tuve: hace un billón de años, estalló un sinfín de bombas nucleares en todo el planeta durante la sexta gran guerra mundial. Esto conllevó a la casi extinción de la vida en la tierra. Pero la evolución actuó rápido, las pocas formas de vida que aún quedaban asimilaron la radiación y la usaron para obtener ventajas evolutivas. Los humanos con el tiempo volvieron a reclamar la tierra como la especie superior. Las ventajas de los humanos se fueron volviendo casi únicas para cada ser, por lo que ahora se le llaman habilidades, la vida se hizo algo parecida a la de los videojuegos de antes de la gran guerra.
Basta de reflexión, ya tendré tiempo para ello.
Me espabilé para concentrarme, tomé una camisa blanca y unos pantalones de mezclilla negro, tras esto, tomé mi sudadera morada y me coloqué mis tenis blancos, acomodé mi pelo para que se escondiera dentro de la sudadera.
Bajé rápido por las escaleras y me dirigí a la cocina donde estaba un plato de cereal ya preparado para mí. Encontré una nota pegada en la mesa, seguro es de mi madre: “tenía trabajo, lo siento. Te deje tu cereal y mochila preparada, ¡ten un buen día!”.
Mi madre es muy buena persona, vive siempre ocupada y ayuda a todos en todo. Es una gran heroína.
Terminé de comer y puse mis platos en el fregadero, los lavaré cuando regrese. Agarré la mochila y salí caminando hacia la escuela, quedaba algo lejos, pero podía ir rápido con las ruedas de patines en mis tenis.
Al llegar solo podía ver a las personas codeándose, jugando y riendo con sus amigos de la secundaria, yo por otro lado, no tenía a nadie quien llamar amigo, siempre estuve solo, a todos les daba algo de miedo por mis... habilidades.
Solo esperé a que sonara el timbre de entrada para caminar y sentarme, solo quedaba el cuarto asiento de la tercera fila, estaba rodeado de chicas, me resigné y me senté en ese lugar.
-Oye tu- dijo la chica pelirroja y de cabello corto a mi costado izquierdo- ¿Quién eres? -.
-Yo soy Kyoun, Kyoun O’Hara -contesté algo nervioso y entrecortado debido a la mirada de ella y de sus amigas a que se encontraban a mí alrededor.
-Yo soy Yin Akame -me sonrió levemente- ¿eres tímido? -rio entre dientes y dijo: - eso es lindo -.
-eh, ¿yo? ¿lindo? -a pesar de que suelo ser serio, no pude evitar ponerme nervioso y sonrojarme por su comentario.
-Si, eres muy lindo- dijo la chica de pelo negro y largo, el cual le cubría los ojos. Ella se encontraba detrás mío y se podía notar que al igual que yo, se encontraba nerviosa.
-Ella es Tanaho Mamoru- dijo Yin- es tímida, pero es una buena chica, y ellas son: Chiori Kanabasa -exclamó señalando a una de sus amigas con cabello rubio y una cola de caballo- y Minaho Gase -señaló a una chica peliverde y cabello ondulado y corto.
- ¡Es muy lindo! - exclamó Chiori tras lo cual me dio un abrazo algo asfixiante.
- ¡Oye cuidado con el! ¡me lo vas a romper! -gritó Minaho.
- ¿”me lo vas a romper”? ¡¿quién dijo que él era tuyo?!- respondió Chiori con un tono algo histérico.
-Tranquilo, ellas no siempre son así, pero se emocionan con los chicos lindos- dijo Yin entre risas.
Aproveche que ellas estaban peleando para escabullirme. El profesor llegó justo después de ello y volví a mi asiento. Podía sentir las miradas de esas chicas en mí, solo me quedaba ignorar eso.
-Bien, bien, bien, antes de comenzar con las actividades de curso debo tomar lista- dijo el profesor parándose a lado de su escritorio- ¿Carlos está aquí? -.
- ¡Presente! - gritó un chico.
Bah, empezaron con la lista. Debería prestar atención para ver si hay alguien que podría ser mi amigo. Me di una cachetada y proseguí a escuchar los nombres, aunque ya se me hubieran pasado varios.
-¿Ferhz? ¿está aquí? - preguntó el profesor.
Un chico de cabello lacio y rubio se levantó de su asiento. Hizo una pose de diva haciendo que su pelo se mueva por breves momentos para finalmente responder: - ¡Por fin! ¡han llegado a lo mejor! ¡Yo, Ferhz Trump, estoy aquí! ¡seré el mejor héroe! -.
-Uhu, siéntate, debo seguir tomando lista –dijo el profesor, el cual parecía atónito por la actitud de ese niño- em ¿está Dan? ¿Dan Fuster? Eh, parece que aún no llega, veamos ¿Kyoun está presente? -.
Me levanté algo nervioso y respondí: - ¡Yo! - volví a sentarme tan rápido como pude. Detesto tener nervios.
-bien, ¿Qué dicen si hacen una pequeña demostración de sus poderes? Esto será para que tengan más confianza entre ustedes. Comencemos con- dijo el profesor, aunque fue interrumpido rápidamente por Ferhz: - ¡Yo iré primero! ¡el número uno siempre debe llegar primero! - el chico se paró enfrente del salón, una ligera ventisca entró por la ventana creando un arco de viento en las manos de Ferhz- ¡Yo, Ferhz Trump! Tengo la magnífica habilidad ¡de no poder fallar! ¡Perfect shot! - hizo como si estirara un hilo invisible en el arco, de pronto se materializó una flecha difícil de visualizar debido a que parecía estar hecha de viento al igual que el arco e hilo. Soltó con delicadeza la cerda disparando la flecha y atinando en las doce en punto del reloj en el muro trasero del salón.
Se escucharon unos cuantos aplausos de parte de mis compañeros. Voltee a ver a ese chico y parecía molesto por mi indiferencia ante su acto. Después se fue a sentar.
-Buf- reaccioné. Solo espero no tener que pasar. Lo malo es que siempre me hacen pasar de los primeros por ser de los últimos en la lista.
-hmm, veamos, Carlos ven aquí, muéstranos tu habilidad- dijo el profesor sentándose en su escritorio.
-Perdón profe, no puedo hacerlo, mi habilidad es duplicar habilidades por 5 minutos- dijo Carlos con los brazos por detrás de su espalda y moviéndose de un lado a otro.
Se escucharon varios aplausos y halagos, eso era una habilidad poco usual, pero bastante genial.
-Eso está muy bien, a ver, Miguel, enséñanos tu poder- dijo el profesor con un rostro extraño ¿qué estará pensando?
-¡Hola! ¡yo soy Miguel, pero pueden decirme Maiky, mi poder es explotar cosas- Maiky apretó el puño y la banca fuera del salón explotó. Muchos gritaron de asombro y se escucharon muchos aplausos. Las chicas a mi alrededor aprovecharon y claramente fingieron asustarse y me abrazaron.
- ¡Hey! - grité para que me soltaran y el profesor fijó su mirada en mí.
-Bien Maik, ve a sentarte, ¡tú! El casanova, deja a tus novias y pasa a mostrarnos tu poder-.
¡Demonios! Odio que la gente me juzgue por mí habilidad. Me resigné e intenté soltarme de las chicas. Me terminaron soltando y pasé al frente.
-Hola, yo soy Kyoun, soy nivel veinte y mi poder se llama... “Hero”, multiplica mis estadísticas por mi nivel- volteé a ver a los demás, pero todos lucían extraños, alcancé a oír varios susurros: “ese es el chico que nació con estadísticas muy altas” “él no debería estar en esta clase” “¡¿nivel veinte?! ¡nació con mejores estadísticas que el resto, con ese nivel y habilidad es casi tan fuerte como un profesor!”. No de nuevo todos me tendrán miedo. Ya no podré tener amigos irónico ¿no? Lo más importante en este mundo es la ética, pero no pueden evitar apartar a las personas. fui a sentarme, todos cuidaban de no tocarme y se hacían a un lado. Las únicas que no parecían estar asustadas eran las chicas. pero no es lo mismo.
Dejé de prestar atención a la clase ya que todo era lo mismo, esperé a que sonara la campana del receso. Tomé el sándwich que mi madre me preparó y me dispuse a salir.
-Oye Kyo- dijo Yin tomándome de la manga de mi sudadera- siéntate conmigo- la chica sonrió y pude ver sus mejillas algo enrojecidas. No sabía que responder. Podría ser mi amiga, pero, necesito tiempo para reflexionar-.
-Emm, yo- ella me interrumpió.
- ¡Anda! ¡por favor! - siguió insistiendo.
-Esta bien- dije para después suspirar, no tenía de otra, seguro ella me insistiría hasta que vaya sí o sí.
- ¡Gracias! Ven, vamos- me tomó de la muñeca y me sacó casi a rastras del salón. Nos sentamos en una banca y empezamos a comer. Es la primera vez que como con alguien a lado que no sea mi madre. Es extraño, cada vez que la volteaba a ver, ella me estaba mirando, no pude evitar ruborizarme.
Di una mordida al sándwich y de pronto fue atravesado por una flecha clavándolo en la pared.
-Vaya, vaya, “the hero” ¿no? Dime héroe, ¿disfrutas comiendo con tu novia? -dijo Ferhz.
-Ella no es mi- fui interrumpido por Yin.
- ¡Deja a mi novio, Ferhz!- gritó con un tono enfurecido.
-Bueno, lo haré, pero solo si nos ganan en un combate-.
- ¿Por qué habría de combatir contigo? - repliqué algo estresado.
-Porque así yo, ¡el poderoso Ferhz, mostraré que soy el mejor de la escuela! -.
-Puf, bien- me levanté y estiré mis brazos y piernas- lucharé si eso te hace irte-.
-Hey, no será una lucha individual, así no tendrías ni una sola oportunidad, ¡Maiky eres conmigo! Tú, López, ven conmigo también-.
-Está bien, pero no me llamo López- dijo López.
-Cállate y ven López, esto es importante- dirigió su mirada hacía mi- tú agarra a quienes quieras, pero aparte de tu novia dudo que alguien te quiera ayudar, les das miedo a todos, más que un héroe, eres un villano- dijo riéndose Ferhz.
-No le hagas caso- decía Yin mientras me tomó de la mano- podemos vencerlos, yo te protegeré-.
-De acuerdo, vamos a ello- un chico de pelo castaño se puso frente a mí.
- ¡Espera! ¡yo te ayudo! - gritó el chico.
-¿huh? ¿Quién eres? -le pregunté.
-Eh soy Carlos, no soporto a Ferhz es muy presumido-.
-Gracias -le dije y me puse enfrente de ellos- yo me encargo de pelear, no quiero que ustedes se lastimen-.
- ¡Pero tu! -dijo Yin.
-No te preocupes, saldré de esto sin rasguños- le dije calmado.
-Oye Kyoun- dijo Carlos- tienes cinco minutos, durante ese tiempo serás prácticamente invencible, hasta para un profesor, después de ello podrías llegar a lastimarte-.
-Gracias, lo tendré muy en cuenta-.
- ¡Vamos! -gritó Ferhz- ¿ya terminaron sus sermones? ¡peleemos! -estiró rápidamente el hilo y soltó una ráfaga de flechas.
- ¡Cuidado! - gritó Carlos- ¡Hyper Boost! -se rodeó de un aura azul que me transmitió. Pude sentir la fuerza invadiéndome. Se sentía muy genial.
Mis reflejos actuaron, salté a un lado para esquivar las flechas, normalmente me hubieran dado, es lo normal, son flechas, pero, no solo mi fuerza aumentó, también lo hizo mi rapidez. Fue sorprendente. Me detuve haciendo fricción con el suelo. Pulsé un botón en mis tenis haciendo que les salieran ruedas de patín. Patiné hacia ellos a toda velocidad. Ferhz me lanzó una flecha de nuevo y gritó: - ¡yo no puedo fallar! -.
- ¡Tu habilidad te impide fallar! ¡pero a mí no me impide esquivar! -respondí eludiendo su flecha.
- ¡Esquiva esto! -gritó Miguel apretando su puño, ¿a qué le estará apuntando? ¡la flecha! Ésta explotó detrás de mí, en realidad solo sentí un cosquilleo, si no fuera por Carlos, hubiera sido grave.
Giré golpeando en el estómago a Miguel. No medí mi nueva fuerza, por lo que parecía haberse desmayado.
- ¡Eres un Tonto! - gritó López mientras corría hacia mí para golpearme. No sé cuál es su poder, debí de prestar atención, o no. Me barrí tirándolo al suelo, se pegó en la nariz y empezó a llorar.
Una flecha de Ferhz me dio en el brazo, ¡estaba esperando a que me distrajera! Aunque en realidad no dolió.
-¡Kyoun! - gritó Yin- ¡yo me encargo! ¡Water Bandage! -del aire se empezaron a juntar las moléculas de agua alrededor de mi herida rompiendo y quitando la flecha y sanando mi herida.
- ¡No necesito de esos dos tontos! ¡yo seré el mejor héroe! - gritaba muy apasionadamente Ferhz comenzando a disparar flechas como una metralleta.
Esquivaba como podía las flechas, Ferhz parecía empezar a hartarse. Todavía me quedan dos minutos del aumento de poder que me dio Carlos. Debo aprovechar. Avancé constante hacia él, debo estar cerca para atacarlo.Oh no, llegaré muy tarde a la escuela, ¡maldito despertador! Tal vez no me digan nada si entro antes de que se acabe el receso. Llegaré en dos minutos... ¡puedo hacerlo!
Ferhz saltó muy alto y gritó: - ¡Yo no perderé! ¡Topologic Wind Arrow! - jaló el hilo creando Una flecha enorme, una ventisca nos azotó y después Ferhz soltó la flecha.
Traté de esquivarla, pero me siguió. No me queda de otra, tendré que usar mis ataques especiales.
Junté todas mis fuerzas, sentí como la energía recorría mi ser, para gritar: - ¡Earth Dome! -muros de piedra empezaron a salir del suelo y me cubrieron formando un domo. La flecha rompió el domo y a sí misma. Salí del domo saltando hacia Ferhz que se encontraba suspendido en el aire por su misma habilidad.Vamos, falta poco, ¡puedo ver la escuela desde aquí, a la próxima pondré quince despertadores, diez no sirven.
-No te vuelvas a meter conmigo- concentré toda mi energía en mi brazo, aprovechando que aún me queda un minuto de aumento- ¡Shadow Claw! -la energía empezó a salir de mi cuerpo, cubriendo completamente mi brazo formando una garra gigante. Aporreé con ella a Ferhz y terminé haciéndolo volar.
Aterricé en el suelo. Yin me abrazó y Carlos brincaba de felicidad. Nuevo nivel... veinticinco, cuando uno sube de nivel, solo lo sabe. Es un sentimiento extraño.
-Kyo, ¡lo hicimos! - gritó Yin.
- ¡Si, lo hicimos! Kyoun ¿te gustaría ser mi amigo? - dijo Carlos.Ahí está. Cruzando la calle.
Vaya esto es todo lo que mi madre dijo que tendría algún día, un amigo, una novia, aunque no la pienso considerar así aun. Mi madre tenía razón en todo, por fin tengo aquello que tanto quise, para poder conseguir una vida normal, pero esta habilidad, es una maldición, una maldición para salvar este mundo.
- ¿recuerdan lo que dijo Ferhz? Pues tenía razón, yo soy el villano- chasqueé los dedos creando una plataforma morada transparente e intangible en el área de la escuela.
-¿de que estas hablando? - dijo Yin con voz temblorosa.Llegué, ¡no puedo esperar a tener nuevos amigos y que tengamos aventuras juntos! Esto es muy emocionante. Giré el tomo de la puerta...
-Crearé un mejor mundo y justo me quedan dos segundos, ¡Venom Zone! -grité con todas mis fuerzas envenenando a todos en el área y haciendo baja tras baja. Todos gritaban agonizando.
-¡Kyoun! ¡¿porque?! - gritó Yin mientras caía al suelo y empezó a retorcerse al estar muriendo lentamente.
Nivel veintinueve... treinta y seis... cuarenta y dos... cincuenta y siete... sesenta y cinco. Puedo sentir mucho poder... ¡mucho más que antes!- ¡Ya llegué! ¿eh? - lo único que vi al llegar a la escuela, fue a un chico de pelo blanco riéndose como un demente encima de varios cadáveres putrefactos.