Broken and Rotten

capitulo 5: Evasion y respuestas

Urgencias llego al rescate no mucho tiempo después, entraron hasta el baño, puesto que no me atreví a mover a Margaret ni siquiera un milímetro, en realidad lo único útil que hice en ese momento fue encerrar a Charles en mi recala y limitar mis movimientos a observar como los paramédicos se encargaban de todo, ni siquiera fui capaz de contestar una sola pregunta que pudiese contribuir a la salud de Margaret, me quede fría.

Solo llore y limpie con desesperación mis manos manchadas de sangre contra mi ropa, aquello me altero.

¿Como podría yo dar la cara a Jonh si Margaret perdía a el bebe por mi culpa?
El ultimo momento en el que estuve consciente fue al ver las el sonido de la ambulancia disiparse a la distancia.

Y el mundo cayo sobre mis hombros, puesto que aquello era en su totalidad culpa mía.
Me refugie en mi habitación a llorar como adolescente en pena, a todo lo que mis pulmones podían soportar.

Y en medio de mi llanto fui consciente de una mirada acosadora que caía sobre mi. Unos ojos luminosos se mostraban desde la obscuridad que mi habitación proporcionaba.

Mi corazón se aceleró y comencé a lanzar cosas como loca en dirección a aquellos ojos acosadores. Cojines y zapatos volaban por los aires estampándose en el suelo con violencia, pues ninguno de los objetos que lance dio en el blanco.

Aquellos ojos se sumaron a una sobra y la sombra lanzo un chillido.

Recordé.

La sombra le pertenecía a Charles, lo había encerrado en mi recamara para que nadie lo viera y en medio de mi tormento emocional había olvidado que el estaba ahí.

La sombra salio de la obscuridad y se convirtió un un confundido y asustado Charles que se aproximaba cautelosamente a mi dirección.

La vergüenza se apodero de mi, aun estaba desnudo, anteriormente no había reparado en ello pero ahora me parecía por mas, vergonzoso.

Deje aquellos sentimientos aun lado y me concentre en su apariencia, aun parecía un cadáver andante pero con mejor aspecto, sus labios ya no estaban morados o resecos, sus ojos no estaban enrojecidos y los profundos moretones de sus muñecas se habían disipado considerablemente, pero aun había cosas que lucían horrendas en el. Tenia unas profundas cicatrices en el abdomen y unas aun peores en la espalda.

Aquella visión me tenia desconcertada.

Y cuando lo tuve frente a mis narices sentí un impulso que termino en mi en vistiendo violentamente a aquel chico mientras sujetaba su cuello con ambas manos, cortando su respiración.

Pero la realidad cayo sobre mi antes de que fuese demasiado tarde, no acabe con su vida en lugar de ello me eche a llorar nuevamente.

Me arrastre en dirección a mi cama mientras pensaba en el motivo de mis acciones, quería matarle por lo ocurrido con Margaret, pero eso no resolvería nada, en vez de ello daría un peso extra a mis inquietudes emocionales.

Todo estaba pasando tan rápido para mi comprensión, hacía apenas 23 horas yo estaba durmiendo apaciblemente en mi cama y ahora estaba llorando por dos citaciones, en menos de un día ya le había causado un posible aborto a alguien y por otro lado casi mato a la misma persona dos veces.

Era demasiado.

No sabia nada de aquel Charle Lewis, ni siquiera sabia si ese era su nombre real, no me había puesto a pensar en ello y aun así le deje entrar a mi casa poniendo en riesgo mi integridad y la de Margaret.

Medite unos segundos.

Me sorprendí de mi estupidez, hasta hacia un día anterior las decisiones mas estúpidas que había tomado eran : casarme y comprar un tiempo compartido, pero aquello, meter a un desconocido a casa superaba por mucho los limites de la irracionalidad.

Probablemente solo una adolescente confundida y perturbada con una escasa supervisión parental hubiese sido capaz de hacer algo tan estúpido como aquello: Meter a alguien herido a su casa sin dudarlo mucho, pero yo una mujer adulta,con carrera y divorciada debí pensarlo mejor.

Me levante de mi miseria al cabo de un rato y salí del cuarto abandonado a un chico estigmatizado y perplejo en el suelo de mi habitación.

Al salir de mi habitación me encontré frente a la puesta abierta de el baño, aquello parecía una escena de el crimen.

El agua de la tina estaba turbia y parte de ella se escurría por los bordes formando  charcos en el piso, esto a su vez se mezclaba con la sangre que Margaret había dejado.

El resto de el piso tenia impregnadas  huellas de botas anti-derrapantes pertenecientes a para médicos en un peculiar y sucio rojo carmesí que habían hecho y desecho en mi baño con el fin de ayudar a Margaret, aquella escena parecía sacada de una película de terror.

Pero en el lavabo, aun limpia, se encontraba la pijama verde bosque como si no hubiese pasado nada.

Cuando la tome, me di media vuelta y respire hondo.

Entre a mi cuarto me vi sumergida en la búsqueda de Charles y en efecto le encontré , le encontré dentro de mi armario envuelto en las sabanas limpias.

En aquel momento parecía que mi delicadeza femenina había desparecido, no me detuve a razonar con el para hacerlo salir, en su lugar tire con fuerza de uno de sus brazos y este cayo violentamente al piso, pero tampoco repare en ello, me di la vuelta.
Al momento de intentar vestirlo nos encontramos el uno a el otro atacándonos, el como siempre ejercía resistencia a pesar de no tener fuerzas.

— Sabes, me gustaría poder interactuar contigo sin necesidad de malgastar mis fuerzas forcejeando —.

Pero parecía que mis palabras eran extrañas para el y continuo luchando conmigo hasta que finalmente logre mi cometido.

La pijama en efecto le quedaba enorme y en busca de una solución poco meticulosa termine por enredarle el tirante de un brasier alrededor de su cintura para evitar que los pantalones se cayesen.

Cuando termine lucia un tanto extraño, como un niño en ropa de adulto, la ropa le quedaba holgada pero a lo largo lucia bien, le observe unos instantes antes de expulsarlo de mi recamara con el fin de darme tiempo de cambiarme.

Rebusque entre mi ropa algo de ropa cómoda, en lo que hija del día me habían escupido, salpicado y además me había visto en la nesecidad de interactuar con sangre.

Respire hondo.

No estaba siendo hospitalaria con el, ni siquiera me esforzaba, y por un momento sentí culpabilidad por mi falta de interés en ayudar a Charles,
Si bien en menos de 24 horas había causado suficiente desastre, yo sabia que mi postura tenia que ser neutra.

Intentaría hacer las pases.

La huelga de mi escuela termino y ahora hay que recuperar un semestre en casi un mes lo que significa que tendré trabajo.

Este capitulo en si mismo no esta completo, le hace falta el giro dramático necesario.

En cuanto a la historia, le espera un cambio de 360° grados, cosas grandes e inesperadas llegaran a la vida de Daisy.

De cualquier modo gracias por leer, esperen la actualización de este capítulo mas tardar a el viernes.