Equilibrio

Capitulo 3

      La helada brisa bailo los negros cabellos del Dios de la oscuridad, quien miraba el profundo bosque montado en su caballo negro.
   Había decido salir de su palacio a aventurarse por cuenta propia a espiar los mundos que vivían bajo la oscuridad.
    Desde ese punto del camino en que él observaba, estaba el bosque de árboles de hojas crespo donde provenía distinto sonidos de animales, uno más tenebroso que otros pero no todos hacían daño, lo que eran de apariencia más monstruosa, era lo más pasivos mientras que los que mostraba una apariencia inocentes podía ser los más peligrosos.

    Loki debía atravesar aquel espeso bosque para encontrar la entrada hacia otro mundo que sólo él y otros de confianza sabía de su existencia, estaba agotado de sólo oír la poca información que sus elegidos le daban, aunque pudieran ver a través de una laguna de cristal, necesitaba estar presente y ver sin magia entre medio como vivían las criaturas bajo su maldición.
   Esta era la última oportunidad de ver si alguno tenía arrepentimiento sobre sus errores, aún consciente que los humanos no fueran capaces de sentir culpa por la corta vida que fue otorgada a ellos, esperaba que al menos hubieran quienes aún mantuviera en escrito la leyenda que hubo un tiempo donde existió la luz pero por el egoísmo y discriminación hacia las criaturas de la oscuridad fueron castigados a una larga vida de helada oscuridad.

    Entonces Loki Galopeo en su hermoso caballo de brillante pelaje hacia al bosque, llegando a sus agudos oídos el cantar de una fémina con una voz tan dulce como nectar de una flor más Loki sabía muy bien que seguir aquel cantar sería dirigirse a aún peligro eminente, por ello cambio de dirección a un camino más alejado a su destino.
    Conocía muy bien las criaturas que vivían en el bosque, podía sentir la mirada de varios camuflajeados en los troncos de los árboles que lo observaba sin atreverse acercase al ser poderoso que galopaba sin protección pero, que emanaba un aura más oscura que la de ellos mismos, no eran estúpidos como para atacar a una criatura más poderosa, eran lo suficientemente inteligentes como para mantenerse al margen hasta perderlo de vista.

    "Aprecian su vida" Pensó el Dios dibujando una sonrisa ladina en el rostro.

    A pesar de haberse alejado del camino correcto, logro llegar a lo que era una cueva estrecha; sin bajarse del caballo se acerco lo suficiente miro por el rabillo de cada ojo si alguien lo había seguido, mas nadie quiso tentar su vida a seguir a un ser poderoso.
    Posteriormente Loki con su magia entro al portal junto al caballo, apareciendo cerca de la punta de un acantilado, llegando a sus oidos el sonido de las olas romper contra las rocas; de inmediato se alejaron del borde hasta estar en un suelo seguro.

    —No recordaba que está  entrada era peligrosa—Musitó Loki mirando las pocas rocas que cayeron por  peso de los dos—Pero estamos bien—Palmeo el cuello del caballo animándole seguido de mirar al frente y darse cuenta que a pesar de no ver luz del sol a lo lejos se veia bastante iluminado
"¿Luz artificial en mirgard? Umm los humanos no son tan inutiles"

    Loki galopeo en su caballo por mas de una hora hasta estar lo suficientemente cerca de donde estaba la luz artificial.
   Desde aquel punto podia ver con mas clarida que se trataban de grandes edificios iluminados.

¿Como lo habian logrado?
  
    Los humanos no poseia ningun tipo de magia o poder, era mortales con un corto tiempo de vida, sin embargo habian sido capaces de crear una luz artificial para iluminar su pueblo, no habian necesitado del Dios del sol como se esperaba, por cuenta propia evolucionaron y aquel hecho alimento la curiosidad de Loki.

   —Con esa forma no podras seguir conmigo—Le hablo al caballo acariciando su lomo, planeaba adentrase con la apariencia de un migardiano del monton y por lo que habia alcanzado ver su transporte no era algún animal, si no un medio. Transporte diferente pero eficiente.
—¿Lo entiendes?