77.- Inseparables y letales (Goldentrap)

El nuevo (3)

- si tratarán de ayudarme- gruñó mostrando los colmillos ladeadamente y por esto me refiero a solo un lado y con amenaza, como los felinos o los cazadores hacen. Pero ese rubio no se inmutó.

Al contrario, se levantó la manga de la muñeca izquierda hasta el codo sin dudar de lo que estaba haciendo y se la extendió sin miedo acercándose más para que llegase a su alcance.

- Yo lo haré... Si no confías en mis palabras, puedes morderme- habló con seguridad, su ojo marrón estaba lleno de determinación, confirmando por ante mano que no lo mordería por su seguridad y su fuerza con las palabras...

Quedó en silencio una vez más, después suspiró mirado a otro lado, al suelo. Devolvió el apretón de manos, el cual no tenía ese fin, pero eso decía con confiaba en él para ayudarlos, a los dos. Sonrió un poco orgulloso de lo que había conseguido, y al soltarlo, el caníbal retomó el cuerpo de su querido pirómano y se levantó alcanzando sus famosos dos metros de altura. Pero no sé inmutó.

Siguieron el camino hacia la puerta en línea recta pasando el límite y sintiéndose especial por ello, pero sin mostrarlo, era un sentimiento interno, nunca había pasado de allí consciente, jamás había pasado esa puerta despierto, y ahora, con un sonoro chasquido de dedos se abrió de golpe haciendo que todos los que al otro lado se encontraban apoyados... Se precipitan contra el suelo inmediatamente. Después se levantaron más rápidos que flash y se alejaron del muchacho que cargaba al otro. Algunos de ellos apuntando con pistolas de aire con dardos para dormirlo.

- Dejen las idioteces, no hará nada...- gruñó el rubio de ojos marrones. Se notaba que la mueca de injusticia era notable en su perfil y que le daban ganas de chasquear los dedos para arreglar la situación, pero eso sería peligroso para él, muy peligroso realmente.

Dudosos, bajaron las armas. Como si alguno estuviese esperando algo raro o peculiar. Suspiró con un sentimiento desesperado de injusticia, después el rubio de cabello emo se encaminó hacia la sala asignada por los superiores hacia el caníbal. Pero había un detalle y era el despertar de Golden a medio camino.

- ¿Lo conseguimos?- fue lo primero que articuló el joven pirómano mirando los ojos del rubio oscuro, con una deliciosa y jugosa sonrisa en sus labios esperando la respuesta positiva. Miró después al nuevo y miró alrededor sin entender la situación.- ¿No lo hicimos?

- Saldremos juntos más adelante, curados...- le respondió con voz dulce. El de ojos marrones se quedó en silencio y apartó la mirada por respeto e intimidad por los chicos.

Golden crispó su rostro en una mueca extraña. Incomodidad y asco. No entendió la razón por ese gesto. Era irónico.

- ¿Quién nos garantiza eso?- fue un tono siniestro que hizo que al nuevo le pasará un escalofrío por la columna - es el nuevo, acabará siendo como los demás...

- esta vez no...- puso los ojos en blanco reconduciendo su cuerpo con más comodidad sobre los brazos del otro, pidiendo que lo bajará al suelo, eso hizo...- no me tiene miedo...- Golden miró al nuevo fijamente a los ojos, con una mueca macabra y tenebrosa en todo ello. No sé inmutó, tampoco con una mirada siniestra, y tampoco le pasó, miró a Springtrap quien tenía una mirada de obviedad en su rostro. Se cruzó de brazos y ladeóla cabeza a un lado- confío en que no nos dañe como lo hicieron los otros, además, pasó el límite marcado sin tensarse o tener pavor y estoy consciente ahora mismo.

Golden suspiró y lo miró sin expresión en su rostro, con obviedad, con ironía. Le había derrotado, lo admitía, pero no quería que se viera obvio. Miró al nuevo.

- ¿Quién eres y como te llamas?

Fue un tono cruel y despiadado. No es que por eso se sintiera insignificante o amenazado, sabía que lo intentaría achicar, pero no sé iba a dejar.

- Mi nombre es Silver Line, digno y entregado a ayudar a los marginados... Buscado por las fuerzas armadas y el ejército, pero eso no es un tema que importe ahora- rió un con ironía al pensar en el motivo por el que lo buscaban y por el que se había tenido que cambiar de sexo para no ser descubierto, le gustaba esa forma de él, no le resultaba desagradable tener que llegar a esos puntos de tener que verse en la situación de cambiarse el sexo para no ser detenido.- prometo ayudaros a salir y entrar de nuevo en la sociedad sin ser señalados, porque a mí nadie me ha ayudado y no quiero que paséis por el infierno que yo pasé...- haciendo apelación de si pasado y los malos recuerdos que tuvo escapando de las fuerzas armadas, escondiéndose en callejones y soportando el dolor de pasar a un tratamiento de transgénero para no ser identificado, sufrió bullying y pisotones, y era por eso que quería ayudarlos, ahora que ya no estaba en peligro crítico, para que no pasarán por lo mismo que él. Verse marginados de la sociedad.

- Silver Line...- repitió como si le sonara ese nombre por alguna razón, pero era totalmente irreconocible, no se parecía en nada a su "yo del pasado" el apellido era el mismo, pero nombre similar, pero su carácter físico y personalidad eran totalmente diferente a como era antes.- tu determinación en tu mirada me dice que no mientes y que nos ayudarás... Pero sospecho tu carácter tan... Reservado.

- me acabaréis conociendo como un libro abierto- sonrió ladeado con ironía- no me gusta hablar donde los ojos y los oídos están en todos lados- y se dio la vuelta hacia la habitación, confiado de que ambos lo seguirían.- estáis los dos en la misma habitación, no?- asintieron sin decir nada.

Tal y como sospechaba, lo seguían por la curiosidad de su personalidad. Él no era como todos, realmente quería ayudarlos y quería ver un mundo totalmente libre, sin que nadie sufra. Ellos habían sido los elegidos para ese plan maestro de liberación. Empezaba por algo pequeño.

Acabaría con un monumento.

Pero sin mentiras ni engaños, no era un falso, por más que su exterior lo demostraba.

Golden miró a Springtrap confuso por su carácter, no había matado a ese muchacho por sus palabras. Realmente parecía que confiaba en sus palabras y Springtrap no era inocente, debió meditar en silencio su respuesta antes de lanzarse a matar. Y ese chico parecía muy confiado, quizás sabía que tenía una posibilidad de morir en sus manos. Pero confió en que no lo mataran. No entendía ese cambio repentino de confiar en alguien más solo por sus palabras.

Springtrap, en cambio, tan solo estaba preocupado por lo pensativo que estaba su pirómano, así que tan solo lo rodeó por los ojos hombros agachándose un poco y besó su cabeza despertandolo del trance, sonrió al ver su mirada llena de desconcierto por esa acción.

- saldremos de aquí antes de lo que piensas...- sonrió para calmar cualquier mal interno que pudiese tener el otro. Sonrió sin ganas estrechándose contra él en busca de un abrazo fuerte de parte del otro.

Justo cuando llegaron a la habitación de ambos.

(Si en algún momento ven alguna falta lamento las molestias, es que el auto-corrector me lo traduce todo automáticamente, es posible que algo que yo haya escrito lo traduzca como otra palabra, lamento las molestias una vez más).

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Presentación del nuevo!!!

Si, Silver es transexual.

Y tomenlo como un personaje más, no es que tenga relevancia. Son Springtrap y Golden los protagonistas, Silver solo quiere curarlos y ayudarlos.

Lo típico.

En fin, espero que os haya gustado y nos vemos en el próximo capítulo

Bye~

By Ecchisforlife

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