Aquel había sido el día más extraño de toda su vida. Tras descubrir aquella cajita de música, Baekhyun se había puesto a tararear aquella musiquita y a tratar de imitar a la bailarina, haciendo reír al alto, provocando que Baekhyun lo mirase aturdido.
Después de aquello Baekhyun había desaparecido por el interior de la isla, y Chanyeol no sabía si debía ir a buscarlo.
Finalmente se levantó con el pensamiento de ir a buscar al chico, ya que comenzaba a anochecer y a hacer frío, y Chanyeol no tenía ni idea de como encender un fuego.
Cuando iba a comenzar a caminar hacia el interior, escucha ruido en los matorrales, y voltea para ver la impactante imagen de Baekhyun con un tigre sobre sus hombros.
Este iba con una enorme sonrisa, y soltó de golpe al tigre abatido en el suelo, frente a Chanyeol, el cual observaba atónito la escena.
¿Cómo un chico que se veía tan delgado y delicado podía con aquello?
En un abrir y cerrar de ojos, Baekhyun ya estaba en el suelo rasgando la piel del animal, la cual comenzó a meter en una especie de cesta, suponía que sería para después hacer tejidos.
Tras sacar toda la piel, empezó a cortar la carne.
Esa noche comerían carne de tigre, y algo de carne de ciervo.
Chanyeol se sentía más arropado con el fuego y la carne en sus manos. Aquella tarde tan solo se había comido un pescado, necesitaba llenar su estómago, y tanto que lo hizo. No sabía que la carne de tigre estaba tan buena. Se sentía extraño, ya que por otra parte le daba pena comérselo, pero, se trataba de supervivencia ¿No?. Al fin y al cabo, Baekhyun había sobrevivido de aquella manera.
Cada vez aquel joven le parecía más interesante.
Chanyeol estaba lleno y apenas había comido un cuarto de toda la carne obtenida. Baekhyun estaba engullendo todo lo demás, no comprendía como le cabía tanta comida en el estómago.
Una vez había terminado, Baekhyun se apoyó en un árbol, y sacó una especie de palo un tanto puntiagudo, parecía estar hecho de hueso. Y con este comenzó a sacarse los restos de comida de los dientes.
Ahora que lo pensaba, la dentadura de Baekhyun era muy bonita. Lo cual era extraño, por todo lo que comía y por el hecho de que estaba en una isla desierta sin cepillo y pasta dental.
Tras aquello, cogió una especie de bolsita hecha con piel, y sacó de esta lo que parecían ser hierbas secas, y comenzó a frotarlas en su dentadura, era impresionante como era capaz de lavar sus dientes, como entendía de higiene. Él debió haber vivido con otros humanos para saberlo, alguien debió haberle enseñado sobre higiene.
Chanyeol se acercó a Baekhyun, se sentía incómodo, necesitaba también una de esas hojas, no podía aguantar con una dentadura sucia.
-¿Puedo...? -Se sentó al lado del chico. Y este de alguna manera notó sus intenciones, y le tendió unas cuantas hojas, e imitó lo que había hecho Baekhyun anteriormente.
La noche se estaba tornando más fría, parecía que ni siquiera el fuego podía calentarle. Estaban en el interior de aquella pequeña choza. Baekhyun notó como el alto comenzaba a temblar, y sacó aquella capa o manta que había hecho aquella mañana, y arropó a Chanyeol con ella, el cual se sorprendió al notar el peso sobre sus hombros.
Le agradeció aunque no lo entendiera, y se acurrucó en la manta, quedándose dormido.
Se despertó de madrugada, no sabía que hora era, solo sabía que era de noche, y que no podía dormir, debido a la incomodidad de estar tumbado en la arena, solo que aquella manta lo ayudaba.
Miró hacia donde se encontraba Baekhyun, y su corazón se ablandó al verlo dormir sobre la arena y temblar del frío nocturno. Estaba seguro de que aquella manta la había hecho para él, y el alto se estaba apropiando de ella.
No era una manta muy amplia, ya que estaba hecha de piel de ciervo, pero si lo suficiente para tapar a los dos.
Se acercó sigilosamente a Baekhyun para no despertarlo, se pegó lo máximo que pudo a él, tampoco quería que fuera muy incómodo, pero era la única forma para entrar en calor. Tras eso, lo arropó con parte de la manta, y lo abrazó por la cintura para que esta le cubriera del todo, y no acabase con ninguna extremidad fuera.
Era lo de menos después de que le salvara la vida.
Entonces trató de recordar. Como... había acabado en aquel lugar. No sabía porqué no recordaba nada. Solo recuerda que estaba en un crucero... acaso...
Sintió un escalofrío recorrer su cuerpo. No quería pensar en aquello. Estaba asustado, ¿Es que acaso el barco se había hundido? ¿Qué había pasado? ¿Y sus padres? ¿Y su hermana? ¿Y su novio?.
Comenzó a preocuparse ¿Estarán bien?. Cerró sus ojos tratando de despejar cualquier mal pensamiento.
Tormenta, esa noche había una tormenta...
Tratando de recordar, acabó atrapado en los brazos de Morfeo, otra vez.
Despertó al notar la luz del sol por la mañana. Era impresionante como por la noche hacía frío y por la mañana daba el sol de lleno. Apartó la manta y se dio cuenta de que Baekhyun ya no estaba a su lado. Entonces recordó que había dormido abrazado a él, y se sintió avergonzado.
Se levantó y estiró todas sus extremidades. Se había olvidado completamente de que su ropa estaba hecha harapos, seguramente una de las razones por la que esa noche tenía tanto frío.
Salió de la choza, y buscó a Baekhyun con la mirada, encontrándolo finalmente apoyado en el árbol.
Se sorprendió al verlo con una especie de aguja, seguramente la misma aguja de hueso que usaba para hacer los tejidos. Esta la estaba pasando por una de sus rastas, entonces entendió como es que estaban tan bien hechas. Él sabía arreglar sus rastas para que quedaran perfectas.
Entonces, Baekhyun se dio cuenta de su presencia, y dirigió su mirada al alto, apartándola inmediatamente, Chanyeol pudo notar un rubor adorable en el rostro de Baekhyun.
Se acercó sentándose a su lado, y notó como el más bajo se tensaba y se ruborizaba. ¿Acaso estaba así porque durmió abrazado a él? y lo más importante ¿Baekhyun sabía sobre el apego humano?
Cada vez confirmaba más su teoría, de que Baekhyun había sido antes un chico de lo más normal.
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Salvaje ×Chanbaek× (pausada)
FanfictionPark Chanyeol acaba de manera desconocida en una isla, inconsciente y con la ropa hecha harapos. Pero es salvado por un extraño y salvaje chico, que apenas sabía hablar, y parecía nunca haber visto a otro ser humano. Lo único que sabe es que su nomb...