Aún no es tarde [MutsUrie]

Capítulo 11: Sentimientos mutuos

Estaba mirándose en el espejo con una expresión seria en su rostro; la imagen de ella encima de un Urie moribundo, llorando mientras le pedía perdón volvía a su mente.
Cerro los ojos con fuerza conteniendo las pequeñas lágrimas que amenazaban con salir. Peino con sus manos su corto cabello hacia atrás y se sentó en la silla de su escritorio.

-No quiero que eso pase...-decía apretando los puños-No quiero hacerte daño-añadió recostando su cabeza en aquella mesa.

Aquello la había dejado bastante pensativa, ¿De verdad yo llegaría a ese extremo? Era lo que pensaba cuando se recordaba a ella misma apuñalando en el cuello a su antiguo compañero en ese espantoso sueño. Y todo por celos.

Recordó el día anterior en como el chico se despedía de ella besando su mano sin importarle la presencia de su compañero; y a ella, diciéndose a si misma que no sería necesario marcharse otra vez, pero nuevamente, aquella opción le parecía la más conveniente.

Su mirada se desvió en el pequeño calendario que tenía sobre su mesa, lo miro extrañada por unos segundos y se levantó con rapidez de donde estaba sentada con sorpresa tomando ese objeto y así mirarlo con más atención.

-No puede ser...-se tocó la frente apoyando su espalda contra la pared-¿Cómo no me di cuenta antes?-se dijo mientras sentía como las lágrimas que había estado conteniendo caían por su mejilla.

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-El nivel de los "Dragones huérfanos" a disminuido considerablemente, tal vez en menos de 2 años la TSC podra disolverse si las cosas siguen avanzando así-explicaba Yusa saliendo de la TSC junto a Urie encaminandose los dos hacia el Chateu.

-Por fin, el mundo se volverá aún más pacífico-decía el peli morado deteniendo su paso en medio del puente, seguido por su compañero, guiando su vista al cielo contemplando como poco a poco el sol se estaba poniendo.

El joven Arima se quedo observandolo en silencio-¿No crees que ya es hora de que formes una familia?-preguntó de repente haciendo que el mayor lo mire confuso-Me doy cuenta que sientes algo de envidia hacia Sasaki Y Kuroiwa por tener una familia.

-Admito que a mi también me gustaría eso...-se apoyó en la barandilla con la mirada hacia el frente-Una esposa e hijos, es algo que en verdad me gustaría tener-decía con seriedad, mientras en su mente aparecía la imagen de la morena sonriendole la primera noche en la que estuvieron juntos.

-¿Crees poder conseguirlo con Mutsuki? Por lo que vi ayer en la mañana ustedes tienen una relación mucho más íntima de lo que pensaba-Urie suelta una pequeña risa y niega con la cabeza.

-Ni siquiera yo estoy seguro que tipo de relación tenemos entre nosotros-sonríe levemente mirando sus manos-Pero si estoy seguro de que es ella la persona con la que quiero formar mi familia.

-¿Por qué no se lo dices?-voltea a ver nuevamente a su compañero-Nunca sabrás lo que pasaría si no lo intentas...-este toca el hombro de su superior regalandole un pequeña sonrisa-Buena suerte Urie-finalizó antes de seguir su camino hacia el Chateu dejando al peli morado pensativo.

-Tal vez tengas razón-añadió fijando su mirada en una pequeña tienda que veía desde su lugar.

Ya había oscurecido hace una hora.

Urie había llegado el Chateu siendo recibido por sus compañeros.

-Bienvenido devuelta Uri-lo saludó Saiko alegremente-¿Por qué tardaste tanto? Yusa-kun llegó antes que tú.

-Lo siento, me entretuve de camino aquí-miró todos los lados de la casa buscando a la joven morena, pero al no encontrarla volteó a mirar a su pequeña amiga-¿Dónde está Mutsuki?-preguntó extrañado, de camino a la casa creía que ella estaría esperando allí en la sala a que él llegara y que lo recibiría con una de sus lindas sonrisas, pero no fue así.