Colegio Celeste Farrec

Capítulo VIII El romance de Samuel

Las vacaciones pasaron con normalidad, cada uno de ellos decidió partir en un viaje distinto, Emily logró convencer a sus padres para que se fueran a Guadalajara, Alexa se fue a ciudad Juárez y Luise a la Ciudad de México, entre otros lugares que fueron visitados por los alumnos.

- ¡Que sueño! ¿Por qué tenemos que volver a clases? - Decía León mientras aún estaba medio dormido por desvelarse la noche anterior. - Eso te pasa por no dormirte temprano - Le reprochaba Alexa mientras ésta se cruza de brazos y volteaba al lado contrario.

Ambos chicos entraron al salón y se colocaron en sus respectivos lugares, el maestro Tatián entró tranquilamente al salón, dejó sus cosas en el escritorio y posteriormente se puso al frente para impartir la clase.

- Bueno, debido a diversas quejas que han hecho múltiples de sus maestros, hoy los cambiaremos de lugar - Todos protestaron en silencio, lo que le causó cierto disgusto al maestro. Sin embargo, éste siguió firme con la idea de cambiarlos de lugar. Todas las bancas fueron cambiadas, afortunadamente, Alexa y Dasha quedaron juntas. León y Emily, por su parte, quedaron en la banca de atrás, mientras que Luise y Patricia se sentaron en la última de la hilera.

Alexa quizo cambiarle a Emily por un rato, a lo que ésta no hizo ninguna objeción. Alexa logró percatarse de que el patio de la escuela se empezaba a llenar de muchos jóvenes que, a juzgar de su aspecto y su vestimenta, se podía deducir que eran de una edad mayor a la de ellos. Emily decidió acercarse a Daiana ya que le quería preguntar un par de cosas.

- Hola Daiana, oye ¿de casualidad sabes por qué están llegando tantas personas al patio? - Emily se sentó en la mesa, cruzó las piernas y finalmente posó la mirada sobre ella. - Esa pregunta es fácil. Se acerca el festival de fin de curso, en el cual normalmente los maestros eligen un tema de interés y ese lo representamos en un baile que será presentado en el Teatro del Estado - Daiana se levantó y fue a hablar con el maestro Tatian, quien estaba supervisando los vestuarios.

- Realmente no entiendo qué es lo que pretenden con esto, pero supongo que está bien. - Emily se retiró del lugar en rumbo a la cafetería. Mientras tanto, León y Alexa seguían platicando. - ¿Y tu hermana vino? - Preguntaba Alexa, mientras que Janette le estaba tomando las medidas para el traje. - Se supondría que estaba aquí afuera, pero no lo veo - León, de igual manera empezó a ver de lado a lado buscando a su hermana mayor, pero simplemente no la veía.

Samuel, por su parte, decidió retirarse del salón para poder ver si aquella persona que él esperaba con ansias ya había llegado. Emily entró al salón con un jugo en la mano, mientras que en la otra sostenía un monedero color azul rey, con decorados de color dorado.

Ésta se sentó junto a Dasha para después entablar una discusión sobre ella proyecto que se le sería expuesto en unos días. - Obviamente tenemos que hacer una maqueta que sea mucho mejor que el de el resto - Dasha estaba cruzada de brazos mientras tenía los ojos cerrados. - El Maestro Tatian nos había dicho que teníamos que en estos días nos dirigimos que civilización es la que tendríamos que presentar - Emily empezó a ver que todos estaban dirigiéndose a las ventanas.

- ¿Qué pasa? - Preguntaba Emily algo extrañada al ver el comportamiento de sus compañeros por lo que está decidió hacer lo mismo. (Qué será tan interesante como para que la mitad del salón fuese a ver.) Emily al acercarse no vio más que un montón de jóvenes de edades más avanzadas que la de sus compañeros o suya.

- ¿Será verdad lo que nos dijo? - Decía Julieta mientras que todos buscaban algo con la mirada. -Emilia... Qué se supone que estamos viendo - Emily volteo a ver a su compañera mientras que está seguía viendo por la ventana.