Otra persona a la que le dí el don fue a una anciana que siempre cuidaba sus tierras que su padre le dejó a cargo cuando el falleció.
Su padre la visitó y le dijo
-Hija eh venido por mis tierras y por ti.
Es tiempo de que vengas conmigo y estemos juntos los dos. Al otro día fue anunciada la muerte de esta mujer.
Prácticamente todo el terreno se quedó sin dueño pero llegaron nuevas personas a vivir en ese lugar era el más ideal para construir una nueva vida.
Pero el señor difunto de vez en cuando se aparecia a los lejos de las tierras, la familia desconcertada se mudó y nunca regresaron. Así supieron que jamás, nadie, podia tomar las tierras de un viejo granjero.
Era como una maldición que el había dejado impregnado en el lugar.
Por lo regular yo le di el don a personas mayores para que vieran lo que estar en contacto con la muerte.
Una señora vió el espíritu de la llorona. Era admirada por todas las personas, ella cultivaba en zochinampa y pronto su humilde chinampa comenzó a dar frutos, ella de regreso a su casa cruzaba un puente que pasa por un río, a lo lejos se escuchaban los gritos estremecedores de la mujer, llenos de dolor. Cuando iba en el puente la llorona se le interpuso y la señora cubierta del espanto, no podía hablar solo cerro los ojos y comenzó a rezar solo asi la llorona se fue y la señora pudo seguir su camino.
Este don no debe ser para todos porque se morirían del espanto y yo no quiero tantos muertos en mi mundo.
Son polvo y cenizas cuando me los llevó.
Derrepente escuche que un niño me grito :
-Porque te la haz llevado?...
Entendía su sufrimiento pero no sabía a que persona me la habia llevado, yo no había trabajado por semanas.
Pero subí y ahí estaba el ataúd de su tía, en medio de su casa del niño, se llamaba Alan, platiqué con el sobre la muerte de su tía pero le dije que yo no había sido.
El lleno de lágrimas me imploró que le diera la vida otra vez, pero no podía hacerlo solamente la haría sufrir.
Hasta a mi me dolía verla en su ataúd en la Sala de aquel niño, era algo indescriptible, hasta yo sentía su dolor e incluso llore con el.
-¡Tu, no sabes lo que es el dolor, no sabes que es el sufrimiento, tu jamás tuviste una familia por la cual darle tus lágrimas...!
Me duele verla así, para mi era una persona muy especial, ella me daba consejos era una Guía para mi, como puede ser que te lleves a personas tan valiosas para este mundo, es mi familiar. Esto jamás te lo voy a perdonar.
Yo no sabía que decirle, pero pensaba nadamas en llevarmelos a todos y que se reúnan en el infierno.
Pero solo pensaba en mi, decidí a la vez ignorarlo e irme del mundo.
Me detuve pensando en las palabras que me dijo, y tenian razón como es posible que yo me lleve personas a lo estúpido.
Quise devolverle la vida a esa señora pero no pude.
Yo a lo lejos nadamas veía el cuarto lleno de luz, de familiares,de tristeza,ver como el cuarto poco a poco se llena de lágrimas.(La muerte puede ser muy cruel)
En la poca memoria que tenia quise recordar si yo alguna vez tuve una familia, o alguien que me amara, o alguien por la cual sentir dolor y llorarle.
Solo recuerdo que me tomaron de la mano y me casaron de la tierra.
Cuando a aquella señora la llevaron al cementerio, pude visitarla e ir a su nueva casa.
Hasta yo pude llorarle e implorarle, que me perdone por no haberle dado otra oportunidad.
Solo escuchaba un pequeño grito de dolor, de lamento.
Me volvía loco escuchar tantos llantos de diferentes familias.
Le dije al diablo:
-porque me condenaste a estar así!
Yo no pedí nacer así. Quiero ser como una persona normal, sentir lo que es el dolor, sufrir, yo ya eh hecho bastante.
El diablo solo me miró a los ojos y me dijo
-Cierra los ojos
Lo obedecí y de donde había nacido hay estaba yo, tirado podía caminar, sonreír, sentir, sufrir, llorar, amar, olvidar, pensar, todo lo que un humano puede hacer. Grite tan fuerte ¡Gracias!.
Era un niño de una familia muy humilde,decidi ser humano y afrontar la vida que tenía.