La tomó por un canuto entre sus manos. Entre sus labios la tuvo, disecándola hasta la última calada. Besos. Y la veía volátil, mutante cuando se escapaba como humo hacia otros aires. Ignorancia. Pero quién suspiraba si no él con sus caricias... Karma. La nicotina era placer, pero también adicción. Amor. Por eso él llovía justo cuando ella olvidaba su paraguas. Egoísmo. Seguía circulando por la carretera de su cuerpo.No era difícil, como era de esperar. Suficiencia. Lástima que su mente, el peaje más caro, lo dejó sin dinero. Solo y al desnudo. Y el coche murió aparcado en el arcén. Sin gasolina. En los primeros kilómetros. Y la ropa de verano fue como el sol en invierno. Inútil. Sí, ella lo arropó. Pero él seguía teniendo frío...
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delicate.
PoetrySomos la delicadeza de lo bello. Somos bellos. Y esquilamos lo delicado para llegar a la fuerza cuando es la sensibilidad la que nos hace humanos. ¿No lo somos acaso?