⭐ Joestars in da house ⭐ (Joestars x Lectora)

Capítulo 4: Oh Dios no...

Ok... Esto es más que incómodo y extraño.

Resulta que luego del ataque en el parque, los chicos decidieron que tres de ellos me acompañarían a la escuela.
¿Lo malo? Vienen Jotaro, Josuke y Giorno. Digamos que Giorno era el único "normal", si no contamos su ropa. Pero Jotaro y Josuke no son la definición de normal.
Básicamente porque uno de ellos usa peinado de los 80's y el otro parece un Yakuza de dos metros. ¿Entienden a que me refiero? En pocas palabras, caminaba con dos chicos de dos metros y otro que parecía mi hermano.

Y mis sospechas se hicieron verdad, los alumnos de mi instituto me veían de forma desconfiada. Yo también lo haría si una chica de mí misma escuela va en la mañana con un par de guardaespaldas o algo así.

—Chicos, pueden volver a casa, no es necesario que me acompañen a la escuela.–Dije con cierta incomodidad en mi tono de voz.

—No podemos dejar que pase lo mismo que la otra vez. Eres la única que sabe de nosotros y que nos da hogar.–Habla Giorno, mirando con cierta preocupación.

“Así que solo les importa eso, porqué no lo imaginé antes.” Pensé un tanto enfadada ante eso.

—Y porque nos caes bien, nos sentiríamos muy culpables si algo te llega a pasar.–Habla ahora Josuke, añadiendo a Giorno. Ahora me siento menos molesta, pero no por eso debo estar feliz. Aunque el que alguien, además de tus padres, se preocupen por ti se siente bien.

—Pueden irse ahora, cualquier cosa yo los llamaré, ¿entendido?.–Los tres asintieron y empezaron a alejarse, despidiéndose con la mano. Menos Jotaro, es un edgy.

Me dirigí hacia la entrada lo primero con lo que me encontré fue con una maestra e inspectora de pasillos, de unos 40 años si no me equivoco. Tenía una expresión seria pero llegaba a dar un poco de miedo.

—Señorita Takanashi, necesito hablar con usted un momento. Preséntese en mi oficina después de las primeras horas.

Estoy jodida. Eso fue lo que pensé. Pero ahora que recordaba, no había hecho nada malo. Así que no habían razones malas para ser llamada a su oficina. Cuando dejó mi campo de vista, di un profundo suspiro y me dirigí a mi salón, esperando que ninguno de sus compañeros hubieran visto con mis "invitados". Y si, técnicamente son invitados ya que yo les ofrecí alojo mientras encontraban la forma de volver a su mundo y correspondientes épocas. Me senté en mi lugar y había llegado el profesor, pero había una cara nueva. Era un chica de baja estatura, con lentes grandes y su cabello estaba peinado en una coleta a un lado, cayendo por su hombro. Se veía bastante nerviosa y tímida.

El profesor le hizo pasar adelante para que se presentara con nosotros. Y así lo hizo, pero ha paso algo torpe.

—Ho-hola, mi nombre es Hagakure Sakura. Espero llevarme bien con ustedes.

La mayoría, si no es que todos, veían a la chica con un leve rubor en sus mejillas. Admito que se ve adorable así, pero no creo que sea para tanto. Siendo sincera, parece un conejo asustado.

—Bien. Puede sentarse junto a la señorita Takanashi.–Alzé la mano para que pudiera ubicarme, así que fue enseguida conmigo.

La clase empezó y todos nos concentramos en lo que el profesor decía, hasta que recibí un papel en mi escritorio. Volteo a mi lado y me encuentro con la nueva dándome una leve sonrisa.
Abrí el papel y lo leí.

"Hola, soy Sakura, ¿y tú?"

Tomé un lápiz y le escribí mi nombre, para luego entregárselo. Pero antes de que pudiera devolverme el papel, el profesor aclaró su garganta para llamar la atención de nosotros.