CONTINUACIÓN.
Todo paso tan rápido, no sé en qué momento estaba gritando mientras me quitaba a la persona que tenía encima y corría hacía donde mi madre donde hacia ya tirada en el suelo, voltie a mirar a mi padre y estaba pálido, estaba en shook.
Yo no podía hacer más que gritarles a esos tipos, hasta que escuche un fuerte golpe y del susto voltie a mirar y mi papá tenía un arma en la mano y el tipo que lo tenía agarrado estaba en el piso tirado.
-¡¡SAMMER LLAMA A UNA AMBULANCIA, YA!! -me grito desesperado, mientras corría donde yo me encontraba.
Los demás tipos salieron de la casa, malditos bastardos.
-NO CREAN QUE ESTO SE QUEDARÁ ASÍ, ME VOY A VENGAR! -gritó mi padre.
Me fui para la cocina corriendo y tomé el teléfono y procedí a llamar la ambulancia desesperada con lágrimas en los ojos, sabía muy bien que mi madre estaba perdiendo mucha sangre y tenía miedo de lo que pudiera llegar a pasar.
Después de 10 minutos llego la ambulancia y se llevaron a mi madre al hospital más cercano, atrás íbamos mi padre y yo, mi padre estaba muy asustado se le notaba a larga vista.
-Papi tranquilo, se que mamá estará bien -le dije tratando de calmarlo.
-Es culpa mía hija, todo esto es culpa mía Sammer -dijo mientras le bajaban las lágrimas, me dolía verlo así de mal.
-No papá, no es así -le dije.
Llegamos al hospital y nos bajamos rápidamente, mi papá fue a preguntarle a la recepcionista si sabía algo de mi madre. Los minutos pasaban tan lentos, mi padre estaba desesperado y yo lo único que podía hacer era caminar de un lado para otro. Tenía mucho miedo de que a mi madre le pasará algo, no quería ni pensarlo, sentía una presión muy fea en mi pecho, realmente estaba angustiada.
Después de 15 minutos, que fueron eternos, apareció el doctor y mi papá rápidamente se levantó a preguntarle sobre mi madre.
-Cómo está ella doctor? -dijo mi padre.
-El estado de su esposa es crítico, perdió mucha sangre Señor Lawrence, estamos haciendo lo imposible... -dijo el doctor
Yo sentí un vacío en mi estómago, necesitaba aire, así que le dije a mi padre que saldría a tomar aire. Cuando ya estaba afuera, accedí a llamar a mi mejor amiga, ya era un poco tarde pero enserio necesitaba de ella.
-Hola? -respondió Sabri
-Te desperté? -dije algo apenada.
-Si, pero no importa, qué pasa? Por qué te escucho así? -dijo extrañada.
- Le dispararon a mi mamá. -le dije, mientras aguantaba mis ganas de soltarme a llorar.
-Dónde estás? -dijo
-Estoy en el hospital, te paso la dirección por mensaje, por favor ven, te necesito. -dije
Le pase la dirección por mensaje a Sabrina, decidí ir por dos café y entre a entregarle uno a mi padre. Realmente él estaba mal, le entregue el café y me senté al lado de él, nadie dijo nada y así pasaron unos 20 minutos.
Me estaba quedando dormida cuando llegó Sabrina y me abrazo.
-Tranquila, ya estoy acá, todo va a estar bien querida. -dijo mientras me abrazaba y yo como buena llorona que soy, no aguante y me puse a llorar.
Después de eso, fue a saludar a mi padre, les dije que iría al baño y así fue. Aún seguía con la presión en mi pecho, al momento de salir del baño vi que el doctor estaba hablando con mi padre.
-Hija, iré a ver a tu madre primero yo, luego entras tú. -dijo y yo asentí.
Empecé a contarle lo sucedido a Sabrina y ella estaba sorprendida.
-Entonces, tú si crees que tu padre este lavando dinero en la empresa? -dijo dudosa
-No lo sé, escuche a mi madre discutir eso con él, aparte el me confirmó una parte. -dije
