Casados por conveniencia -MaelxMeliodas -

Cap4: Quejas y más quejas

Los pequeños rayos de sol que entraron por la ventana habian sido suficientes para que el placido sueño del arcangel se viera interrumpido.

Abrio sus ojos con pereza, miro a su alrededor, las velas aromaticas ya  estaban apagadas, pero su aroma aun era palpable en el aire.

Fue cuando sintio un peso en el pecho que bajo la mirada, enterneciendose un poco.

El demonio, que ahora era su pareja, se encontraba dormido sobre el, recostando su cabeza en el pecho del arcangel, parecia un niño pequeño que se habia quedado dormido, y su apariencia infantil no ayudaba para nada en quitar esa imagen.

Aunque no le molestaba que el rubio durmiera tan placidamente encima suyo, todo lo contrario ya que le causaba ternura, se vio obligado a despertarlo, debido a que sentia la necesidad de bañarse.

Acaricio suavemente los rubios cabellos del más bajo, mientras susurraba " ey,...meliodas", con la intencion de levantar a su esposo. Estrategia que al cabo de unos segundos le funciono, pues el demonio empezaba a abrir los ojos con lentitud.

- um?

Meliodas parpadeo un poco, intentando alejar el sueño que aun lo tenia dominado, ahi fue cuando noto que se encontraba encima del arcangel, y con algo de verguenza se aparto de el.

- lo siento...

- no te preocupes, ire a ducharme.

Tras decir aquello, el arcangel se levanto de la cama, quitandose la manta que lo cubria, dejando ver su cuerpo desnudo mientras buscaba ropa para bañarse.

La atencion de meliodas fue directo al "pequeño amiguito" de Mael, quedandose petrificado por unos segundos.

¿Eso entro entero en el?

Con razon su cadera lo estaba matando.

El ya mencionado arcangel se dirigio al baño conjunto a la habitacion para darse una ducha, y el rubio se quedo mirando al techo un rato, pensando en si deberia buscar algo de comer, bañarse, vestirse o seguir durmiendo.

Mientras tanto, en el reino demoniaco, la ausencia del mayor dd los hijos del rey demonio ya empezaba a notarse.

Nadie podia quejarse, el no tener que pensar en luchar con las diosas era gratificante, pero sus hermanos pequeños, sus compañeros y su padre ya extrañaban a la rubia cabellera paseandose por los pasillos, regañando a galand y melascula, conversando con gowther, cocinando comida salida del mismo aberno y demas actividades tipicas del joven principe.

Chandler tambien sentia la auscencia de su alumno, aunque cusack lo intentara convencer de que meliodas estaba bien.

- es raro, usualmente a esta hora el ya estaba regañando a melascula por sus estupideces.

- tienes razón estarossa, se siente un poco raro no tenerlo cerca...

Era la conversacion de zeldris y estarossa sobre su hermano mayor.

Gowther solo miraba como todos hablaban sobre la guerra terminada, de la auscencia de Meliodas, de las quejas de derieri por la alianza con el clan divino y demás

- Me pregunto.. que pasaria sí yo...

Por otra parte, en el clan de las diosas,  las quejas de cierto arcangel por la desicion de la deidad suprema sobre dejar a meliodas vivir en los territorios del clan no se hicieron esperar

- pero.. ¿porque ese demonio debe vivir aqui?

Repetia ludociel, claramente estresado, a la pobre nerobasta, quien estaba escuchando sus quejas desde hace rato...

- ni idea...

- Osea, porfin la deidad suprema se digna en hacer algo para parar la guerra, pero resulta ser una decision tan... tan.... ¡estupida!

La diosa de pechos desproporcionales fruncio el seño por aquello, dispuesta a quejarse

- lord ludociel, entiendo que le molesta que tu hermano menor se haya casado con un demonio para detener la guerra, tambien entiendo su rechazo hacia Meliodas despues de tantos años de batalla, pero esta decision detuvo la guerra sin derramar más sangre, y dudo que el principe de los demonios vaya a hacer algo malo estando en nuestro territorio, asi que calmese porfavor.

El lider de los cuatro arcangeles parecio irritarse por aquellas palabras de la diosa de cabellos rosados, no porque fueran una vil mentira, si no porque eran una verdad que molestaba al arcangel de cabellos negros.

El iba a refutar, cuando vio a Elizabeth pasando frente a su puerta con varias cajas directo a la "habitacion" de Mael ( vamos, que las habitaciones esas eran una pta casa por dentro).

- ¿que es eso lady elizabeth?

- son las cosas personales que Meliodas no se llevo a la luna de miel, las voy a acomodar en la habitacion de Mael.

Un suspiro salio de la boca del arcangel cuando escucho aquello, por las buenas o las malas tendria que aceptar que su querido hermano viviria con ese "sucio demonio" por el resto de su vida.