Esa Estraña Sensación

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Camino a casa, Jace intenta interrogarme sobre esa chica misteriosa que me ha hecho enrrojecer tanto, de esa chica para nada dulce y angelical.

-¿te parece guapa? - me pregunta intentando sacar algún tipo de información.

ya esta especulando con que me gustan las chicas,¿por qué? Porque jamás me ha visto asi ante un chico o ante nadie se podria decir.

-Jace-le digo en un tono de enfado para que se de cuenta de que no quiero hablar de ella.

-Lil, venga eres como mi hermana,cuentame-me dice.

-no lo se, si supongo, tiene unos ojos preciosos, no se solo puedo pensar en como me ha mirado al entrar-

Ante estos pensamientos me vuelvo a poner roja, su mirada me vuelve a dejar sin respiración.

Llegamos a casa en unos diez minutos, la mia esta junto a la suya, siempre hemos sido vecinos y como hermanos.

Me pongo a pensar seriamente en todo esto, si es una chica guapa. No se, tiene el pelo corto y oscuro, sus ojos son grises y sus labios carnosos, su color de piel es palido, y su cuerpo delgado,no se no hay nada en eela que pueda indicar que es femenina, tiene cuerpo de chico y una cara preciosa.

-para ya de pensar esas cosas-me digo a mi misma, - no puedo-solo puedo pensar en ella.

Mañana pretendo hablarle, intentar conocerla y solo asegurarme de que quiero ser como ella no de que me gusta. Pero tampoco quiero ser como ella, me gustan los vestidos.

A la mañana siguiente me pongo mi mejor vestido, negro por supuesto, mi chaqueta de cuero, mis medias oscuras y me pinto los labios de rojo, no se por que hago todo esto, quizas la quiero como amiga y tengo que dar buena impresión.

Entro en clase y está ahi, sentada, con una sudadera y unos vaqueros negros, con el pelo alvorotado y con la cara sin ni una pisca de maquillaje.

-Hola-le digo en un tono bajo y le sonrio, acto seguido me muerdo el labio. Acto reflejo supongo.

Ella me mira primero a los ojos y después al labio.

Me levanto muy rápido de la silla y corro al baño, no se que hacer, no se que sentir, no se nada.

Respiro lentamente, lo intento al menos, me tranquilizo un poco cuando suena la puerta.

-¿puedo entrar? - se escucha al otro lado.

No contesto simplemente abro la puerta.
No dice nada, solo entra y cierra la puerta, se agacha para mirarme de cerca.

Solo puedo pensar en besarla, en acariciarle,en tocarle el pelo. En saber que es lo que se siente en la piel bajo sus manos.

Estiro la mano para colocar uno de sus mechones de pelo, ella estira su mano para tocarme el labio y hacer una que deje de morderlo.

Me acerco a besarla, y ella se acerca tanto a mi que cuado me quiero dar cuenta me ha levantado, se ha sentado y me ha hecho sentarme encima, y ahora estoy por primera vez encima de alguien, me estan besando.
No puedo parar de besarla, de agarrar su pelo, de agarrarme a su cuello y ella me empieza acariciando la cara, y va bajando poco a poco su mano, hasta llegar a donde termina mi vestido, me lo levanta, y empieza a acariciar mi culo.

Se me escapa un pequeño jadeo, esto no esta bien, no puedo hacerlo.

-para, por favor, esto no esta bien, Dallas-le digo intentando aguantar un par de jadeos más, me besa y muerde el cuello, no lo puedo aguantar más.

Para de golpe, me mira a los ojos y puedo ver en su expresion algo que no habia visto nunca.

-yo, nunca-me interrumpe la frase
-¿has estado con una chica verdad? - me pregunta con miedo
-nunca he estado con nadie-aparto la mirada de la suya.

Me acerca la mano a la cara, empieza a acariciarme con mucho cuidado y con cariño, me besa en la nariz, y se levanta levantandonos a las dos.

-vamonos de aqui, podemos ir a cualquier sitio-me dice casi en susurros.
-¿a tu casa?-le pregunto con mucha verguenza.

Salimos del baño sin que nadie nos vea, me lleva fuera agarrada de la mano y se acerca a una moto negra que espera en la puerta del instituto.
Me da un casco y me monto sin decir ni una palabra, ella tampoco dice nada.

Llegamos a una casa increible y me ayuda a bajar de la moto, en todo el camino no hemos dicho ni una palabra, ahora mismo es una situación demasiado extraña para decir nada.
Me vuelve a tender la mano y yo la sujeto con fuerza, esta lloviendo y nos mojamos antes de entrar a la casa.

Entro tiritando, tengo la ropa y el pelo mojados, espero entrar en calor aqui dentro.
-¿estás bien? - me pregunta mirandome con cariño.
-estoy congelada-apenas puedo hablar.
Me lleva arriba a su habitación, es enorme, con una cama gigante, es bastante poco femenina, pero creo que si hay algo que me encanta de ella es que no lo sea, es ese toque masculino que le hace parecer tan sexy.

-toma, pontelo- me da una camiseta y unos boxers.

Pretende que me cambie delante suya o que salga asi mientras estoy con ella. Supongo que si.
Me quito el vestido delante suya, apenas puedo mirarla, me pongo la camiseta negra bastante grande que me ha dado, ahora me quito los zapatos y las medias y me pongo los boxers de pantalón.

Veo como se gira a su armario, se quita la sudadera y se queda desnuda de parte de arriba dandome la espalda, se quita los pantalones y deja a la vista unos boxers negros y una espalda increible. Su andar, su forma de vestir, su forma de ser, parece un chico, y eso me hace sentirme muy atraida hacia ella. Esto me desconcierta, para nada me asusta pero si me desconcierta. Se pone una camiseta y vuelve a darse la vuelta.

-estas muy sexy con mi ropa-me dice.

Se acerca a mi y me sujeta el culo, se sienta en la cama y me sienta encima, solo entra un poco de luz por la ventana, esto me da miedo, no se que hacer en cada momento, puedo hacer esto fatal.

Noto como me acerca mucho mas a ella, y empiezo a notar un cierto ardor que me bajo por la barriga hasta llegar mucho mas abajo, jamas habia sentido algo asi, unas ganas tan grandes de desnudarla y de tener sexo con ella.

Le quito la camiseta, le agarro la espalda, y se la acaricio, ella me la quita a mi y me tumba sobre la cama, se coloca encima mia a besarme, me acaricia desde el cuello, pasando por el pecho y mete la mano por dentro de los boxers, empieza a acariciame, y yo empiezo a jadear, mientras me besa el cuello, sin darme cuenta me los quita y me deja mis bragas.

-¿no te asustes vale?-me dice al oido.

Baja un poco sus boxers y lleva una especie de arnes con un pene morado.

Ya lo entiendo todo, se siente mas chico que chica en algunos aspectos pero no lo suficiente como para serlo todo el tiempo.

-shh, tranquila-le digo acariciandole la cara.

Se abalanza sobre mi y mientras me besa empieza a moverse, es tan placentero que se vuelve insoportable.

Mi telefono suena de repente y corta toda la situación.
Me levanto de la cama y lo miro es Jace.

-¿Lil donde estás, te estoy esperando en la puerta? - me dice preocupado.

Hoy habiamos quedado para tomar un cafe y hablar de nuestras cosas.

-una larga historia, quedamos en el cafe en media hora- le digo y sin esperar a que me conteste le cuelgo.

- Tengo que irme Dallas.

Se levanta de la cama, se acerca a mi, me baja las bragas y me sienta en su escritorio, se pone de rodillas, no tengo ni idea de que tiene pensado hacer, pero en dos segundos me doy cuenta.
Saca su lengua y empieza a jugar conmigo, a morderme y juguetear con sus dedos en mi, empiezo a jadear, cada vez más y más fuerte, le agarro del pelo y me dejo llevar hasta que estoy envuelta en el unico orgasmo que he tenido en toda mi, vida.




No soy el demonioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora