"-Ven conmigo ... Meet me in the Woods tonight."
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- ¿por qué yo no?
- debes entender que lo escojo a él.
- lo entiendo muy bien ... lo que no comprendo es ¿por qué? ...
- ¿por qué, qué?
- ¿por qué te sigo amando aún s...
Jeff: por favor, Ben ... ayudame, ya no sé que hacer para no aburrirme —se tiró al suelo de forma dramática sin soltar el brazo de Ben— ¡estoy desesperado!
Ben: ya que insistes, Mapache, pero será a mi modo —sonrió nuevamente—, con mis reglas.
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Jeff: —se levantó rápidamente del suelo cayendo en cuenta de la posición tan humillante en la que se encontraba en ese momento, no pensaba perder la poca dignidad que le quedaba como si nada— gracias, enano —miró a Ben volviendo a su expresión fresca de siempre— y ... ¿a qué tipo de reglas te refieres? —preguntó sabiendo en su interior que no recibiría respuesta alguna, pero realmente no le interesaba en lo más mínimo la respuesta, después de todo, ya no tendría que preocuparse por buscar algo con que distraerse—.
Ben: dejame pensarlo ... —miró hacía la segunda planta, justo donde terminaban las escaleras, por la cual pasaba una pequeña Sally dando saltos y tarareando una canción infantil con dirección a su habitación, no pudo evitar levantar levemente la comisura de sus labios formando una pequeña sonrisa—.
—En realidad, Ben no tenía nada planeado, había sido algo completamente de imprevisto, pero no quería desaprovechar la oportunidad de jugar un poco con su compañero, era algo que no sucedía todos los días ... y Ben lo sabía perfectamente, algo debía pensar, y rápido. Para su suerte, su mirada se topó justamente con la infante, y recordó que horas atrás la pequeña le había pedido jugar con ella, cosa que tuvó que rechazar pues se encontraba ocupado terminando por 624 vez su tan preciado Majora's Mask—.
Jeff: ¿qué miras, enano? —giró su cabeza levemente hacía la misma dirección en la que miraba Ben sin encontrarse con nada en particular, pero antes de poder decir algo más, fué interrumpido por Ben, quién seguía con esa pequeña pero notoria sonrisa dibujada en sus labios mientras continuaba mirando en aquella dirección—.
Ben: nada en especial —soltó luego de unos segundos. Su sonrisa se amplió más, dejando ver sus blanquecinos dientes; ante Jeff, esa sonrisa le causaba cierto pavor, era algo perturbadora -común en cualquier creepypasta- y le incomodaba de cierta manera— ven, acompañame —se giró para ver a Jeff a la cara—.
Jeff: ¿qué, qué?, ¿a dónde? —no pensaba acompañarlo sin tener idea de a donde se dirigían, no confiaba en la expresión de Ben; él podría tener la apariencia de un niño friki ordinario, adicto a sus consolas y con una personalidad poco sociable, incluso se podría referir a él por el término de “geek”, como era llamado en ciertas ocasiones por sus demás compañeros; pero vamos, que todos saben que él no es un niño normal, y cuando realmente se lo proponía, sin mucho esfuerzo, podía planear cosas realmente macabras, sacando a la luz su lado creepypasta; y esa sonrisa, justo esa misma ... era la que lo anunciaba—.
Ben: ¿quieres distraerte un rato o no? —enarcó una ceja y se dispuso a ir a la habitación de la infante, pero se detuvo tras llegar al tercer escalón, regresando su vista nuevamente al mayor— sabes perfectamente que no tengo interés por ayudarte, como también sabes de sobra que sí no aceptas correrás bajo tu propia cuenta —lanzó una fugaz mirada a la habitación de Sally, la cuál quedaba frente a las escaleras, asegurándose de que no hubiese movimiento alguno, y que Sally siguiese en este— sin mencionar que tengo mas cosas pendientes por hacer.
