No se si alguna vez os habéis planteado en iros a un lugar diferente donde no os conozca nadie más que vosotros mismos. Cuando estoy agobiada me imagino que todo cambia y que me marcho a otro sitio. No puedo decir que esa sea una solución, el escapar jamás será una solución, pero lo que sí puedo decir es que no escaparía simplemente me tomaría un respiro, o eso es lo que creo. Lo comparo a cuando te dan las vacaciones de verano y te vas al pueblo en el que veraneas todos los años siempre parece diferente, sin embargo es el mismo pueblo de siempre. La sensación que te nace cuando vuelves a ese lugar es totalmente diferente cada año por la simple razón de que no pasas todos tus días allí. No me planteo irme a un lugar diferente por querer escaparme sino que por el aburrimiento de ver lo mismo todos los días.
A veces la gente simplemente necesita mirar la puesta de sol desde la ventana de otra habitación o escuchar otro sonido de cualquier ciudad diferente de la que vive. De esa manera jamás se cansará de su lugar por que cuando vuelva de su escapada puntual sentirá que hace años que no está en su hogar. Por eso cuando alguien me pregunta si quiero vivir para siempre en mi ciudad les contesto que no por que solo entiendo que de esa manera podré seguir adorando por siempre la ciudad donde nací.
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Pensamientos de una adolescente
SpiritualHay sentimientos que no se pueden explicar, ni describir... para saber que sucede es necesario adentrarse en ellos. En algún momento todos nos hemos preguntado ciertas cosas, pero no todos le buscamos un sentido a eso. En esta obra yo os muestro el...
