Un día Issei regresaba de la academia Kuoh, al llegar a su casa se sorprende al ver a una chica de pelo negro y hermoso cuerpo en la sala de su casa, al darse cuenta de que era su querida prima Kuroka que vivirá junto a el.
Que los que le deparará a...
El profesor estaba dando su clase normalmente, algunos alumnos ponían atención y otros no, lo típico.
Derrepente alguien empieza a tocar la puerta del salón, el profesor fue a ver quien tocaba la puerta.
-Joven Hyoudou lo necesitan en su club- el profesor le avisó a Issei, este último sólo asintió. Guardó sus cosas para dirigirse hacia el club pero antes de irse alguien le agarro la muñeca muy fuerte.
-Será mejor que no hagas nada raro con esa pelirroja- Kuroka lo miraba de forma sería mientras apretaba su muñeca y un aura negra se formaba alrededor.
-Si es...ta bi...en- dijo el castaño con miedo y dolor por su muñeca. Kuroka lo soltó para que se pueda ir.
El castaño al estar enfrente de la salida vio a Asia parada aparentemente esperándolo.
Issei salió mientras se tocaba la muñeca por culpa del dolor -Hola Asia- saludó Issei a su amiga. Los dos jóvenes empezaron a caminar.
-Hola- devolvió el saludo Asia, ella vio como Issei se tocaba su muñeca, así que decidió burlarse un poco -Ya ves te dije que la paja era mala- ella puso una sonrisa burlona.
-Que te pasa, ya no le hago a eso- dijo el con una sonrisa de orgullo.
-Será que ya no lo haces tu porqué ahora te ayuda tu querida prima- ella puso una mirada pícara.
Esta vez Issei si se sonrojo un poco -Claro que no, aparte, ¿Que diablos te hace pensar eso?- el castaño preguntó.
-Pues déjame pensar.....- ella mientras caminaba puso un dedo en su barbilla de forma pensativa. -Ustedes viven juntos y aparte con lo atrevida que puede ser Kuroka no me sorprendería que ya hallan echo "eso"- ella hizo que el castaño se sonroje demasiado.
-Claro que no- el le grito sonrojado.
-Clubde Investigación de lo Oculto-
Rias, Akeno y Yuuto se encontraban esperando a sus dos compañeros, Issei y Asia. Una vez que ellos dos llegaron dieron por inicio está reunión. Ya al finalizar la reunión Yuuto y Asia se retiraron del edificio, y solo quedaron Issei, Akeno y Rias para hablar algunos asuntos.
-Rias te puedo preguntar algo- el castaño caminó y se sentó en el sofá.
-Si, dime- ella igualmente se sentó en el sofá que se encuentra enfrente del castaño. Ella se le quedó viendo esperando la pregunta.
-Bueno....¿Porqué te enojaste cuando Hikari estaba conmigo?, en el poco tiempo que estuve con ella no me pareció mala persona al contrario- habló el castaño mientras miraba a su presidenta.
Akeno se sorprendió de esto ya que ella no estaba enterada -¡Que!, esa maldita estaba contigo- dijo ella mientras su cara sonriente cambiaba a una de enojó.
-Eh?... tu también Akeno, no entiendo porqué les enoja, acaso a echó algo malo- Issei estaba cada vez más confundido.
-(suspiró)... escucha Issei te lo voy a resumir, esa chica le gusta jugar con los sentimientos de los demás, en especial el de los hombres- hablo Akeno con una cara sería.
-tambien Hikari por alguna razón a echó que parejas se separen, a echó que amigos cercanos se peleen, y a provocado peleas solo por diversión- Rias tenía una cara de enojó.
-Básicamente ella es la personificación de una demonio- esta vez la que habló fue Akeno.
-¡Que!, pero ella parecía buena persona- el castaño estaba muy sorprendido.
-Así que Issei te pediría que no le vuelvas hablar no quiero te haga daño- Akeno puso una mirada preocupada hacía Issei.
En la ventana cerca donde están los tres jóvenes hablando, se puede ver a una pelinegra de ojos color avellana escuchando la conversación que están teniendo. -(Así que esa puta pelinegra le quiere hacer daño a mi Issei, no lo permitiré, primero tendrá que asesinarme antes de tocar a mi castaño)- ella pensó mientras se le formaba una sonrisa siniestra y se imaginaba las diferentes formas de asesinarla.
De vuelta con los tres jóvenes. A Issei se le formo una duda y esa era porqué ella se quiere acercar a el. Pero decidió buscar después la respuesta. Los tres chicos decidieron hablar de otras cosas por un rato más hasta que sonará la alarma.
-Bueno chicas, me retiro, ya que está apunto de sonar la alarma para salir- el castaño se levantó del sofá. -(Aparte no quiero que Kuroka se enoje por llegar tardé)- esto último lo pensó con miedo.
-mmm... yo quería que te quedarás más tiempo- Akeno hizo un puchero de molestia.
Al castaño se le hizo linda la reacción de la pelinegra -Jejeje... lo siento chicas mañana seguimos platicado si quieren- el castaño empezó a caminar hacia la salida del club.
El castaño abrió la puerta y volteó hacia ellas -Nos vemos mañana, cuidense chicas- el castaño se despidió con una enorme sonrisa. Esta acción hizo que las dos chicas se sonrojaran y se le quedarán viendo con una cara boba.
Rias después de regresar en si, soltó un suspiró de tristeza y miró el sofá dónde estaba el castaño, ya que ella recordó a Issei siendo abrazado por Kuroka. Está acción se le hizo rara a la pelinegra.
-¿Qué sucede Rias?- preguntó Akeno preocupada por su amiga.
-Eh? no nada, - ella habló tratando de disimular su tristeza
-Vamos Rias cuéntame que sucede- Akeno se sentó a lado de la pelinegra.
-No tranquila no pasa nada- ella habló mientras le daba una sonrisa a la pelinegra. Akeno noto que la sonrisa de la pelinegra era de tristeza.
-Rias te conozco muy bien y se que me estás mintiendo- Akeno tenía una mirada preocupada, Rias volteó hacía el otro lado para que no le vieran la cara. Akeno le agarro la cara para que la viera pero se llevo una sorpresa.
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Rias estaba llorando, Akeno estaba sorprendida así que la abrazo para que se calmará.
-Issei ~snif~ el ya ~snif~ ya tiene ~snif~ pareja ~snif~- ella hablaba como podía. Esto sorprendió mucho a la pelinegra.
-Yo ~snif~ lo amo ~snif~ demasiado ~snif~ pero me duele ~snif~ pensar que el ya ~snif~ tiene a otra ~snif~- ella abrazo más fuerte a la pelinegra. Akeno aunque seguía sorprendida, le acariciaba el cabello para que se calmará, pero ella sólo lloraba más fuerte. - - - Issei caminaba hacia la salida, aunque se sentía algo intranquilo, sentía un pequeño dolor en su pecho, derrepente le llegó la imagen de Rias pero no sabe porqué. El dejó de pensar en ello cuando vio a Kuroka esperándolo en la salida.
-Perdóname Kuroka por llegar tarde- el castaño hablo mientras llegaban junto a ella.
-No te preocupes, mejor vámonos para la casa- ella se aferró al brazo izquierdo del castaño para después irse caminando hacia su casa.
----------------------------------------------------------- Fin del capitulo.
I'm sorry por la tardanza :'v Pero me no tenía tiempo de escribir y me había quedado sin ideas. Pero creó que esto no les importa, así que chao, nos vemos pronto.
