Narra Lauren
Desperté porque sentí los pies mojados y por un momento creí que me había hecho encima de lo borracha que estaba. Abrí los ojos y noté que la marea había subido. Me refregué los ojos y me di cuenta de que me dolía la cabeza de una manera increíble. Vi las dos botellas de whisky en el suelo, miré hacía mi lado y Camila estaba durmiendo. Noté que estaba despertando y que se tocó la cabeza. Nos miramos.
—Hola. –Le dije sonriendo.–
—Te ves horrible. –La miré y me reí.–
—Tú no lo haces nada mal. –Me paré y me estiré. Saqué mi celular. Tenía unas cuantas llamadas perdidas de Alexa y una foto, la abrí y era una imagen de Lucy con las 3 tipas que Alexa invitó a la fiesta.–
—¿Qué estás mirando? –Me preguntó Camila arreglándose el pelo. En ese momento me entró una llamada.–
—Contestaré. –Salvada por Alexa. –Hola.
—¿Dónde te metiste?
—Lo siento, estoy en la playa iré a la casa ahora.
—¿Está Camila contigo? –Me preguntó Alexa.–
—Sí. –Dije mirándola.–
—Ok. Eso tendrás que contármelo.
—Callate, imbécil. –Le colgué.–
—Alexa. –Afirmó, Camila. Estaba sonriendo.–
–Sí. –Tomé la manta y las botellas para tirarlas al basurero. –¿Quieres que te vaya a dejar?
—Te lo agradecería.Nos subimos al auto y no hablamos absolutamente nada en todo el trayecto. Era algo incómodo, pero quería creer que era porque las dos teníamos un dolor de cabeza que iba mas allá de lo que imaginábamos.
—Llegamos. –Le dije y ella me miró.–
—Gracias por todo lo que hiciste ayer, en serio.
—De nada. –Le tomé la mano y ella sonrió.– Qué te vaya excelente mañana en tu primer día de clases.
—Y a ti en tu primer día de profesora. –Me guiñó un ojo y se bajó del auto.Me quedé un rato hasta ver que entrara a su casa. Su casa era muy humilde, de hecho, el barrio es muy humilde, la casa de Camila era la única que tenía dos pisos en todo el lugar. Antes de entrar se dio vuelta para mirarme y le sonreí por última vez.
Me fui a mi departamento y me di cuenta de que eran las 12 del día y tengo que estar a la 1 en el centro comercial con Wess. Entré a la velocidad de la luz a mi departamento. Me duché, busqué algo normal para ponerme y me vestí. Cuando me miré al espejo, me di cuenta que tenía la nariz muy hinchada. –Perfecto, Lucy.– Dije con algo de rabia. Me desenredé el cabello y salí camino al centro comercial. Iba a llegar tarde, pero por como era Wess, sabía que me iba a esperar. Me estacioné y partí a juntarme con él.—Siento la demora, en serio. –Dije apenada.–
—A veces creo que todos ustedes llegan tarde porque saben que siempre espero hasta el final.
—En serio, fue sin querer. Vamos a comer y te explico todo.Él entrelazó sus dedos con los míos y entramos al centro comercial. Me gustaba tener un amigo gay, era muy chistoso ver como miraba a los hombres sin que ellos se dieran cuenta. Antes de ir a comer entramos a una tienda de ropa, él se fue a la sección de hombres y yo a la de mujer. Caminé un poco y aún sentía que me daba vueltas la cabeza después de lo de anoche. Caminé un poco más y me paré a ver unos lazos, habían de todos los tamaños y colores y fue inevitable no acordarme de Camila, casi de inmediato se dibujó una sonrisa en mi rostro.
—¿Desea algo? –Me dijo una vendedora. Quería decirle que sí y no me aguanté.– Sí, quiero ese lazo. –Era de color negro con pelotas blancas.–
—¿Lo envuelvo?
—Sí, gracias. –La chica lo envolvió y se lo pagué.–
—¿Qué compraste? –De la nada Wess apareció y me hizo saltar del susto.–
—¡Mierda! Casi me matas.
—Lo siento.
—Gracias. –Le dije a la vendedora y salimos de la tienda.–
—Dime qué es.
—No, no te diré.
—Oh, vamos... Soy tu mejor amigo ¿O no? –Paré y lo quedé mirando.– ¿Qué pasó anoche?– Colocó su cara de preocupación.–
—Vamos a comer, muero de hambre.
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MI MEJOR ERROR {CAMREN}
FanfictionEsta historia no es mía. No sé quién la habrá escrito, pero fue dada de baja y la busqué en internet hasta encontrarla. Solo quería re-subirla para quienes son fans de esta historia y tengan el agrado de leerla nuevamente.