Subieron al último piso, había una habitación gigantesca casi del tamaño de todo el piso, con un balcón, una enorme cama con cortinas y sobre esta un gran traga luz que permitía ver las estrellas.
Hicieron algunas fotos y hablaron un rato, para cuando se dieron cuenta ya era tarde y ninguno de los dos tenía ganas de conducir de regreso, así que decidieron pasar ahí la noche.
Estaba Portillo acostado en un sillón y Clavero en un diván, en el tercer piso, hablaban sobre sus proyectos de fotografía.
-Estaba pensando en una sesión de fotos presentando la belleza y perfección del cuerpo humano- dijo Portillo
-¿ Y que ideas tienes?-Pregunto Clavero
- Mostrar la piel, fotografiar lunares o pecas, pero no encuentro ninguna chica que esté dispuesta a modelar- dijo Portillo mirando la nada
-Umm lunares, yo tengo varios en la espalda, pero no creo que sea el tipo de modelo que estás buscando- río Clavero
-¿Tienes lunares?- dijo Portillo intrigado
-Sí, tengo algunos, el la parte de atrás del cuello y uno más grande en la espalda ¿Quieres verlos?-dijo Clavero levantándose un poco el cuello de la camisa
-Pues sí, no tengo nada que perder evaluando te de modelo- dijo levantando los hombros
Clavero se quitó la camisa y se sentó dando la espalda y mirando hacia un lado para que Portillo viera sus lunares
-Pues, hacen falta cambiar algunas ideas, el cambiar el modelo por un cuerpo masculino, supongo que será diferente- Dijo Portillo
-Ya hicimos fotos en las escaleras y en los marcos de las ventanas, se me ocurre que podemos hacer algunas sentado el el diván, acostado boca abajo en la cama, sacando un libro del las estanterías o mirando el bosque parado en el balcón- dijo Clavero
-Umm me gusta la idea de sentado dándole la espalda a la cámara, pero no en el diván, pienso que se vería mejor sentado al centro de la cama, con el traga luz y el color de las sábanas le daría un buen efecto-dijo Portillo mirando la cama, enmarcando la con sus dedos.
