Un Terrible Amor Prohibido

Pequeño juego

Galopando a toda velocidad, Denisse mira atrás y ve a unos humanos con una vestimenta "extraña" persiguiendolos con una motocicleta, uno de ellos tenía algo extraño en sus manos apuntando a ellos. Denisse no lo sabe pero aquél aparato era un detector de experimentos de la A. I. M. M. y justamente están persiguiendo a Iván.
- ¡Corre Iván, corre! - Iván voltea la cabeza viendo quienes los perseguía, él los recuerda, alcanza una velocidad de 150 k/m, estaríamos hablando de un caballo veloz, uno normal alcanza a los 48k/m; las motocicletas no tenían mucha capacidad quedando atrás. Iván para de golpe haciendo que las motocicletas pasen de largo y corre al lado contrario, pues tiene mas escapatoria y ellos perderían su rastro. Denisse luego de unos minutos ve un establo abandonado.
-¡Para allí! - De la desesperación Denisse era tanta que se bajó antes de que él parara.
- ¿Como puedes correr el triple que un caballo normal? ¿Acaso si quiera eres un caballo? - Iván no sabía como transmitir lo que realmente era, comenzó a dibujar en la tierra con su casco de pata derecha, parecía que hacía dibujos rupestres, Denisse estaba sorprendida y ansiosa. Luego de varios minutos allí estaba la explicación: era un experimento, lo abandonaron porque tenía retrasos los efectos genéticos que le han dado además de la bancarrota de aquella asociación, estaba apenado y no sabía que pensar; ella quedó petrificada, muchas cosas tenían sentido, aquella astusia, aquella capacidad de fuerza, resistencia y velocidad, Denisse lo abrazó, no sabía como reaccionar, no quiere entregar a Iván por nada del mundo, lo quería mucho, lo ama prácticamente, ella lo vio crecer, lo alimentó y educó sin necesidad de pegarle ni dominarlo como los humanos lo hacen. Tienen un lazo dorado de amor y cariño, eran como hermanos, madre e hijo, e incluso hasta se podría decir casi amantes. Iván la abrazó con una de sus patas delanteras y su cabeza, apegandola en tu pecho y cuello, Denisse besa su mejilla.
- Escuchame, vamos a camuflarnos... Podría pintarte "manchas"... Manchas oscuras... Quedate aquí. - Denisse se quita su sombrero, se despeina y se voltea la bandana dejando "las colas" hacia el pecho.
-Buscaré alguna tienda donde venda tinte para el cabello, te tiñeré las patas y yo el cabello, asi no nos reconocen. ¿Bien? Trataré de conseguir alguna mochila también, para ocultar los gorros y el tinte. Ocultate bien, por favor. - Iván asiente con la cabeza y Denisse se va inmediatamente, el potro se esconde acostándoce en la oscuridad y comienza a esperar. Pasaron tres largas horas y Denisse llega con unas bolsitas de tinte negro, unos guantes de látex y una cangurera, se agacha y le pide a Iván que se acerque mientras se pone los guantes y luego abrir un sobrecito; comienza a teñirle las patas delanteras con un degradé en las rodillas, para que se vea como realista. Al pasar a las piernas traseras nota algo en Iván, su imponepor miembro sobresaliendo de sus fundas, Denisse mira a Iván, da una pequeña sonrisa y comienza a teñirle una de sus patas mientras comienza a dar pequeñas lamidas tímidas en aquél sexo grande y ancho, Iván se estaba excitado más, Denisse comienza a teñirle la ultima pierna y al mismo tiempo comienza a chupar solo la cabeza del miembro, babeandolo por completo. Sintió un sabor dulce y sus fluidos pegajosos, Iván daba unas pataditas suaves al suelo por aquella dulce y pegajosa excitación que se convertiría en un dulce desastre en un momento. Expulsa fuerte y en gran cantidad su semen en la boca de Denisse sin poder aguantarse ni arrepentirse; a ella se le chorreó un poco de la boca, era mucho lo de aquel dulce.
- Jmjmjmn, "buen chico". - Dijo mientras se limpiaba lo que se derramó. Sale de debajo de las patas de Iván y comienza a teñirse el cabello, él como "venganza" lame su intimidad sobre el pantalón.