La despedida... 4...

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Cap 4...Los orígenes de la oscuridad

Esa noche me retire a mi habitación después de la conversación con la Condesa me encontraba intranquilo, mi corazón se entristeció jamás había sentido tal tristeza, ni en mis múltiples noches de soledad durante mi infancia cuando deseaba el cariño de mi padre y cuando extrañaba el calor de una madre,  siempre crecí sin demostraciones de afecto endureciendo mi corazón haciéndolo soberbio y ruin,  ni cuando mi hermana agonizaba por su vida sentí tanto temor, ¿qué me pasaba? me preguntaba constantemente, porque las palabras de la Condesa me atormentaban, era verdad acaso solo era una herramienta para su muerte, ese vacío que reflejaba su mirada impregnada de melancólicas lagrimas a punto de salir esos ojos se clavaron en mi corazón causando un gran dolor  me recosté en la cama y sin controlar mis emociones el llanto comenzó a aparecer, esa fue la primera vez en mi vida que me sentí así, tan frágil y vulnerable, el caótico pensamiento de imaginarme acabando con su vida me resulto cruel, yo no podía ser quien acabara con ella, me repetía constantemente había imaginado una eternidad en su compañía y que ella pensara en abandonar esta vida me llenaba de furia y dolor ese dolor que se incrementaba en mi ser al pasar las horas.

Pasaron unas noches y no hablamos de eso, tampoco le dije como me sentía al respecto su personalidad calculadora estaba presente en cada acción creí que tal vez era solo una lejana añoranza una debilidad que no se repetiría nuevamente, pero estaba equivocado.

Una noche cuando no podía dormir me dispuse a ver la hermosa luna que se filtraba por la ventana de mi habitación,  apagar mi soledad con sus brazos era lo que salía de mis pensamientos y fue entonces cuando me pareció haber oído su voz, me estaba volviendo loco sin duda entre más tiempo pasaba a su lado más quería estar cerca de ella, ya ni siquiera el torturar humanos me satisfacía, el buscar consuelo en las camas de las doncellas londinenses se estaba volviendo inútil, algo me estaba pasando y la Condesa era la causa, me enfurecía tanto no poder controlar mis fatídicas emociones esas que tanto estaban prohibidas para mí desde que tengo uso de razón,  por ser quien era un ser de destrucción, un gobernante un Dios, pero no era un sueño o una alucinación su voz se oía en la habitación continua..

Era ella estaba conversando con una chica pero ¿quién podría ser?, la Condesa la llamo Lady Marian y tenían una conversación un tanto privada, esa chica le hablaba de forma muy familiar incluso de hablo por su nombre de pila “Lilian” ese era el nombre de la condesa Heartles,  conversaban acerca de un ataque que se dio en los suburbios por los miembros del clan Caramilla, había oído hablar de ellos eran aristócratas que planeaban la destrucción de los clanes de sangre sucia, ellas conversaron por un tiempo al respecto algo en su conversación me intrigo, la condesa hablo de un niño de escasos 12 años de edad,  que a toda costa tenían que proteger  perteneciente a la familia de Lord Van Riverglow  el nieto de nuestro anfitrión, para ser exacto yo  no comprendía nada, ¿por qué proteger a un simple humano?   Eso era algo que en el futuro tendría que cuestionar pues ella dijo que era mi deber velar por su supervivencia en este mundo.

Cuando Lady Marian se marchó La condesa se quedó en su habitación mis ganas por verla me hicieron ir a buscarle, entendemos las cosas importantes, sé que era una locura era solo una necesidad el  verle así como poder  ver este cielo de estrellas que al mirarle conforta mi espíritu, así me sentía al estar a su lado, y ahí estaba nuevamente parado en frente de la hermosa mujer que hacía que mi corazón estallara en fragmentos, pero ella estaba llorando, eso me desconcertó tanto, que sin decir nada por un momento me acerque y le observe frente a frente, después cuando le pregunté el motivo de la caída se sus valiosas lágrimas ahí estaba ella sonriendo engañosamente, mientras me comenta  -Sé  lo que sientes por mi Kamui, no puedes ocultarlo te conozco bien, pero las circunstancias de todo lo que están  alrededor  me obligaban a pedirte que te desprendas  de tus sentimientos, tu eres un monstruo cruel,  esa es mi  razón por la cual te elegí, debes ser despiadado,  sin remordimientos sin amor, eso solo te causara problemas para lo que busco que realices, desprende de ti cada sentimiento y transfórmalo en odio incluso hacia mí, odia desde el fondo de tu ser .

Los orígenes de la oscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora