Capítulo 7

153 17 0
                                    

Narra Law.

Cada vez queda menos para que se acabe el mes y eso solo podía significar una cosa, luna llena. Si Perséfone-ya fuese consciente de ello, sabría que debe alejarse de mí pero como no lo sabe, no lo hará.

He decidido ir a la pequeña ciudad de Sabaody para comprar algo de comida y de paso, más ropa para Perséfone-ya. Ella no ha querido acompañarme, en parte me siento aliviado porque si no hubiera visto a muchos híbridos y hubiera empezado a sospechar.

Mi primera parada fue el supermercado, dejé aparcado mi coche y entré tranquilamente. No había mucha gente, seguramente porque se estaban preparando para mañana.

Se podría decir que siempre que hay luna llena, los híbridos se ponen a buscar una pareja para reproducirse. Por ejemplo si eres más dominante, buscarás a un gamma y si eres más sumiso, a un alpha. En cambio hay híbridos que no son ni una cosa ni la otra, estos son llamados betas.

¿?-¡Torao!

Yo que pensaba que iba a tener suerte hoy...

Law-Mugiwara-ya.

Mugiwara-¡Cuánto tiempo!

Definitivamente no ha cambiado nada.

Mugiwara-Mañana doy una fiesta en mi casa, deberías pasarte.

Law-Estoy bastante ocupado.

Mugiwara-¡Ven! Igual encuentras una pareja para la luna roja.

Si el supiera, no estaríamos manteniendo esta conversación.

Law-Me lo pensaré.

Mugiwara-¡Genial! ¡Tráete también a tus amigos!

Se despidió y se marchó rápidamente, había comprado un montón de comida. No sabía si era para él o para la fiesta.
Después de terminar mis compras, me pasé por las boutiques de la ciudad en busca de algo para Perséfone-ya.

Law-Me pregunto qué le gustará...

Narra Perséfone.

Me daba un poco de cosa estar en una casa tan grande yo sola, decidí quedarme en la biblioteca leyendo mientras Law volvía.
A decir verdad no sabía cuánto tiempo más faltaba para curarme, yo me sentía bastante bien pero por algún motivo no quería irme.

Oí el sonido de un coche por lo que salí de mi escondite en dirección a la puerta, la abrí lentamente. El pelinegro estaba sacando unas bolsas del maletero.

Law-¿Me ayudas?

Perséfone-¡Sí!

Me di cuenta de que me había mirado de arriba a abajo. Sí, esta mañana había decidido robarle una sudadera porque mi ropa estaba lavándose pero pensaba que lo sabía. Pero, ¿se estaba mordiendo el labio por eso?

Law-Tengo una sorpresa para ti.

Perséfone-¿En serio?

Me emocioné de repente, ¿qué podía ser?
Dejé las bolsas tal y donde me había indicado. Luego me fijé en que había dejado una en el sofá.

Perséfone-¿Está en esa bolsa?

Law-Sí, espero que te guste.

En el interior del plástico había un jersey corto color melocotón, una falda negra y unos zapatos también negros con un poco de tacón.

Perséfone-No hacía falta que me compraras ropa.

Law-He pensado que igual te hacía ilusión.

Había acertado, sin embargo no entendía por qué lo había hecho.

Law-Pruébatelo.

Subí a la habitación a cambiarme.
Me sorprendió ver que había acertado con la talla, me quedaba todo a la perfección.

Perséfone-¿Y bien? ¿Qué te parece?

Continuará...

Caperucita granate (One Piece)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora