Escritos u otros.

Hyphotermia.

El sentirme mal se ha vuelto algo normal.

Es raro, como las personas cambian rápido, y encuentran a alguien a un parpadeo. Te das cuenta de quién es esa persona después de que haya acabado todo, y te das cuenta que lo que decían era verdad. Y ahí es donde vienen las noches en vela preguntándote el qué hiciste mal o si es tu naturaleza el no ser amado. Supongo que sí, nací así. Nací para ser engañada, para creer fácilmente, y lamentablemente nací para decir el "te amo" con gran seguridad y honestidad.

Tarde me di cuenta que había gastado mis palabras y mi vocabulario en una persona que realmente no lo valía, había gastado notas y voz en alguien que no quería escucharme, y dolorosamente gasté amor por alguien que no lo recibía. Tarde me di cuenta, y es hoy cuando quiero pagar mis pecados y retroceder las manijas del reloj para poder decirme a mí misma que pare.

Amé sin recibir nada a cambio, amé sin pensar, y amé sabiendo que aquella persona no lo hacía.

El universo me lo dijo: "no llegarán a nada, y su historia no fue escrita". Las estrellas también lo dijeron: "sus nombres no pueden ser escritos por nosotras". Mis padres me lo dijeron: "sabemos que fue malo cómo te críamos, pues decidimos que el arte influyera en tus venas. Te enseñamos que amar es amar, y hacerlo es con honestidad, y que si no lo haces no lo digas pues estarías pecando. Te enseñamos a dar todo por quién amas, y dejar atrás todo lo que te lo impida. Te enseñamos a gastar voz, y melodías si es que querías hacerlo, y te enseñamos a morir por algo. Sabemos que está mal, pues mira cómo te ha influenciado, has dejado todo por una miseria de persona que realmente no te convenía y no te merecía. Gastaste todo tu amor, diste todo por la persona que amabas y dejaste atrás lo que te impedía hacerlo, gastate voz y melodías y te mataste por ella, aun si sabías que ella nunca lo haría. Y no puedo decir que estoy decepcionado, ni mucho menos que estoy orgulloso, pero eres mi sangre. Pero la amaste con alma y cuerpo, que cada noche le gritabas al universo que te deje amarla en paz, y le llorabas a las estrellas para que escribieran sus nombres con ellas. Pero la amaste, aún cuando ella no sabía el verdadero significado de amar, pues me dijiste, que cambiaba según la persona que le tocaba".

Tarde me di cuenta, cuando noté que no quedaba más de mí, y que había dado todo por ella creando un mar de lágrimas frías que me estaban ahogando y dando hipotermia.