Unintended (Lightning FF X Nero DMC)

Dos meses antes. Parte 2

No podía negarlo, a Nero le había encantado ese beso a pesar de lo corto que fue, algo en su interior se había alterado y sentía que el corazón le latía más fuerte. Aun se sentía mal por despedirse de Kyrie de aquella manera, además no había sido sincero del todo, pero creía que lo más importante ya estaba dicho, después de todo antes de ese beso no había nada concreto con la pelirosa. Con el tiempo ambos se habían ganado la confianza del otro y Nero podía notar que las bromas que antes le molestaban a Lightning ahora empezaban a agradarle. Lightning ya no le parecía un nombre tan familiar, quería llamarla por su nombre real como si eso le diera algún derecho sobre ella. Sacudió la cabeza para dejar de pensar tantas tonterías cuando escucho la voz de la chica llamarlo con la misma calma que la caracterizaba

—Nero—

—¿Sí? —

—¿Como supiste mi nombre? — al chico no le quedó más remedio que ser sincero

—Revise tu expediente cuando me asignaron como tu compañero—parecía que la pelirosa iba a quejarse cuando su rostro se suavizo y curvo una sonrisa en sus labios, esos labios que le pedían volverlos a besar

—Gracias por ayudarme— susurro Lightning a su oído antes de subirse a la motocicleta

———

De manera extraña el viaje de regreso le estaba resultando a Nero más largo de lo habitual, Lightning apenas le dirigía la palabra y él tenía la extraña necesidad de escuchar su voz

—¿Puedo saber por qué no te gusta que te llamen por tu nombre? —

—No me gusta que la gente sepa nada de mi en general, me siento más segura de esa manera— Nero asintió

—No quería hablarte por tu apodo, el tipo seguramente iba a sospechar si lo hacía— no sabía por qué volvía al tema que le seguía dando vueltas en la cabeza, tal vez tenía la necesidad de que Lightning le confesara que, aunque fuera en pequeña cantidad se sentía atraída por él, pero la pelirosa le contesto de una manera tan seca que prefirió poner fin a sus tontos pensamientos

—No hay problema, entiendo por qué lo hiciste— y así Nero decidió continuar el viaje en silencio con una inconformidad que lo carcomía por dentro.

Una hora después prefirieron tomar un descanso. Lightning solo le dirigió la palabra para recordarle que, si no comía, cualquier demonio podría matarlo con facilidad.

Aparcaron en un lugar tranquilo con grandes árboles y una bonita vista en general. La pelirosa escogió una banquita de cemento bajo la sombra de un hermoso cerezo, pero se sorprendió cuando Nero opto por sentarse en otra parte más alejada. Entonces la idea del beso llego a su mente y se dio cuenta del gran error que cometió. Al fin de cuentas el chico tenía novia y a pesar de las bromas entre ellos, Lightning estaba consciente que la quería.

La pelirosa suspiro y se puso de pie. Necesitaba hablar con alguien, pero no quería interrumpir a su hermana menor.

—Light— escucho decir al otro lado de la línea —¿pasa algo? —

—No, solo necesitaba hablar con alguien— suspiro nuevamente —¿cómo están las cosas? —

—Bien— contesto Noctis con cierta alegría —acabare con esta fastidiosa misión en una semana y podré volver a casa— Lightning sonrió

—Bien por ti— en verdad se alegraba por su amigo, al menos a alguien no le estaba yendo tan mal

—No llamaste por nada, cuéntame ¿qué pasa? — Lightning suspiro por tercera ocasión

—Bese a alguien y creo que no debí haberlo hecho—Noctis se rio

—Esta bien, te perdono— la chica también rió al otro lado de la línea —no creo que haya alguien a quien le moleste que una chica como tu lo haya besado, deja de preocuparte— le aconsejo

—Es que...— la voz de Nero llamándola a sus espaldas la interrumpió

—Es hora de irnos— el chico tenía un tono poco cortés nada característico a su actitud burlona o arrogante, incluso a Lightning le pareció excesivamente frió

—Noct debo colgar—

—Espera Light— unos segundos de silencio fueron suficientes para entender la preocupación de su amigo —eh escuchado cosas sobre tu compañero, solo ten cuidado, ¿quieres? —

—Por su puesto Príncipe Caelum— esto último hizo reír a ambos —te veo luego— aseguro la chica antes de terminar la llamada. Lightning miro el ceño fruncido de Nero y se sintió un tanto avergonzada por aquel estúpido chiste, así que se limitó a caminar hacia la motocicleta y justo en el instante en que pasaba a un lado de su compañero sintió un brazo rodearla por la cintura atrayéndola con fuerza hacia él. Los ojos color aqua de la chica se fijaron en el hermoso azul de los ojos de Nero por una pequeña fracción de segundo antes de que él se inclinara hacia ella para susurrarle en el oído

—No me gustan los juegos señorita Farron, mucho menos si involucran sentimientos— le advirtió con una voz tan seductora que le erizo la piel a la pelirosa.