Magia y Amor

Capítulo Nueve: Mito de la Destrucción

Rápidamente me cambié de ropa en el baño de chicas. Cuando salí, Arthur me estaba esperando, vestido con su propio traje. Él sonrió. "Bueno, creo que parece que estamos viviendo escondiéndonos de los dioses enojados", dijo. "La ropa sucia, un poco futurista, está funcionando totalmente para ti, por cierto".

"La señorita Mercia apreciará mejor todo el trabajo que hemos puesto en esto. Oh, puse los toques finales a los jarrones anoche. Las fronteras y esas cosas". Saqué los jarrones de mi bolso y se los entregué. Un jarrón representaba el atrapamiento de los dioses, y luego su escape. El otro jarrón mostraba la destrucción que los dioses llovían sobre los humanos, y Vesta escondía a un grupo de humanos para protegerlos.

Lo miró por encima. "Esto se ve increíble, Merlín. Eres un artista talentosa. No puedo creer lo bien que resultaron todas las escenas. Se ven realmente impresionantes".

Me sonrojé. "Gracias. Mi padre es dueño de una tienda de reliquias. Le gusta comprar cosas griegas y romanas siempre que puede. Lo he estudiado mucho a lo largo de los años y he practicado copiarlo".

"Se ve genial. ¿Estás lista?"

"Sí." Tomé su mano y entramos en la mitología. Vi a la señorita Mercia levantar una ceja en nuestra dirección.

Ella iba a amar totalmente nuestra presentación.

Éramos el último par programado para ir. Lo cual estaba bien conmigo, en realidad. Teníamos el mejor proyecto, de eso estaba seguro. Era mucho mejor que nadie que ya había ido.

"Arthur y Merlin, ¿están listos?" Preguntó la señorita Mercia.

"Sí", le contesté.

Fuimos al frente de la habitación, Arthur cargando los jarrones. Respiré hondo, y luego empecé. "No es divertido, ser uno de los últimos humanos vivos. Eso es mucha presión, ya sabes. El futuro de la raza humana depende de nosotros . Eventualmente, se espera que tengamos hijos, que ayudemos a continuar con nuestra especie ... pero mi novio y yo todavía no estamos preparados para eso. Nunca pensé que mi decisión de tener hijos se vería influida por la amenaza de extinción. Pero eso es lo que sucede cuando solo quedan treinta humanos en existencia. Solo treinta. se ha ido. Nuestras familias. Nuestros amigos. Se han ido. Somos los últimos humanos en el planeta ".

Arthur se hizo cargo. "Todo comenzó hace siglos. En la antigua Roma, los dioses eran adorados por casi todos. Eran la deidad del universo, prácticamente. Al menos, así se veían ellos mismos. Pero no todos amaban a los dioses. Y lentamente, con el tiempo". , dejaron de adorarlos. Los dioses se enojaron y se pusieron celosos, ya que son propensos a hacerlo. Comenzaron a planear la desaparición de los humanos. Querían deshacerse de las criaturas ingratas, como nos llamaban ".

"Pero algunas de las personas podían ver las señales", dije. "Sabían que los dioses se estaban enojando. Sabían que era solo una cuestión de tiempo antes de que los dioses los destruyeran a todos. Así que decidieron tomar acción. Atraparon a los dioses romanos, muy por debajo de la superficie de la tierra para protegerse. fueron atraídos allí por los humanos, y luego sellados con las herramientas de Vulcan ".

Arthur hizo un gesto hacia la clase. "La vida continuó para los humanos. Los dioses se convirtieron en nada más que un mito para ellos, para ser estudiados en las aulas de la escuela secundaria". Arthur y yo no pudimos evitar sonreír un poco ante eso. "Los humanos evolucionaron, inventando y construyendo cosas asombrosas. Siempre creciendo en su conocimiento. Mientras tanto, los dioses permanecieron atrapados en el suelo, cada vez más enojados y más enojados a medida que pasaban los siglos. Todos los dioses hicieron un voto, con la excepción de Vesta: cuando escaparan, destruirían a todos los humanos ".

"Y escaparon ellos lo hicieron", añadí con tristeza. "En el año dos mil veintiuno. Verás, hay límites para todo, incluso el poder de los dioses. Con el paso de los años, los poderes que mantenían a los dioses atrapados se volvieron más débiles. Lo suficientemente débil como para que una pala mal colocada permitiera Para que se liberaran. El arqueólogo que les había dado la libertad fue derribado, asesinado en el acto. Era, después de todo, un humano ".

Arthur puso su cara en una expresión de absoluta tristeza. "Y luego comenzó uno de los peores momentos de la historia humana. En todo el mundo, los dioses destruyeron a los humanos. El fuego llovió desde los cielos. Los rayos cayeron con una precisión mortal. Los elementos atacaron. Las mascotas atacaron a sus dueños. Los humanos estaban indefensos. contra los dioses. No había esperanza para la derrota, y mucho menos para sobrevivir. La furia de los dioses era algo terrible ".

Levanté una foto de un cuadro de Vesta. "Pero una joven diosa, Vesta, amaba a los humanos. Admiraba su tenacidad, su obstinación. Comprendió que solo habían atrapado a los dioses para proteger sus hogares y sus familias. No quería verlos borrados de la cara del planeta. Así que ella nos eligió a treinta. Nos escondió, nos protegió de sus compañeros dioses, de su propia familia ".

"Bajo tierra, donde nos hemos estado escondiendo, la tecnología es inútil. Así que la hemos escrito, para las generaciones que vendrán después. También hemos encontrado muchas reliquias diferentes aquí, incluso algunos jarrones. Mi novia y yo Pensé que los pintaríamos como lo hicieron en la antigua Roma. Definitivamente no es fácil, vivir bajo tierra. Pero estamos a salvo. Estamos vivos. Ahora mismo, eso es lo único que realmente importa ".

"Y algún día," dije, haciéndome cargo. "Saldremos de la clandestinidad. Algún día volveremos a ser una raza fuerte. Algún día enfrentaremos a los dioses".

Arthur y yo nos miramos. Juntos, dijimos, "y derrotarlos".

Nos sentamos de nuevo.

La señorita Mercia se levantó. "Bien hecho, Arthur, Merlín. Eso fue excelente. ¿Te importaría si pasara tus jarrones alrededor de la clase? ¿Los pintaste tú mismo?"

"Merlín pintó la mayoría de ellos", dijo Arturo. "Ella es una artista increíble".

Mis mejillas ardían.

Una vez que la atención de la señorita Mercia no estuvo en nosotros, le envié un mensaje a Arthur.

Creo que lo hemos echado a perder.

ACEDO CREDITO EXTRA POR SEGURO. ESOS VASES SELLAN EL TRATO.

SÍ, SÍ. USTED SABE, SOY ALEGRE QUE FUE NOS SOCIOS.

YO TAMBIÉN.

OTRA VEZ QUE PROBABLEMENTE NO TENDRÍA UNA FECHA PARA LA DANZA. :PAG

HAR HAR MERLIN.

Me sonreí a mi mismo Me sentía bastante bien. Lo hicimos genial en nuestro proyecto.