Parte 2

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Parte 2

Un estudio pequeño, pero realmente pequeño... Bueno,

Muy lejos de ser un estudio de ''verdad'' o profesional; Jimin practicaba con mucha emoción y fuerza, desde el día de ayer al enterarse de la audición que se hará no pudo evitar emocionarse y hablar con kai sobre cuánto se esforzaría.

Sí, él audicionaría.


Había hablado con una chica de su escuela, su mejor amiga que, conocía su casa y sabia que tenia un ''garaje'' en el que podría practicar. Ella amablemente aceptó.

Llevaba horas tratando de cantar y bailar al mismo tiempo, era difícil y tenia que dar lo mejor.

–¿Jimin? – interrumpió la chica – ¿Te interrumpo? – Jimin se detuvo al instante que la escuchó y apagó la música.

–Oh, Jennie, ya llegaste – Sonrió

–Sí, ¿qué tal te está yendo?

–Pues... Mal –rio – Pero trato de dar lo mejor

–Sé que puedes. Eres muy bueno en todo, es decir, tienes buena voz

–Gracias

–Acabo de llegar de la escuela, ¿Quieres comer algo?

–Oh, no, no, gracias. Quiero practicar un poco más

–Pero, Jimin, llevas desde las nueve de la mañana practicando, no fuiste a la escuela. ¡Tienes que comer algo!

–Estoy bien, Jennie. Tengo que esforzarme

Sin más, se retiró dejándole espacio para que pudiera practicar

Jimin no tenia nada en mente más que su baile y su canto saliera perfecto, él es un chico muy perfeccionista y se deprime rápido cuando algo no le sale como él quiere. Así que, esto debe dar su 300% mejor.

Faltó a sus clases para poder practicar, sabría que le perjudicarían en las materias

'' Pero hay veces que tienes que arriesgar ciertas cosas para que te vaya mejor en otras.''

Sus padres no sabían nada, él no les comentaría nada puesto que tras antes haber intentado tanto, ellos se rindieron y hablaron seriamente con él para que no dejase la preparatoria. Si llegan a aceptarlo les diría.

Jennie se encontraba cocinando un poco de ramen para ella y Jimin. Escuchaba la frustración y los suspiros de su amigo pelinegro cuando se equivocaba, sabia que su amigo se obligaba a veces hasta de más de lo que podía, pero hablar con él y que entendiera era imposible, aunque a veces ella siempre ganaba al convencerlo.

–¡Maldición! –Se quejaba Jimin y corregía su garganta

–Jimin... –Interrumpió de nuevo Jennie – Sé que quieres que tu voz sea perfecta pero, si la esfuerzas de más; puede que en estos días tu voz se desgaste o canses tu garganta, debes cuidarla

–Cierto... –Sonrió con un poco de pena – Creo que, lo dejaré por hoy hasta aquí

–Bien –Sonrieron – Estoy haciendo ramen, entra para que comas un poco –Asintió

En la entrada se quitó los zapatos y pasó hasta la cocina, mientras charlaban un poco.

–¿Qué compañía es?

–Big Hit Entertainment

–Nunca había escuchado ese nombre

–Ni yo, pero Kai me lo comentó y pues, no pierdo nada con intentar

–¿Es aquí en Busan?

–No, en Seúl

–¿Ah? ¿Cómo le harás para ir? Si tus padres son lo saben

–Lose, me iré un día antes, huiré

–¿Es en serio, Park Jimin? ¡Y dejar a tus padres asustados!

–Ya veré qué me invento... –Jennie negó molesta, su amigo a veces hacia mal las cosas. Pero tenía más hambre que ganas de pelear así que prefirió comer.

Se sentaron en la alfombra de la sala, uno frente al otro compartiendo el ramen, escuchando música, platicando sobre cualquier tema.

–¿Me puedes prometer algo? –Jimin la miró con seriedad

­–Uhm, sí, dime

–Si llegará a quedar... lo cual, es el 99% seguro de que no pero, si sí, quiero que me prometas que tu y yo seguiremos hablando y viéndonos–Jennie se enrojeció un poco ante aquel comentario

–S-sí... Pero... –Estaba completamente enrojecida –¿Por qué ese comentario tan repentino?

–Sabes por qué... Solo prométemelo

–S-sí...

***

Segundo día de práctica. 

Domingo.

 Los padres de Jennie lo conocían desde hace tiempo, así que el ir a practicar en su garaje no era ninguna molestia para ellos.

Pasadas de las nueve de la mañana se encontraba calentando su garganta, primero practicaría el canto y después un baile lento, contemporáneo que él mismo invento para la canción.

Jung II Young era de sus cantantes favoritos, así que por eso decidió cantar Reason de él. Aparte de que era algo lenta y podía controlar con facilidad su voz, y el baile sería fácil de hacer, puesto que tuvo clases de baile contemporáneo hace tiempo.

Los padres de Jennie escuchaban la voz de Jimin atentos, e inclusive bajaron el volumen del televisor para escucharlo mejor, sonreían, pues él tenía una voz angelical. En cambio, Jennie se sentía orgullosa de él, estaba emocionada de volver a verlo motivado.

Jimin sentía presión y emoción a la misma vez, el imaginar que al momento de audicionar escuche un ''¡Sí!'' , sería lo mejor de su vida. De hecho, su emoción volvió a volar de más, imaginándose una presentación, firma de autógrafos, comeback tras comeback, tours, el futuro fanchat de su fandom, todo eso y más lo hacían sonreír hasta el hecho de derramar lágrimas, esto es algo que de verdad quería. 

Su corazón latía cada vez más por la emoción y ansiedad, sus manos sudaban y sus piernas temblaban, es ahí donde pertenece, a la música.

Volvió a reproducir la canción, suspiró, y desde lo muy profundo de su pecho comenzó a cantar y bailar delicadamente, pausas correctas y pasos correctos, tomaba aire en los puntos clave, un paso difícil y contenía su voz, sus manos se movían a la sintonía de la música, sus ojos se imaginaban una presentación, su corazón una emoción ... Miles de sentimientos relucieron en esa práctica. Todo tan delicadamente.

Al momento de acabar la canción hizo un ultimo paso más, abriendo sus ojos hacia el techo. Cinco segundos después escuchó algunos aplausos que provenían desde la puerta, eran Jennie y sus padres. Sonreían.

Jimin se avergonzó pero hizo una reverencia como agradecimiento

–Bailas hermoso –Comentó la madre

–¡Y el canto ni se diga! – Dijo orgullosa Jennie

Jimin estaba completamente avergonzado tras comentarios positivos que le hacían. Con tan solo un día y medio de practica sintió que estuvo perfecto. Se revolvía su cabello oscuro, tratando de evitar las miradas, penoso

Pero aun así siguió practicando, no podía confiarse, no a tres días antes de la audición. Esto era importante

''Vamos, Jimin, tú puedes''

Su mente se llenaba de motivación por sí sola. Él podía, lo sabía.

Park JiMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora