CAPÍTULO IV

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CAPÍTULO IV
DONCASTER/ REYNO UNIDO
26/12/XXXX
11:43 A.M

Louis abrió un poco los ojos, no se dio cuenta en que momento quedo completamente dormido, su espalda dolía horrible y su cabeza ni se diga. La resaca estaba al mando del cuerpo de Louis en ese momento.
Enfocó mejor la vista y se dio cuenta que estaba en la bañera, tenía una corbata al rededor de la cabeza demasiado apretada y el pecho al desnudó con rayones por todos lados.

Se levanto de la bañera intentando llegar al espejo, sus piernas se sentían débiles. Llego al espejo y se recargo en el lavamanos, al menos su cara no estaba pintada pero el lóbulo de su oreja dolía.
Giro un poco su rostro para mirar de que se trataba y en el lóbulo de su oreja descansaba un piercing negro.

¿Tan borracho se había puesto que no sintió el dolor de la perforación? Maldita bebida desconocida que no lo dejaba ser consiente de sus actos.
Nego con la cabeza y salió del cuarto de baño, en el cuarto ya no había nadie, solo había basura y mas basura, botellas de alcohol terminadas y otras a la mitad, latas de cerveza por todos lados y bolsitas de la marihuana y cocaína que los presentes habían ingerido.

Camino hasta la barra intentando buscar su teléfono pero le era imposible con tantas cosas tiradas al rededor de él.
Camino por un montón de basura e intento patear lo que parecía ser una pelota negra, sin importancia la pateó pero se sintió demasiado blanda y un Niall con un boxer en la cabeza salió de ese montón de papeles y botellas tocando su mano lastimada.

—¿¡Que mierda te pasa Tomlinson!?— Grito adolorido.

Louis soltó una carcajada pero paro a los pocos segundos debido a las punzadas en su cabeza. ¿Tan mal se habían puesto?

—Lo siento Niall— se disculpó entre risas— Estuvo buena la fiesta de navidad he, dejaron un desmadre en mi cuarto.

—Maldición, ¡no hables tan alto!— se quejó el rubio tocando su cabeza con una mano y la otra la extendió en dirección a louis— Llévame a mi cuarto.

—Vives dos pisos abajo, puedes ir en el elevador— Dijo Louis al mismo tiempo que tomaba su mano.

—Llévame tu Louis, ¿no te pones a pensar que me puedo desmayar a mitad de camino y golpearme la cabeza? ¡Este internado se quedaría sin reyna!

—Dramático.

Niall se levantó del suelo con ayuda de Louis y caminaron fuera del cuarto, los pasillos estaban muy limpios, no había ni un rastro de botellas o cenizas de cigarrillo. Era como si en los pasillos no hubiese estado gente tomando como locos.

Niall colocó su brazo al rededor de los hombros de Louis y ambos caminaron hasta el elevador, Niall presionó el botón correcto y entraron.
Cuando las puertas se abrieron dos pisos abajo bajaron y caminaron hasta el cuarto se Niall, el cual era muy fácil reconocer porque tenía en su puerta "NIALL" con letras doradas, ese niño mas banidoso no podía ser.

Lo dejo en su puerta y se despidieron con un beso en la mejilla, Louis de dio vuelta intentando caminar al elevador y pensando como le haría para limpiar todo el cuarto, tal vez Camille le ayude. Tiene que, viven juntos y ella fue una de las organizadoras.

Las puertas mecanicas del elevador se abrieron dejando ver a un lindo niño pelirrojo, Louis sonrió como estúpido al mirar a Edward parado frente a el. Vestía un lindo pantalon negro y un sueter guinda, su cabellera pelirroja estaba al descubierto y algo despeinada y a las fosas nasales de Louis llegó un delicioso olor a colonia.

RELIGIÓN GAYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora