Escribiendo una canción - Claumilia

Capítulo 5

Claudio me pidió que le pregunte a Antonia que le gustaría recibir de cumpleaños, ya que su fiesta es a mediados de a Octubre y quiere darle un regalo y así tener mas oportunidades con ella, desde que platicó con ella la semana pasada ha estado más intenso pidiéndome que investigue cosas para que pueda enamorarla.

—¿Piensas invitar a todos a tu fiesta? -le preguntó Machu a Antonia.
—Sólo con los que me llevo, pero igual ustedes pueden invitar a quien sea.
—¿En serio no te molesta que lleve a León?
—No, para nada y Emilia tu puedes invitar igual a quien sea, sólo recuerden que es de disfraces o no entran -se empezó a reír, ya me había comentado Machu que Antonia es algo estricta con sus fiestas, así que si le creo que no nos deje entrar sin disfraces.
—Gracias... ¿Y que te gustaría que te regalen? -le pregunté recordando que Claudio me pidió que investigara.
—La verdad me da igual, ya sabes que a mi no me importa -sonrío- pueden ir  sin regalo.
—Pero... ¿hay algo que quieras?
—Hmmm -se quedó pensando un momento y no se le ocurrió nada- puede ser lo que quiera, desde un llavero, chocolates, tarjeta de regalo, de verdad no me importa.
—¿Y que prefieres que te regalen algo comprado o hecho?
—Bueno Emilia ¿Porque tanta insistencia? -no recordaba que Machu seguía aquí.
—De seguro Claudio te pidió que investigues ¿verdad? -me volteo a ver Antonia alzando una ceja esperando por mi respuesta.- Emilia, me mencionas a Claudio cada que tienes oportunidad, ya te dije que yo soy la que decidiré -me sonrío y le devolví la sonrisa algo apenada.

Salí del cuarto algo apenada con Antonia porque era verdad, no le dejaba de mencionar a Claudio desde que salieron la semana pasada. Fui a la cafetería ya que tenía mucha hambre y me puse enfrente de la barra de chocolates para ver que escogía, agarré un Carlos V y ya me estaba yendo cuando escuche que una voz me hablaba.

—¿Ya no saludas? -rápido reconocí quien era y voltee a verlo, sin uniforme se veía más guapo de lo normal.
—Eh... Hola, perdón no te había visto. -dije algo apenada .
—No te preocupes -me sonrío- ¿Y que tal tu vida?
—Normal -le sonreí y me sentía muy boba sonriéndole por todo- Oye... ¿Quieres venir a una fiesta de una amiga? será de disfraces.  -no se de donde saqué el valor para invitarlo, estaba sorprendida. 
—¿Es de Antonia no? Vi que varios andan hablando de esa fiesta, claro que me gustaría, si quieres po...  -vi como paro de hablar para voltear a ver a Claudio que se acercaba a nosotros.
—Eh perdón por interrumpir -tenía ganas de matar a Claudio con la mirada- pero Kevin, me dijo papá que te diga que mañana pasa por nosotros para ir a comer.
—¿Y no me lo podías decir por mensaje? -se podía notar la tensión entre ellos dos-
—Te vi y se me ocurrió venir a decírtelo.

—Bueno está bien ..Emilia ¿Me puedes pasar tu whastapp para ponernos en contacto por la fiesta?

—Eh si -le sonreí olvidando que Claudio seguía aquí y le pasé mi número.
—Gracias -me sonrió mientras anotaba mi número- Te mandaré mensaje -cuando kevin se fue rápido voltee a ver a Claudio con una cara de pocos amigos.

—¿Es enserio? -le pregunté, vi que él no respondió y me fui a mi cuarto enojada- 

Al día siguiente me encontraba con Machu,  Pablo, Romina y León en el patio, platicando sobre que disfraces llevarán a la fiesta de Antonia para que no vayamos iguales. 

—Tu Romi debes de llevar un disfraz de monja por favor -empezó a molestarla Machu- con eso de que nunca has tenido novio. 

—Machu déjala en paz -defendí a romi al ver que estaba algo incomoda porqué Machu siempre le recordaba que nunca ha tenido novio ya que se conocen desde antes de entrar a la preparatoria.

—Ay está bien, odio cuando te pones de defensora,  romi y yo así nos llevamos -le sonrió a su amiga- Yo creo de gatúbela.

—Así te llevas tu conmigo porque yo no eh -se defendió Romi- Yo creo de Cenicienta malvada. -dijo y todos empezamos a reír. 

—Yo de Harry Potter -dijo Pablo, mientras yo me quedaba pensando en que podía disfrazarme.

—Miren, si que pasará algo entre ellos dos -señaló León a dos personas que estaban cerca de nosotros platicando muy cerca, eran Claudio y Antonia que se veían felices ya que sus risas se escuchaban desde aquí.

—Emilia, te ves enojada, tranquila -se empezó a reir Machu, sin duda ya había agarrado confianza conmigo, porque se vuelve molestosa. 

—No, es sólo que Claudio ayer llegó a interrumpir mi plática con Kevin y ni siquiera me pidió disculpas. 

—Escuché que esos dos se llevan mal, pero es normal porque son hermanastros y obvio hay rivalidad -me comentó Romi-

—¿Kevin el de segundo? -asentí cuando Pablo me preguntó- Escuché que sólo quiere llevarse a las niñas a la cama, así que de seguro Claudio te está protegiendo.

 —No hay que creer en todo lo que dicen, ya saben como es Like -denfendí a mi amado Kevin. 

Después de una gran plática con mis amigos fui hacía el salón de música, ya que ahorita estaba vació y quedé con Claudio para avanzar el proyecto de matemáticas en donde estamos juntos, seguía un poco enojada con él, pero cuando llegó al salón me llevó un helado, así que fue imposible seguir enojada con él porque sabe cuanto amo los helados. 

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Faltaba una semana para el cumpleaños de Antonia y todo seguía normal, sin dramas ni chismes, e incluso se me hacía raro que like estuviera tan tranquilo. Me encontraba con Claudio en el jardín ayudándolo con el regalo de Antonia, ya que le di la idea de que le hiciera una caja con regalos adentro y unas frases bonitas,  porque ella tiene de todo e iba a ser imposible saber que comprarle, pero Claudio es muy malo haciendo manualidades así que te tuve que ayudar.

—No,  tiene que ser de color rosado -le dije a Claudio ya que él había traído pintura verde- recuerda que es el color favorito de Antonia. 

—Si si es verdad -dijo mientras agarró la pintura rosada que yo había traído para pintar la caja- ¿Cuales me habías dicho que eran sus chocolates favoritos? -me preguntó.

—Snickers y ya los compré porque sabía que se te iba a olvidar -reímos mientras los sacaba de mi bolsa- Igual traje unas Chips porque las ama. 

—No se qué ponerle en los post-its -me dijo algo preocupado-

—Puedes ponerle las cosas que te gustan de ella , como por ejemplo "tu sonrisa es única" o "me encanta tu forma de ser", igual te imprimí un poema para que esté con las demás cosas.

—¿Que poema? 

—Uno que yo escribí para que se lo des, pero obvio dirás que lo escribiste, y que querías dedicárselo,ya que ella ama los poemas. 

Me pasé toda la tarde ayudando a Claudio a hacerle la caja de sorpresas a Antonia e incluso me perdí mi clase de Yoga, sin duda le va a encantar ya que igual lo ayudé a escribirle una carta en donde le pedía una oportunidad para que fueran novios, literal yo escribí todo porque Claudio no sabía que ponerle, y la verdad es que no me quedó nada mal.

—La verdad es que Antonia si se fijará en tí después de ver la caja, ya que no cualquiera le escribiría cartas a mano... bueno aunque en realidad yo la hice -los dos empezamos a reir cuando dije eso.

—Emi, no se que haría sin ti, eres la mejor -sonrió al ver la caja terminada.