2. ¿Recreo o infierno?

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Cuando llega la hora del recreo, me siento en un rincón, en mi rincón, donde da el sol. Me como el bocadillo mientras deseo que suene el timbre de nuevo.Cada día la misma rutina, ¡esto tiene que acabar! Tras pensarlo bien, decido que no me hará mal ir a un grupito de chicas e intentar ser algo sociable por una vez.

De camino, me pasan múltiples preguntas por la cabeza: ¿Y si me dicen que me vaya?, ¿Y si me ignoran?, o algo peor, ¿Y si se van y me dejan sola de nuevo? Como esos pensamientos solo hacen que me ponga mas nerviosa, decido vaciar mi cabeza de cualquier tontería que no sea sonreír y decir "hola" sin tropezarme al hablar.

Cuando acabo el camino interminable, suelto el saludo, sin mas; y me quedo de pie, a la expectativa de su respuesta. Se giran todas de golpe y me miran, algunas tienen caras de asombro, aunque otras parecen indiferentes. Al fin, una de ellas se digna a responderme con un sonoro y chillón: ¡Hola!

En estos momentos no se como sentirme, por una parte estoy feliz de que me hayan contestado sin ningún tipo de ironía; aunque la parte negativa, es que al no haber entablado conversación con nadie, desde hace bastante tiempo, no se que decirles. Y sin pensarlo, suelto:

-¿Me puedo sentar con vosotras?- y añado- Me gustaría que la gente me conociera tal y como soy, al fin y al cabo, no tengo visión laser ni nada de eso.

Ellas sueltan unas tímidas risitas, ¡creo que les he caído bien! Espero que de una vez por todas la gente se ria conmigo y no de mi, como normalmente hacen... Tras unos segundos, que me resultan interminables,me contestan:

- Siéntate, quizás nos resultes útil durante lo que queda de patio.- y como hasta ella se había dado cuenta de lo grosero e insoportable que había sonado su cruel comentario, añade- No pareces tan rara como dicen, al fin y al cabo, no hay que juzgar a un libro por su portada.

Las demás me miran mientras me desplazo deprisa hacia un hueco libre entre dos de ellas. Algunas me sonríen, otras comentan con su compañera mi aspecto. En cuanto me siento empiezan a hablar de cosas que no entiendo,me siento desplazada, y me maldigo a mi misma por haber hecho este esfuerzo para nada.Mientras me torturo a mi misma, me doy cuenta de que todas me están  mirando. Al parecer me han hecho una pregunta y yo no estaba prestando atención, y digo:

-¿Que?- suelto intentando parecer despreocupada e indiferente.

-¿Que si a ti te gusta algún chico?- me pregunta la que había sido grosera y desconsiderada conmigo unos minutos antes.

-¡NO!- respondo enseguida sobresaltada por esa pregunta. Si les digo la verdad puedo correr el riesgo de que el rumor se esparza por todo el instituto y acabe sabiéndolo el.

-¿Segura? No pareces muy convencida.- Me dice con ironía, y tiene razón, tengo que aprender a disimular un poco mas lo que siento.

-Si, ahora mismo no me llama la atención ningún chico- mentira, estoy irremediablemente enamorada de él- ya tendré tiempo de enamorarme y todas esas cosas, aun es pronto. 

Me miran con cierto asombro, creo que he dicho algo mal. Para mi sorpresa,vuelven a murmurar las unas con las otras. Pero entonces, cuando una ya se había decidido a hablar, suena el timbre. ¡Salvada por la campana! 

 

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